Para entonces

[Francesch Vicent]

Cuando un giro copernicano
teje desde la noche
su reconciliación con la mañana
surge por la brecha
de oriente un resplandor
con la predicción del alba
para besar la palabra y la hoja
del árbol y la frente del mundo.

Y tiñendo de día sus dominios
brilla como una sonrisa misteriosa
anunciando el rojo volcánico
que huele a vida
el destello crujiente de la mies
y el contorno azul de los pájaros.

Siempre ha habido en el lienzo
la palabra y el mármol
sueños de rocío donde germinan
los sonidos de la dulce aurora
y aunque émulos
de su fiebre inextinguible
las puertas de su olimpo semejan
recias murallas inexpugnables.

Su danza elíptica perdurará
como un abrazo sin tregua
por la extraña noche que fluye
desde la nada en vertiginoso
torbellino de estrellas
mas para uno de sus hijos
la esperanza será en un mundo
de sol donde ya no amanece
un rastro de nieve para entonces.

[Alejandro Costa]

Buen escrito, compañero.

Un placer de lectura.

Abrazos.

[Francesch Vicent]

Buen escrito, compañero.

Un placer de lectura.

Abrazos.

Muchas gracias, amigo poeta, por tu amable comentario.
Un cordial saludo.