La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Cuentos, historias, relatos, novelas, reportajes y artículos de opinión que no tengan que ver con la poesía, todo dentro de una amplia libertad de expresión y, sobre todo, siempre observando un escrupuloso respeto hacia los intervinientes.
“Estaba en el baño preguntándome si me masturbo demasiado”. Afirmaba por la radio una joven que había leído que unos momentos de gozo y sudor pueden liberar mente y cuerpo de tensiones y stress. Le preocupa estar fuera de lugar y desearía consultar porqué la masturbación la hacía sentirse bien. El amor a uno mismo podría ser un primer paso hacia el amor a los demás. Pero hemos oído historias acerca de la maldición de dios. Entonces qué hacer si uno se levanta cada mañana con un pene erecto que mediatiza sus actos. ¿No es peor levantarse de mal humor?
Confieso que entré a leer animado por la promesa de las 100 palabras, y luego, ¡zás!, el tema del onanismo femenino -menos cacareado que el masculino- en primer plano. No me queda más remedio que inclinarme por la alegría del placer solitario, pues tal y cómo indicas, si la naturaleza proporciona erecciones matutinas sin pedirte permiso, aunque se trate de priapismo mañanero, algo de razón tendrá la naturaleza que tira pa'lo suyo.
Una alegre y beneficiosa reflexión, Alonso.
Salud.