El verano de repente

[J. J. Martínez Ferreiro]

Resplandecían los pavos reales
en las grandes ventanas del chalé.
El oleaje de las palmeras sombreaba las fachadas.
Tras los cristales
las copas tumbadas en las mesas
goteaban el tiempo muerto.
Sentada frente a mí,
una muchacha de vestido blanco
movía despacio su mano
abriéndose camino entre las piernas.
Sin ocultamiento miré
las ballenas oscuras de sus muslos,
varadas contra la chapa del asiento,
y escuché un jadeo húmedo, salado,
más allá del calor de las sombras.

Entonces ocurrió el verano
de repente, todo a la vez,
con su aguardiente imperecedero.

[Hallie Hernández Alfaro]

.

De repente, se apodera de las visiones y limpia cualquier rastro de helada. La ciudad desbalancea el ritmo de las piernas y lleva exquisitos sobresaltos en medio del pecho.

Me ha parecido un poema íntegramente hermoso, delicado, con denominación de origen.

Aplausos que se escuchen en la casa de Santiago y en la de Ferrol. También en las fibras de tu poeta.
Un abrazo.

[Pilar Morte]

Un poema de un erotismo exquisito. Me ha encantado todo él. Felicidades , muy merecidas.
Abrazos y Felices fiestas.

[F. Enrique]

Aterrizas en una poesía erótica de altos vuelos, hay un algo difícil de precisar que nos lleva a la Muerte en Venecia o al lamento de Valéry en su Cementerio Marino, o al recuerdo que persiste terco en la delicadeza que se instala en un instante que se pierde y siempre encontramos a la sombra de un verano.

Un abrazo.

[Marisa Peral]

Así suceden todos los veranos, desbordados, de repente.
Espléndido y delicado erotismo, Ferreiriño.
Felicidades y biquiños.

[J. J. Martínez Ferreiro]

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De repente, se apodera de las visiones y limpia cualquier rastro de helada. La ciudad desbalancea el ritmo de las piernas y lleva exquisitos sobresaltos en medio del pecho.

Me ha parecido un poema íntegramente hermoso, delicado, con denominación de origen.

Aplausos que se escuchen en la casa de Santiago y en la de Ferrol. También en las fibras de tu poeta.
Un abrazo.

Gracias, Hallie, por esta generosa intensidad con que abres los comentarios a este poema.
Ya le he dicho a una vecina de Ferrol que cerrase bien las ventanas para encerrar esos aplausos, y así pueda disfrutarlos cuando dentro de unos días vayamos allí.

Un bico grande y Felices Pascuas, querida amiga.

[J. J. Martínez Ferreiro]

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De repente, se apodera de las visiones y limpia cualquier rastro de helada. La ciudad desbalancea el ritmo de las piernas y lleva exquisitos sobresaltos en medio del pecho.

Me ha parecido un poema íntegramente hermoso, delicado, con denominación de origen.

Aplausos que se escuchen en la casa de Santiago y en la de Ferrol. También en las fibras de tu poeta.
Un abrazo.

Graciñas, Hallie, celebro que hayas disfrutado de estos versos. Mañana voy a Ferrol y miraré por allí, a ver si encuentro algún eco de tus aplausos

Bicos y Felices Pascuas para ti y todos los tuyos.

[Julio Gonzalez Alonso]

¡Genial! Nos haces disfrutar del verano cuando debería llegar el invierno, y perdernos en la erótica ensoñación de las piernas bien torneadas de una joven... mientras nos dejas en los labios y la garganta el sabor recio del orujo de la vida. Abrazo decembrino con sabor a verano. Salud, amigo Ferreiro.

[Raul Muñoz]

Muy buenas imágenes que nos transportan al erotismo, de manera abrupta, pero, al mismo tiempo, sutil. Me gustó pasar por aquí, Ferreiro.

Un abrazo.

[Jerónimo Muñoz]

Eres un maestro, J. J. Escribes con tal maestría que no hay un solo verso desechable. Todo el poema es una atravida obra de arte.
Feliz Navidad y un fuerte abrazo.

Jerónimo

[Alonso Vicent]

Me encantó tu poema veraniego, Ferreiro, y me traslado a mi refugio de cabras primaveras y veranos. Bendito el tiempo muerto que resucita entre sombras y calores.
Momento y poema se hicieron presentes en tu obra.
Un saludote, compañero, casi de invierno pero con la visión de siempre.

[Francisco Lobo]

Este me lo quedo, gallego. Un abrazo y mi deseo de que tengas una gran Navidad.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Un poema de un erotismo exquisito. Me ha encantado todo él. Felicidades , muy merecidas.
Abrazos y Felices fiestas.

Graciñas, Pilar, por disfrutar y dejar huella en estos versos.

Bicos e Bo Nadal para toda a Family.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Aterrizas en una poesía erótica de altos vuelos, hay un algo difícil de precisar que nos lleva a la Muerte en Venecia o al lamento de Valéry en su Cementerio Marino, o al recuerdo que persiste terco en la delicadeza que se instala en un instante que se pierde y siempre encontramos a la sombra de un verano.

Un abrazo.

Gracias, amigo Enrique, por pasar y dejar tan generosos comentarios. Celebro que hayas disfrutado de estos versos.

Un abrazo y Felices Pascuas para ti y todos los tuyos.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Así suceden todos los veranos, desbordados, de repente.
Espléndido y delicado erotismo, Ferreiriño.
Felicidades y biquiños.

Gracias, Marilina, ya sabes que tu presencia en este sitio siempre es especialmente celebrada.

Un bico grande y Feliciano para ti y todos los tuyos.