Este comentario, viniendo de uno de mis poetas favoritos, me hace el día.Israel Liñán escribió: ↑Lun, 30 Dic 2024 23:55 " el dolor siempre exige poesía."
Impresionante final para un poema igual de impresionante, Ara.
Un abrazo.
Un abrazo, Israel.
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Este comentario, viniendo de uno de mis poetas favoritos, me hace el día.Israel Liñán escribió: ↑Lun, 30 Dic 2024 23:55 " el dolor siempre exige poesía."
Impresionante final para un poema igual de impresionante, Ara.
Un abrazo.
Querido Alejandro, me alegra mucho que te haya gustado.Alejandro Costa escribió: ↑Mar, 31 Dic 2024 14:26 Porque la felicidad puede ser muda,
pero el dolor...
el dolor siempre exige poesía."
Genial, de principio a fin, esta historia poética.
Estos versos finales me han enamorado.
Un beso.
Feliz Año Nuevo.
Salud, paz y felicidad.
Estimada Carmen, muchísimas gracias.Carmela Viñas escribió: ↑Jue, 06 Feb 2025 22:59 La fuerza expresiva de tus versos, y el mensaje lo vuelven muy bello, Ara.
Te felicito por esta inspiración y este merecido reconocimiento.
Un placer leerte.
Abrazos.
Muchísimas gracias, mi querida Pilar.Pilar Morte escribió: ↑Lun, 10 Feb 2025 13:35 Sólo el final es un hermosísimo poema, pero todo él vuela alto. Me encantó leerte.
Un abrazo grande y felicidad
Lisandro, me alegra que te haya gustado el poema y la historia que comentaste de tu abuelo me pareció genial. Mi poeta existió de alguna manera.Lisandro Sánchez escribió: ↑Mié, 07 May 2025 15:42 ¡Demoledor!
Limpio y certero como estocada de puñal.
Humildemente, felicitaciones.
Un gusto, Ara.
Un cordial saludo desde el sur argentino.
Lisandro
PD: Prefiero pensar que se puede, también, ser poeta, de la felicidad; pero esto es muy personal, y probablemente, una auto-patraña.
PD2: El poema me ha recordado algo. Una vez, fortuitamente, conocí a un viejo lustrador de muebles de mi ciudad natal. Resultó que había conocido a mi abuelo, carpintero, y poeta. Y me contó que alguna vez, hacía muchos años, cuando yo ni habría nacido; en una noche de compañeros, de sobremesa, y de vino; mi abuelo, a quien apodaban "el gordo", y también "el gallego", se paró sobre una silla vieja y recitó sus poemas.
Mi estimada Marisa, muchas gracias por detenerte acá y por compartir conmigo tus impresiones.Marisa Peral escribió: ↑Sab, 17 May 2025 10:27 Querida Ara, cinco meses después y gracias al rescate de Lisandro, vengo a enviarte mi enhorabuena por este poema que merece todas las felicitaciones y reconocimientos.
Me gusta muchísimo de principio a fin.
Un abrazo muy grande.
Querido Rafel, siempre has sido muy receptivo y amable conmigo y, sobre todo, con mis letras. Has elogiado algunos poemas, me has ofrecido consejos en otros, y siempre me he sentido agradecida y cómoda con tus palabras, pero he de admitir que me ha tomado por sorpresa encontrarme con este análisis.