LA TUMBA al poeta

[JUANPABLO]

No aceleres tu paso
ni quieras ciegamente poseerme;
yo te espero y te estoy reservada
desde antes que tú hubieras nacido,
y mi fidelidad
está sobradamente contrastada;
vivo con la esperanza de ofrecerte
el más reparador de los descansos;
en mí reposarás
después de las fatigas y tormentos
que la vida te hace padecer,
y yo te guardaré celosamente
hasta el último día;
hasta el último día de tu muerte.

* * *

[Marina Centeno]

Me agrada la intención y el ofrecimiento al descanso y la perpetuidad.

Mi abrazo, Poeta. Enhorabuena.

[Antonio Justel]

No aceleres tu paso
ni quieras ciegamente poseerme;
yo te espero y te estoy reservada
desde antes que tú hubieras nacido,
y mi fidelidad
está sobradamente contrastada;
vivo con la esperanza de ofrecerte
el más reparador de los descansos;
en mí reposarás
después de las fatigas y tormentos
que la vida te hace padecer,
y yo te guardaré celosamente
hasta el último día;
hasta el último día de tu muerte.

* * *

... poema que sin querer me recuerda al "Cantar de los cantares", de ahí la magnificencia del dos/uno definitivo; un saludo; Orión

[Raúl Castillo]

Combinación, coherencia: tanto en la métrica como en la lírica.
Unos versos que desearíamos no nos lleguen de la fuente original, por lo menos no pronto.

¡Un abrazo titán!

[JUANPABLO]

Me agrada la intención y el ofrecimiento al descanso y la perpetuidad.

Mi abrazo, Poeta. Enhorabuena.

Estimada Samantha:

La muerte no es a perpetuidad,
el poema concluye sutilmente
(por eso se te escapó)
que la muerte tiene también su último día.

Gracias por tu presencia y tu amable comentario.

Un abrazo.

* * *

[JUANPABLO]

No aceleres tu paso
ni quieras ciegamente poseerme;
yo te espero y te estoy reservada
desde antes que tú hubieras nacido,
y mi fidelidad
está sobradamente contrastada;
vivo con la esperanza de ofrecerte
el más reparador de los descansos;
en mí reposarás
después de las fatigas y tormentos
que la vida te hace padecer,
y yo te guardaré celosamente
hasta el último día;
hasta el último día de tu muerte.

* * *

... poema que sin querer me recuerda al "Cantar de los cantares", de ahí la magnificencia del dos/uno definitivo; un saludo; Orión

Pues sí, amigo eledendo,
no te falta razón,se parece más que nada
en la musiquilla que le acompaña,
y como dices muy bien,
especialmente en los dos últimos versos,
aunque yo no tuve eso en cuenta
sino el deseo de resaltar
que la muerte puede no ser infinita,
sino tener también un último día.

Gracias por tu compañía y tu afinado oído.

Un abrazo.

* * *

[Antonio Justel]

No aceleres tu paso
ni quieras ciegamente poseerme;
yo te espero y te estoy reservada
desde antes que tú hubieras nacido,
y mi fidelidad
está sobradamente contrastada;
vivo con la esperanza de ofrecerte
el más reparador de los descansos;
en mí reposarás
después de las fatigas y tormentos
que la vida te hace padecer,
y yo te guardaré celosamente
hasta el último día;
hasta el último día de tu muerte.

* * *

... poema que sin querer me recuerda al "Cantar de los cantares", de ahí la magnificencia del dos/uno definitivo; un saludo; Orión

Pues sí, amigo eledendo,
no te falta razón,se parece más que nada
en la musiquilla que le acompaña,
y como dices muy bien,
especialmente en los dos últimos versos,
aunque yo no tuve eso en cuenta
sino el deseo de resaltar
que la muerte puede no ser infinita,
sino tener también un último día.

Gracias por tu compañía y tu afinado oído.

Un abrazo.

* * *

... amigo mío, en realidad la muerte como tal no existe; tú tal vez ya lo sepas;; un saludo; Orión

[Marian Ramentol Serratosa]

Así será, Juan Pablo, el final del poema es grandioso.

Un besazo
Marian

[Tristitia Marisol]

Esa reserva desde antes del nacimiento me escarapeló el cuerpo, bien logrado. Un placer.

[JUANPABLO]

Combinación, coherencia: tanto en la métrica como en la lírica.
Unos versos que desearíamos no nos lleguen de la fuente original, por lo menos no pronto.

¡Un abrazo titán!

Amigo Raúl:

Sin prisas,
pero un día nos llegarán,
y mientras tanto dejémosla
que siga esperándonos,
que ella nos esperará
hasta el último día,
hasta el último día de la vida,
para guardarnos después
hasta el último día,
hasta el último día de la muerte.

Porque en ese mundo
todo tiene su último día.

Un abrazo.

* * *

[JUANPABLO]

"... amigo mío,
en realidad la muerte como tal no existe;
tú tal vez ya lo sepas;; un saludo; Orión"

Amigo Orión eledendo:

En efecto,
con total convicción
yo no creo en la muerte
porque creo en la Vida,
y ambas creencias son incompatibles.

La mía no está basada
en ningún credo religioso,
aunque sé que ella por sí misma,
ya constituye un credo.

Y no creo en la vida aislqda
de este planeta;
somos una mota de polvo
en un Universo infinito
y tal vez eterno,
donde la Vida,
en formas que no conocemos,
preside todos sus cambios.

En esa Vida es en la que creo,
y en la que nosotros
estamos también inmersos.

Un abrazo.

* * *

[JUANPABLO]

Así será, Juan Pablo, el final del poema es grandioso.

Un besazo
Marian

Estimada Marian:

Así será y no me caben dudas;
pero mi certeza la leo en positivo,
ya que la muerte
tiene también su muerte
y su último día de vida.

En eso fundo mi esperanza
en la vida que hoy vivo.

Un abrazo y un beso.

* * *

[JUANPABLO]

Esa reserva desde antes del nacimiento me escarapeló el cuerpo, bien logrado. Un placer.

Amiga Marisol,
encantado de encontrarte
escarapelada entre mis versos.

Un cordial saludo.

* * *