Renacerá Ilión

[Ramón Castro Méndez]

Nunca como ahora la noche fue más oscura,
y, aún así, amanecemos con la mirada limpia.
Nunca como ahora resplandecerá este mar de infinitos,
cristal bajo la luz longeva de templados espejos.
Pero nada hay detrás de los espejos,
sino la permeable memoria de otros rostros,
con su pátina oscura de descuidado silencio,
y las transidas lágrimas de unos ojos ausentes.
Atrás quedó el umbral donde la niebla mudó su piel gastada,
donde las ruinas elevaron su canto por sobre la arboladura de los vientos.
De la misma urdimbre, vientos cardinales
abren el camino hacia la nueva aurora.
Con el pesado párpado vendré a llorar sobre tu vientre
estéril y a decirte que ha terminado el luto.
De la milenaria piedra nacimos, y no es la muerte tan cruel destino.
No hemos de volver sobre nuestros pasos,
sus huellas se perdieron de modo inapelable.
Volverán las águilas a coronar las cimas
ahuyentando así pasados temores.
Volverán los mástiles a mirar al cielo
y los relámpagos rasgarán de nuevo la piel de los tambores.
Bajo los escombros despertarán las flores del invierno
para seguir creciendo entre el fértil llanto de las sabinas.
Nunca como ahora nos pondremos de pie para alejar
las sombras que por todo horizonte nos rodean.
Nunca como ahora ha de retumbar la tempestad
en el pecho de aquellos que se adentraron en el reino de la noche.
Esta es nuestra tierra, feudo de antiguas maravillas,
paisaje de gigantes que no servirán ni a dioses ni a reyes.
Solo somos hombres, que llegado su tiempo, seguirán a las estrellas.
Nunca como ahora, caerán las máscaras, se levantarán los vientos y renacerá Ilión.

[Pilar Morte]

Muy hermoso poema escrito desde el corazón. Me gustó mucho y lo disfruté.
Abrazos

[Pablo Sales]

Me ha gustado mucho el poema y sus imágenes, aunque tuve que leerlo despacio hasta encontrar el ritmo justo que lo hace brillar.

[Ramón Castro Méndez]

Muy hermoso soneto escrito desde el corazón. Me gustó y lo disfruté.
Abrazos

Muchas gracias, querida Pilar, por acercarte hasta mis letras y dejarme tu siempre grato comentario.

Feliz Navidad.

Un afectuoso abrazo.

[J. J. Martínez Ferreiro]

“ Con el pesado párpado vendré a llorar sobre tu vientre
estéril y a decirte que ha terminado el luto”

Me ha gustado mucho, amigo Ramón, este poema rebosante de esperanza.

Un fuerte abrazo y feliz Navidad para ti y todos los tuyos.

[E. R. Aristy]

Nunca como ahora la noche fue más oscura,
y, aún así, amanecemos con la mirada limpia.
Nunca como ahora resplandecerá este mar de infinitos,
cristal bajo la luz longeva de templados espejos.
Pero nada hay detrás de los espejos,
sino la permeable memoria de otros rostros,
con su pátina oscura de descuidado silencio,
y las transidas lágrimas de unos ojos ausentes.
Atrás quedó el umbral donde la niebla mudó su piel gastada,
donde las ruinas elevaron su canto por sobre la arboladura de los vientos.
De la misma urdimbre, vientos cardinales
abren el camino hacia la nueva aurora.
Con el pesado párpado vendré a llorar sobre tu vientre
estéril y a decirte que ha terminado el luto.
De la milenaria piedra nacimos, y no es la muerte tan cruel destino.
No hemos de volver sobre nuestros pasos,
sus huellas se perdieron de modo inapelable.
Volverán las águilas a coronar las cimas
ahuyentando así pasados temores.
Volverán los mástiles a mirar al cielo
y los relámpagos rasgarán de nuevo la piel de los tambores.
Bajo los escombros despertarán las flores del invierno
para seguir creciendo entre el fértil llanto de las sabinas.
Nunca como ahora nos pondremos de pie para alejar
las sombras que por todo horizonte nos rodean.
Nunca como ahora ha de retumbar la tempestad
en el pecho de aquellos que se adentraron en el reino de la noche.
Esta es nuestra tierra, feudo de antiguas maravillas,
paisaje de gigantes que no servirán ni a dioses ni a reyes.
Solo somos hombres, que llegado su tiempo, seguirán a las estrellas.
Nunca como ahora, caerán las máscaras, se levantarán los vientos y renacerá Ilión.

Maravilloso, Ramón Castro Méndez! Un abrazo grande, ERA

[Hallie Hernández Alfaro]

Emocionante y muy hermoso, querido amigo.
Gracias por traer calidad y buen hacer a nuestros ojos.

Abrazo y felices días.

[Ramón Castro Méndez]

Me ha gustado mucho el poema y sus imágenes, aunque tuve que leerlo despacio hasta encontrar el ritmo justo que lo hace brillar.

Muchas gracias, Pablo, me alegra que estas letras hayan sido de tu agrado.

Un fuerte abrazo.

