Gracias a ti, Fernando, por dejarme tus amables palabras.Fernando Marcos Rentero escribió: ↑Lun, 29 Sep 2025 17:41 Carta de presentación, de una insumergible poeta. Bonito, bonito. Gracias Marisa. Un abrazo.
Me alegro de que te guste.
Un abrazo.
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Gracias a ti, Fernando, por dejarme tus amables palabras.Fernando Marcos Rentero escribió: ↑Lun, 29 Sep 2025 17:41 Carta de presentación, de una insumergible poeta. Bonito, bonito. Gracias Marisa. Un abrazo.
Gracias, Alejandro, celebro que te haya gustado.Alejandro Costa escribió: ↑Lun, 29 Sep 2025 19:38 Un mascarón de proa, precioso.
A pesar de lo breve, se siente la intensidad, la profundidad de los versos.
Y resurjo de nuevo envuelta en mil abismos.
Sobre el mar y las olas renazco en lo más alto.
Este final es un cierre perfecto.
Un beso.
Muchas gracias, Julio, celebro que esta singladura te haya gustado.Julio Gonzalez Alonso escribió: ↑Mar, 30 Sep 2025 9:34 Pues creo que has hecho mu bien en volver a este "mascarón de proa" y retomar la singladura, Marisa. Abrazo y salud.
Gracias, Paco, por acercarte a este poema que siempre se me queda “al fondo”F. Enrique escribió: ↑Mar, 30 Sep 2025 17:36Las tormentas,
dibujan arrecifes en mi rostro que ríe
ocultando la pena.
Bello el poema que nos ofreces, Marisa.
Un abrazo.
Gracias, Ramón, me alegro de verte en este poema de olas encrespadas.Ramón Castro Méndez escribió: ↑Mar, 07 Oct 2025 10:44 Muy hermosos versos, breves, concisos y directos, para enfrentarse a las adversidades. Nada mejor que renacer sobre la cresta de las olas. Felicidades.
Un gran y afectuoso abrazo.
Cuando la vida te golpea, sea de una u otra forma, no sirve de nada arrugarse y hay que plantarse de cara a los problemas, aunque duelan, aún sin fuerzas.Ramón Carballal escribió: ↑Mié, 08 Oct 2025 17:11 Me gusta mucho lo positivo y vital del poema. Hacer frente a la adversidad con férrea voluntad. Buen mensaje nos das. Un abrazo.
Lisandro Sánchez escribió: ↑Vie, 10 Oct 2025 19:51 Qué bueno este poema, Marisa. Tiene el ímpetu del mismísimo mar.
Ya te he contado que solo un par de veces en mi vida he estado en el mar. He nadado un poco en el Atlántico bravo y frío de la Patagonia Austral, ventosa y arisca. Cierta vez una ola, no sé qué hizo con migo, y aterricé en la costa creyendo que me había partido el cuello.
Acostumbrado a cruzar nadando mi Río Paraná, el Majestuoso, entre barcos de ultramar y barcazas más grandes que los barcos; luego en el mar sentí que mi río era un arroyo; y yo, una pulga.
Pues ahora he nadado en el oleaje altivo de este poema y he sentido que el mar y el ser, tu ser, se han fundido, y se han sintetizado en un concepto que me parece la definición misma de la mar: "soberbia".
Mis modestas felicitaciones y un gran abrazo.
Lisandro
Celebro que te haya gustado, Paco, gracias.