Editorial Alaire

Se intuye la caída hacia el abismo
a través de la órbita elíptica del tiempo
avanzando por un dédalo de falsas ilusiones
donde al final,la soledad vierte su silencio
sobre el azulado rostro convertido en piedra.

En tan ardua travesía
la sed de los cristales de la frente
busca saciarse en las fuentes de voces mercuriales,
último reducto de agua dulce
en un dificultoso viaje presidido por lo incierto.

Bajo esta carpa de equilibrios oscilantes
no hay lugar para la huída
porque todo es nadir de sombras nebulosas,
de sueños desangrados por contínuos espejismos
hasta llegar al fondo de la ciénaga.

Es así cómo el vuelo de este exilio
vacía sigilosamente su clepsidra
sabiendo de antemano
que cualquier espiga que madure su semilla
será una muda caracola en manos de un suspiro.
*Andros

"(...) no hay lugar para la huída
porque todo es nadir de sombras nebulosas,
de sueños desangrados por continuos espejismos
hasta llegar al fondo de la ciénaga.
(...)
Es así cómo el vuelo de este exilio
vacía sigilosamente su clepsidra
sabiendo de antemano
que cualquier espiga que madure su semilla
será una muda caracola en manos de un suspiro."

Todo el poema tiene un ritmo estupendo, José Luis. Destacos esas dos estrofas, la primera porque me ha hecho sentir lo mismo que si estuviera viviendo una pesadilla, pero segura de que no me vas a dejar ahí solita, sin poder despertar.

La última, creo que es magnífica.

Enhorabuena, amiguito.

Blanca

Poema de desaliento que te adentra más y más en lo oscuro, pero dicho de forma bella y con ritmo. Un placer seguir leyéndote
Un abrazo
Pilar

José Luis Preciados Galán escribió:

Se intuye la caída hacia el abismo
a través de la órbita elíptica del tiempo
avanzando por un dédalo de falsas ilusiones
donde al final,la soledad vierte su silencio
sobre el azulado rostro convertido en piedra.

En tan ardua travesía
la sed de los cristales de la frente
busca saciarse en las fuentes de voces mercuriales,
último reducto de agua dulce
en un dificultoso viaje presidido por lo incierto.

Bajo esta carpa de equilibrios oscilantes
no hay lugar para la huída
porque todo es nadir de sombras nebulosas,
de sueños desangrados por contínuos espejismos
hasta llegar al fondo de la ciénaga.

Es así cómo el vuelo de este exilio
vacía sigilosamente su clepsidra
sabiendo de antemano
que cualquier espiga que madure su semilla
será una muda caracola en manos de un suspiro.
*Andros

Un poema muy fluido que habla de la soledad y del vacío. Casi no dejas un resquicio a la esperanza. La primera y la tercera estrofas son las que más me han gustado. Me llevo la expresión: "dédalo de falsas ilusiones".

Saludos, José Luis.

El poema está copado de magníficas imágenes, es exquisito en su totalidad, me cautivó desde el verso inicial, luego esa "órbita elíptica del tiempo" es fabulosa, y no pierde espectacularidad hasta el final:

"que cualquier espiga que madure su semilla
será una muda caracola en manos de un suspiro. "

Hermoso.
Saludos.

Ummmmmmmmm...valoro y agradezco tu comentario.

Cómo te vamos a dejar sola ante semejante pesadilla.¡ni hablar!

Bueno,tú como siempre tan ocurrente..

Un abrazo.

Amiga Pilar.

Te agradezco tu paso y comentario.

Me alegra que te gusten estos humildes versos.

Un abrazo.

Pesadilla que pasa como un suspiro, como un verso libre, como un segundo.........
Un placer haber pasado, un saludo

Así es amigo Óscar.

En una carrera sin retorno en busca de la utopía y la quimera de los sueños,nos topamos muchas

veces con la fría soledad que nos atenaza y condiciona.

En fin,como siempre te agradezco tu paso y sabio comentario.

Un cordial abrazo.

.... una comparación sin lugar a dudas enorme la que transita todo el poema, dentro de la relatividad ingente de las cosas; un saludo.

Amiga Tristitia.

Te agradezco sinceramente tus lecturas y comentarios.

Eres muy generosa en ellos.

Un cordial abrazo.

Gracias Claudieta por tu lectura y comentario.

Un cordial saludo.

Compañero Antonio.

Te agradezco tu visita y comentario a mi poema.

Un cordial abrazo.