[Ramón Castro Méndez]

“ Con el pesado párpado vendré a llorar sobre tu vientre
estéril y a decirte que ha terminado el luto”

Me ha gustado mucho, amigo Ramón, este poema rebosante de esperanza.

Un fuerte abrazo y feliz Navidad para ti y todos los tuyos.

Muy agradecido, amigo Ferreiro, por tu paso y apreciado comentario.

Un fuerte abrazo.

[Mirta Elena Tessio]

Nunca como ahora la noche fue más oscura,
y, aún así, amanecemos con la mirada limpia.
Nunca como ahora resplandecerá este mar de infinitos,
cristal bajo la luz longeva de templados espejos.
Pero nada hay detrás de los espejos,
sino la permeable memoria de otros rostros,
con su pátina oscura de descuidado silencio,
y las transidas lágrimas de unos ojos ausentes.
Atrás quedó el umbral donde la niebla mudó su piel gastada,
donde las ruinas elevaron su canto por sobre la arboladura de los vientos.
De la misma urdimbre, vientos cardinales
abren el camino hacia la nueva aurora.
Con el pesado párpado vendré a llorar sobre tu vientre
estéril y a decirte que ha terminado el luto.
De la milenaria piedra nacimos, y no es la muerte tan cruel destino.
No hemos de volver sobre nuestros pasos,
sus huellas se perdieron de modo inapelable.
Volverán las águilas a coronar las cimas
ahuyentando así pasados temores.
Volverán los mástiles a mirar al cielo
y los relámpagos rasgarán de nuevo la piel de los tambores.
Bajo los escombros despertarán las flores del invierno
para seguir creciendo entre el fértil llanto de las sabinas.
Nunca como ahora nos pondremos de pie para alejar
las sombras que por todo horizonte nos rodean.
Nunca como ahora ha de retumbar la tempestad
en el pecho de aquellos que se adentraron en el reino de la noche.
Esta es nuestra tierra, feudo de antiguas maravillas,
paisaje de gigantes que no servirán ni a dioses ni a reyes.
Solo somos hombres, que llegado su tiempo, seguirán a las estrellas.
Nunca como ahora, caerán las máscaras, se levantarán los vientos y renacerá Ilión.

No tengo palabras para decirte lo bello de tu poema.
Me ha gustado de principio a fin, y tus letras llegan porque salen del alma.
Muchas gracias por compartir tu talento. Abrazos con mi afecto y flores para las fiestas.

[Julio Gonzalez Alonso]

Te dejo mi testimonio y admiración por tan buenos versos, Ramón. Un placer. Abrazos de fin de año.
Salud.

[Ramón Castro Méndez]

Nunca como ahora la noche fue más oscura,
y, aún así, amanecemos con la mirada limpia.
Nunca como ahora resplandecerá este mar de infinitos,
cristal bajo la luz longeva de templados espejos.
Pero nada hay detrás de los espejos,
sino la permeable memoria de otros rostros,
con su pátina oscura de descuidado silencio,
y las transidas lágrimas de unos ojos ausentes.
Atrás quedó el umbral donde la niebla mudó su piel gastada,
donde las ruinas elevaron su canto por sobre la arboladura de los vientos.
De la misma urdimbre, vientos cardinales
abren el camino hacia la nueva aurora.
Con el pesado párpado vendré a llorar sobre tu vientre
estéril y a decirte que ha terminado el luto.
De la milenaria piedra nacimos, y no es la muerte tan cruel destino.
No hemos de volver sobre nuestros pasos,
sus huellas se perdieron de modo inapelable.
Volverán las águilas a coronar las cimas
ahuyentando así pasados temores.
Volverán los mástiles a mirar al cielo
y los relámpagos rasgarán de nuevo la piel de los tambores.
Bajo los escombros despertarán las flores del invierno
para seguir creciendo entre el fértil llanto de las sabinas.
Nunca como ahora nos pondremos de pie para alejar
las sombras que por todo horizonte nos rodean.
Nunca como ahora ha de retumbar la tempestad
en el pecho de aquellos que se adentraron en el reino de la noche.
Esta es nuestra tierra, feudo de antiguas maravillas,
paisaje de gigantes que no servirán ni a dioses ni a reyes.
Solo somos hombres, que llegado su tiempo, seguirán a las estrellas.
Nunca como ahora, caerán las máscaras, se levantarán los vientos y renacerá Ilión.

Maravilloso, Ramón Castro Méndez! Un abrazo grande, ERA

Muchas gracias, querida ERA, por dejar tus huellas en estas letras.

Un afectuoso abrazo.

[Ramón Castro Méndez]

Emocionante y muy hermoso, querido amigo.
Gracias por traer calidad y buen hacer a nuestros ojos.

Abrazo y felices días.

Muchas gracias a ti, querida Hallie, por estar siempre.

Un afectuoso abrazo.

[Ramón Carballal]

Un poema muy logrado, Ramón. Ha sido un gusto leerlo. Te dejo mi abrazo y el deseo de que tengas un muy feliz 2022.

[Hector Cid]

Renacería Ilión es épica y lo demás tonterías.

"Volverán los mástiles a mirar al cielo
y los relámpagos rasgarán de nuevo la piel de los tambores."

Eso es un verso y lo demás tonterías.

Enhorabuena.