En cuerpo y alma

[Óscar Bartolomé Poy]

el final es una profunda reflexión, te aplaudo por ello compañero


un abrazo

.

Me alegro de que te haya gustado lo reflexivo de mis últimos versos. Creo que la filosofía ayuda a fortalecer la poesía.

Un abrazo, Alonso.

[Óscar Bartolomé Poy]

¿Qué queremos decir cuando decimos alma?. Seguramente algo que está incluido en el cuerpo. Pero exista o no hay que seguir hablando de ella, porque hace referencia a sentimientos, pensamientos, sueños, recuerdos, etc...que están muy bien expresados en este poema. Además, aunque sepamos los ingredientes de una tarta de chocolate nos sigue gustando. Lo mismo ocurre con el amor.

Si la felicidad consiste en no pensar en ser feliz,
y la muerte es la pérdida definitiva de la consciencia,
la muerte es el mayor estado de felicidad al que se puede llegar.

Me gusta este silogismo aunque sea un sofisma;
mejor dicho, me gusta este silogismo porque es un sofisma.

Si al dormir no supiésemos que vamos a despertar,
no habría ninguna diferencia entre soñar y morir.

Estos versos en que usas muerte, amor y sueños creo que están muy logrados. Se merecen un poema aparte. Son temas distintos con el principio del poema. No acabo de ver la hilazón. Seguramente por miopía mía. ¿Me puedes explicar qué has pretendido hacer al tratar temas tan distintos?
Un abrazo y mi enhorabuena.

Verás, no me he preocupado de buscar esa ilación, porque estimo que un poema no tiene por qué tener necesariamente una unidad temática. Muchos de los poemas que escribo (y éste es un buen ejemplo) son reflexiones que tengo a lo largo del día, en cualquier momento o lugar (pues así son las ideas, caprichosas, se presentan de forma inopinada, sin avisar). Con todo, sí hay un nexo, aunque no lo haya buscado a conciencia, pues en los primeros versos empiezo hablando del cuerpo, de la fisicidad, para después centrarme en el alma.

Muerte, amor y sueños. Son tres temas capitales dentro de mi poesía, y creo que toda una vida no me daría para escribir una mínima parte de lo que pienso y siento acerca de ellos.

Gracias por tu exhaustivo comentario, Sergio. Es muy agradable que te lean con tanta atención.

[Tristitia Marisol]

No me extraña que en tu poesía invites a la reflexión, -en realidad, creo que es lo que más me gusta de tu poesía-. Ahora, con este paseo introspectivo.
Me dejaste pensando con:
"Para no sentir dolor basta con no pensar en que te duele. "
Es probable, pero en ocasiones duele más pensar que no nos duele.
Esta distinción que haces de separar el dolor como un estado mental y ya no físico, es brillante. Me lleva a pensar si es que finalmente no sólo el dolor, sino todo lo físico, sea parte de un estado mental, o es que es el cuerpo el que domina la razón.
"Si la felicidad consiste en no pensar en ser feliz,
y la muerte es la pérdida definitiva de la consciencia,
la muerte es el mayor estado de felicidad al que se puede llegar. "
Pero al no conocer la muerte, no podríamos afirmarlo. Nadie nos dice que nos haga más conscientes. De todas formas, creo que todos le tememos. Un excelente sofisma, como dices.

"Si al dormir no supiésemos que vamos a despertar,
no habría ninguna diferencia entre soñar y morir.

Es triste que el cuerpo muera mientras el alma sueña. "

Yo creo que soñar, es una pequeña muerte, claro que la consciencia de que despertaremos del sueño, no lo hace tan escalofriante.

El verso del cierre, redondo.
Un abrazo, grandote.

[Óscar Bartolomé Poy]

No me extraña que en tu poesía invites a la reflexión, -en realidad, creo que es lo que más me gusta de tu poesía-. Ahora, con este paseo introspectivo.
Me dejaste pensando con:
"Para no sentir dolor basta con no pensar en que te duele. "
Es probable, pero en ocasiones duele más pensar que no nos duele.
Esta distinción que haces de separar el dolor como un estado mental y ya no físico, es brillante. Me lleva a pensar si es que finalmente no sólo el dolor, sino todo lo físico, sea parte de un estado mental, o es que es el cuerpo el que domina la razón.
"Si la felicidad consiste en no pensar en ser feliz,
y la muerte es la pérdida definitiva de la consciencia,
la muerte es el mayor estado de felicidad al que se puede llegar. "
Pero al no conocer la muerte, no podríamos afirmarlo. Nadie nos dice que nos haga más conscientes. De todas formas, creo que todos le tememos. Un excelente sofisma, como dices.

"Si al dormir no supiésemos que vamos a despertar,
no habría ninguna diferencia entre soñar y morir.

Es triste que el cuerpo muera mientras el alma sueña. "

Yo creo que soñar, es una pequeña muerte, claro que la consciencia de que despertaremos del sueño, no lo hace tan escalofriante.

El verso del cierre, redondo.
Un abrazo, grandote.

Lo de que te guste la reflexión en mi poesía quizá se deba a que muchas veces se descuida esa parte, o simplemente se opta por dar otro enfoque: nostálgico, romántico, emotivo o lírico, en sentido estricto. A mí me gustan los poemas que tratan de combinar todos esos elementos, aunque es difícil hacerlo, y más aún hacerlo bien.

Está claro que el dolor tiene mucho de psicológico. De ahí el efecto placebo. Aunque en mi poema parezca que intento separarlos, considero que cuerpo y alma están indisolublemente unidos. El cuerpo no deja de ser un vehículo sensitivo, a través de él obtenemos las experiencias que enriquecen nuestra alma.

El sueño es un pequeña muerte, al igual que el orgasmo, aunque no escuchemos la risa del diablo. Me atrevería a decir más: es un ritual de iniciación a la muerte. El último verso es el más hermoso, poéticamente hablando. Estamos de acuerdo.

Abrazos tristónicos, mi estimada amiga Tristitia. Gracias por estar en mis poemas.