Primavera fría

[Ana Muela Sopeña]

Cae la lluvia y resbala por mi piel
como un recuerdo vano del invierno.
La primavera fría juega ahora
al eterno escondite de lo cóncavo.

Una muchacha lánguida deambula
por caminos mojados
en el misterio lúdico del tiempo.

Los columpios del parque
me traen a la memoria la desidia
de un tiempo inextinguible.

Un agujero de niebla
es patrimonio híbrido del aire
y se muestra sin miedo por las noches
como un cúmulo abierto
de posibilidades infinitas.

El sonido de un ángel
oculto entre las ramas de los árboles
se parece al amor de un vendaval.

Y transcurren los ciclos abiertos a la muerte
como si fueran solo un aguacero
que derrite el instinto del crepúsculo.

Una muñeca rota
tirada sobre el barro
de un charco abandonado
habla de la tristeza,
de la orfandad del alma entre la sombra.

Y todos los segundos
que yacen en los sueños
hablan desde sus tumbas
de un lugar en el alba recogido
en la dulce belleza de un lucero.


Ana Muela Sopeña

[Ana García]

Muy buena la imagen de la muñeca rota, la orfandad por excelencia.
Con distinto significado la he usado yo en otros poemas porque nos da esa imagen de abandono insoportable o de ruptura de espíritu.
Muy bueno el final. Porque todos queremos creer en un lugar tan bello como el que pintas.
Siempre eres para mí una referencia literaria.
Un fuerte abrazo.

[Marisa Peral]

Madrugadora tu “Primavera Fría” y llena de esas imágenes que tan bien manejas y me gustan.
Esa ciudad tiene duende cuando la paseas entre las luces y las sombras del atardecer.
Te felicito y te envío abrazos y un beso.

P.D. Aprovecho esta hora que puedo escribir sin la estridencia de las letras grandes, que parece un anuncio de El Corte Inglés y su Primavera adelantada.

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Ana:

Para mí la primavera tiene que ser cálida, alegre, amable. Cuando se comporta como un invierno algo pasa que no es normal.

Es cierto, la muñeca rota es un símbolo de algo terrible.

Un beso grande
Gracias por venir.
Ana

[Julio Gonzalez Alonso]

Primavera impregnada de sensaciones. Gracias, Ana. Abrazo, y salud.

[Armilo Brotón]

Te mando un abrazo, querida amiga, para que esa primavera sea más cálida y para que tu poesía, que llevas muy dentro, nos la haga a nosotros, luce el sol con tus versos.
Besosss y bendiciones

[Alejandro Costa]

¡Qué maravilla, Ana!, ¡qué maravilla!

Es un poema exquisito, muy bello y lleno de imágenes de mucha calidad, que dicen mucho de tu escritura.

Comparto lo de Ana, la figura de muñeca es brutal.

Un beso.

[Ana Muela Sopeña]

Muchas gracias, Marisa:

Tus palabras son muy positivas. Un lujo tenerte como lectora.

Un beso grande
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Julio, por venir:

Un beso grande
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Agradezco enormemente, Armilo, tu paso por estos versos.

Un fuerte abrazo
Ana

[Alonso Vicent]

Andan los tiempos revueltos, y los espacios. Pero esta primavera tan diferente, tan lluviosa, alentó los renuevos de los árboles e hizo florecer toda la montaña... y los recuerdos. Me gustó.
Un poema de ida y vuelta, con sus misterios y sus certezas.
Un abrazo, Ana, desde estas noches estrelladas y con luna.

[José M. F. Febles]

"Ana Muela Sopeña"

Cae la lluvia y resbala por mi piel
como un recuerdo vano del invierno.
La primavera fría juega ahora
al eterno escondite de lo cóncavo.

Una muchacha lánguida deambula
por caminos mojados
en el misterio lúdico del tiempo.

Los columpios del parque
me traen a la memoria la desidia
de un tiempo inextinguible.

