Editorial Alaire

Se escuchan los timbales apagando el furor de las dádivas (inquietas máscaras de ardor que lubrican tu espalda con el cuerpo súbito de tempestades). Te siento nacer en mi muslos como un dios que adora mi via láctea, que remonta la historia de mis poros con ambición dactilar y lengua socrática. Evoluciono en tu muralla y te recibo en mis fuentes como una promesa de tacto perfecto. Heraldo de simbiosis, praxis obnubilante de tierra salada: lluevo en ti, me salvo en tus espasmos y no permito que desees el mito de la renuncia.


Hallie

Menuda descripción!!! Hay frases que están llenas de fuerza y sutilidad al mismo tiempo:
Se escuchan los timbales apagando el furor de las dádivas
me salvo en tus espasmos
Y en general toda la composición.
Qué original lo de la lengua socrática, me ha sacado una sonrisa.
Un abrazo.

Gracias, Sergio. He tenido mis dudas con la línea final pero después de dar muchas vueltas decidí dejarla intacta.

Abrazo y felicidad.

Hallie

Pues si me permites decirte has hecho muy bien dejándola. "Me salvo en tus espasmos" expresa una situación agónica y placentera a la vez. La expresión anterior "lluevo en tí" me parece menos original y tiene menos patetismo. No sé...es tan sólo una opinión, la autora decide si se adecua a lo que quiere decir pues estupendo. El texto completo es genial. Un abrazo otra vez.

Gracias de nuevo, Sergio, por tu lectura atenta. Tomaré tu sugerencia muy en cuenta, lo bueno de las palabras es que podemos amoldarlas a nuestros deseos.

Otro abrazo para ti.

Hallie

Hallie Hernández Alfaro escribió:Se escuchan los timbales apagando el furor de las dádivas(inquietas máscaras de ardor que lubrican tu espalda con el cuerpo súbito de tempestades)Te siento nacer en mi muslos como un dios que adora mi via láctea, que remonta la historia de mis poros con ambición dactilar y lengua socrática. Evoluciono en tu muralla y te recibo en mis fuentes como una promesa de tacto perfecto. Heraldo de simbiosis, praxis obnubilante de tierra salada: lluevo en ti, me salvo en tus espasmos y no permito que desees el mito de la renuncia.


Hallie

¿Cuántos de nosotros no somos Heraldos de simbiosis?, Hallie. Un poema conmovedor que persiste en el sentido corporal hasta su límite.

Un abrazo.

Eduardo R. de la Cruz escribió:

Hallie Hernández Alfaro escribió:Se escuchan los timbales apagando el furor de las dádivas(inquietas máscaras de ardor que lubrican tu espalda con el cuerpo súbito de tempestades)Te siento nacer en mi muslos como un dios que adora mi via láctea, que remonta la historia de mis poros con ambición dactilar y lengua socrática. Evoluciono en tu muralla y te recibo en mis fuentes como una promesa de tacto perfecto. Heraldo de simbiosis, praxis obnubilante de tierra salada: lluevo en ti, me salvo en tus espasmos y no permito que desees el mito de la renuncia.


Hallie

¿Cuántos de nosotros no somos Heraldos de simbiosis?, Hallie. Un poema conmovedor que persiste en el sentido corporal hasta su límite.

Un abrazo.

Gracias, querido Eduardo, por tu presencia/afecto y tus impresiones generosas!!!

Un abrazo.

Hallie