Marina Centeno escribió:algo que nos sacuda este confort de días duplicados,
de noches con las manos en la boca
y el grito de un cadáver en el vientre.
Un final crudo, cruel, pero a la vez certero, firme, real. A veces la perfección nos abochorna.... y nos hace querer dar traspie en lo imperfecto. Muy justo es exigir algún error que nos haga apreciar tanta belleza.... me encantó, Carmen, como todo lo tuyo... un fuerte abrazo.
Saludos.
Me alegra que te gustara, Marina, y sí, supongo que la perfección es muy aburrida...Muchas gracias por asomarte.
Un abrazo,
Carmen