infinito de horizonte,
como si fueras febrero..
¡ ábreme tus olas mar !
y acurruca en un ahondo, éstos, mis verdes ojos,
verdes, de tanto anudar la ESPERANZA en los sargazos
con que te vistes los fondos.
Porque a tu orilla se aquietan,
mi verde,
mi verde mar...,
estos gemidos roncos que confunden mis raíces,
mientras insertan los picos,
- sesteo de barcarolas -
las gaviotas,
al filo de lo imposible
Mañana, uno de Enero,
como si fuera domingo,
nos vestiremos de novios y a la que te quiero,
quita,
me pondrás sobre la orilla,
toda yo,
beso de espuma,
todo tú,
promesa tibia, mano y verso...
carne sobre carne...todo.
(Pues eso, de nuevo otro año que me da la vida, vivirlo como siempre, en carpe diem es mi sueño. En Alicante hoy, hace frío. Mi mediterráneo murmura)