Un agujero de niebla
es patrimonio híbrido del aire
y se muestra sin miedo por las noches
como un cúmulo abierto
de posibilidades infinitas.

El sonido de un ángel
oculto entre las ramas de los árboles
se parece al amor de un vendaval.

Y transcurren los ciclos abiertos a la muerte
como si fueran solo un aguacero
que derrite el instinto del crepúsculo.

Una muñeca rota
tirada sobre el barro
de un charco abandonado
habla de la tristeza,
de la orfandad del alma entre la sombra.

Y todos los segundos
que yacen en los sueños
hablan desde sus tumbas
de un lugar en el alba recogido
en la dulce belleza de un lucero.
Ana nuela Sopeña

Hola Ana, no siempe es tan fácil comentar con acierto un poema, pero yo, especialmente, dudo
ser agradable al autor.

No hacer bien un comentario al de una poeta genial, en sus palabras, a nadie le importa, por moral tampoco Así con este comienzo me hago un seguro frente a la gran poeta.

Al margen de todo sueño que constituye la realidad ex de un poema,a muchísimos poetas , por no decir a caasi a todos, son incapaces de vaciar en sus versos la dura realidad que les afecta. Por eso, poetas que agradan tus poemas, por expresar dentro de unas normas, la reprimida calma el decir. Bien es cierto que en este Foro, los poetas son de primera clse.
Yo, Ana, te felicito, por este magnífico poema, desde la soledad de mi isla.

José Manuel F. Febles

[Pilar Morte]

Buen poema, Ana, que nos hace sentir la primavera desde tu experiencia y visión poética.
Tienes imágenes muy bellas.
Abrazos y salud

[J. J. Martínez Ferreiro]

Me ha encantado, amiga Ana, por su impactante lenguaje poético a base de imágenes y símbolos de gran poder evocador. Iba señalar los momentos más álgidos, pero todo el poema brilla a gran altura

Eso... todo un placer de lectura, querida amiga.

Un bico.

[José M. F. Febles]

"Ana Muela Sopeña"

Cae la lluvia y resbala por mi piel
como un recuerdo vano del invierno.
La primavera fría juega ahora
al eterno escondite de lo cóncavo.

Una muchacha lánguida deambula
por caminos mojados
en el misterio lúdico del tiempo.

Los columpios del parque
me traen a la memoria la desidia
de un tiempo inextinguible.

Un agujero de niebla
es patrimonio híbrido del aire
y se muestra sin miedo por las noches
como un cúmulo abierto
de posibilidades infinitas.

El sonido de un ángel
oculto entre las ramas de los árboles
se parece al amor de un vendaval.

Y transcurren los ciclos abiertos a la muerte
como si fueran solo un aguacero
que derrite el instinto del crepúsculo.

Una muñeca rota
tirada sobre el barro
de un charco abandonado
habla de la tristeza,
de la orfandad del alma entre la sombra.

Y todos los segundos
que yacen en los sueños
hablan desde sus tumbas
de un lugar en el alba recogido
en la dulce belleza de un lucero.
Ana nuela Sopeña

Hola Ana, no siempe es tan fácil comentar con acierto un poema, pero yo, especialmente, dudo
ser agradable al autor.

No hacer bien un comentario al de una poeta genial, en sus palabras, a nadie le importa, por moral tampoco Así con este comienzo me hago un seguro frente a la gran poeta.

Al margen de todo sueño que constituye la realidad ex de un poema,a muchísimos poetas , por no decir a caasi a todos, son incapaces de vaciar en sus versos la dura realidad que les afecta. Por eso, poetas que agradan tus poemas, por expresar dentro de unas normas, la reprimida calma el decir. Bien es cierto que en este Foro, los poetas son de primera clse.
Yo, Ana, te felicito, por este magnífico poema, desde la soledad de mi isla.

José Manuel F. Febles

Nota; He vuelto a leer mi pobre comentario, y he observado ciertos errores en el mismo, ruego me disculpes, pues debido a mi baja visión. Un abrazo.