INVOCACION A MIGUEL HERNÁNDEZ

[Juan Vicedo]

Que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.
Miguel HERNÁNDEZ.

Levántate, Miguel, que ya es la hora
de recoger azahares y recontar limones
del pecho enamorado de la sangre.

Sin otras desventuras, sin más amargos
besos de la muerte, te acercas a nosotros,
vienes a nuestra alba y te ríes, con fuerza
al ver cerca tu mar y tu montaña,
el baño fresco y puro en las aguas del río
y el salto siempre verde del rebaño.

Juegas tú sin el miedo
de quienes sufren dogmas, pesados apotegmas
de dómines fanáticos, de clérigos sin alma
y sin piedad vestidos.

Vienes tú de las flores, de las almenas altas
de las rocas y sierras,
para dejar aquí, en este día
tu palabra vibrante
y tu sangre viril, que derramabas
sin importar el precio ni el fuego de fusiles.

Vienes tú de las flores,
y te esperan las flores que tú siembras.

[Concha Vidal]

¡ Por Dios, qu este poema esté sin comentarios ...¡¡

Bueno, ya te dije y repito, qu si no fuera porque no lo ha escrito Miguel, sino Juan, casi lo equivocaría.
Abrazos hasta San Juan.

[Pilar Morte]

Muy hermoso tu poema. Un placer seguir tus versos
Abrazos
Pilar

[Tristany Joan Gaspar]

Hola Juan.
Impresionante homenaje a la poesía de Miguel Hernández.
Se nota la devoción y el carió para no sólo rendirle tributo sino para prolongar su estilo, su libertad, su carisma en tus versos.
Muy conseguido y excelente lectura.

Mis felicitaciones y un afectuoso abrazo

Joan

[Daniela Miño]

Felicitaciones, Juan, espléndido homenaje.

Un placer leerte.

Un beso enorme.

[Juan Vicedo]

Daniela Miño: Muy agradecido por tus palabras. Es muy difícil no recordar a Miguel Hernández, tan prematuramente muerto. Un abrazo.

[Juan Vicedo]

Pilar Morte: Gracias, Pilar, por tus palabras, tan elogiosas. Un beso.

[Juan Vicedo]

Tristany Gaspar: Has dado absolutamente en la diana de mis intenciones. Aunque no he querido hacer ningún remake. Un abrazo y gracias por el mensaje.

[Juan Vicedo]

CONCHA VIDAL: Qué mal te correspondo. Te leo poco porque me falta tiempo, es la verdad. Un abrazo.