El rey de los ciruelos 2

[Marius Gabureanu]

Recuerdo todavía los cuentos que mi padre
se inventaba, al llegar borracho a la casa,
por ejemplo, el de las víboras a punto de procrear,
decía que había visto miles de víboras en un mismo lugar
y que allí nadie sabía quién dejaba embarazado a quién,
y me gustaba escuchar de su voz cómo gimen las víboras.
Se acostaba sin quitarse las botas
porque le daba pereza envejecer
y el segundo día se encontraba sin botas
y con nacionalidad de vampiro, mi padre
clavaba sus dientes
en la corteza de los ciruelos
y me enseñaba que el alba
es una deforestación del pensamiento.
Yo quiero que haya un paraíso de las víboras,
pero de momento sólo he conseguido que algunas de mis palabras
actúen como alas de veneno.
Se acostaba sin quitarse las botas
y mi madre se las quitaba mientras dormía
y lo queríamos tanto...
Ya no creo que las tumbas sirvan para algo,
mi madre dice que los ciruelos se han llenado de hongos
y que cada viernes
cocina para dos,
que sus botas llenas de lodo
aún sirven, y me pregunta si ando descalzo por las calles de Londres
y le digo que no, que aquí se vive bien
pero que no hay ciruelos
y mi sombra no sabe dónde clavar sus dientes,
se vuelve un cuento de hongos.

[Pilar Morte]

Es tal la sensibilidad con la que escribes que en el primer verso quedas atrapada. Hay también sinceridad y belleza. Un lujo leerte, amigo.
Abrazos
Pilar

[Marius Gabureanu]

Muchas gracias, querida amiga. Siempre me alegro y valoro tu huella, Pilar. Mis abrazos.

[Antonia Mauro]

Es como un poema-cuento. O un cuento-poema.

No hay ni un solo poema tuyo, en el que al llegar a algún verso, no me haya quedado con la boca abierta mirando la pantalla alucinada, un buen rato, no creas.

"Se acostaba sin quitarse las botas porque le daba pereza envejecer".
"Nacionalidad de vampiro"
"El viernes cocina para dos"
"El alba es una deforestación del pensamiento"

¡Que brutales! ¡Impresionante!

Y el cierre, cómo no, buenísimo.

Me gusta adentrarme en el mundo de los cuentos, y formar parte de ellos.

Éste me ha llevado a recoger setas a un bosque en Rumanía.

"El cielo está más cerca en Rumanía". Ésto lo dijiste tú en un comentario creo. O en un poema. No lo recuerdo bien.

Gracias por contarnos esta historia. Voy a limpiar setas. He traído la cesta llena. Después de cenar salgo del cuento. Pero antes ceno un revuelto de setas que me gustan mucho.

La alusión que haces al paraíso de las víboras, habiendo mencionado anteriormente cómo gimen las víboras, esos miles de víboras embarazadas, es absolutamente feroz. Muy, muy potente.

Milabrazos.

[Rafel Calle]

Recuerdo todavía los cuentos que mi padre
se inventaba, al llegar borracho a la casa,
por ejemplo, el de las víboras a punto de procrear,
decía que había visto miles de víboras en en un mismo lugar
y que allí nadie sabía quién dejaba embarazado a quién,
y me gustaba escuchar de su voz cómo gimen las víboras.
Se acostaba sin quitarse las botas
porque le daba pereza envejecer
y el segundo día se encontraba sin botas
y con nacionalidad de vampiro, mi padre
clavaba sus dientes
en la corteza de los ciruelos
y me enseñaba que el alba
es una deforestación del pensamiento.
Yo quiero que haya un paraíso de las víboras,
pero de momento sólo he conseguido que algunas de mis palabras
actúen como alas de veneno.
Se acostaba sin quitarse las botas
y mi madre se las quitaba mientras dormía
y lo queríamos tanto...
Ya no creo que las tumbas sirvan para algo,
mi madre dice que los ciruelos se han llenado de hongos
y que cada viernes
cocina para dos,
que sus botas llenas de lodo
aún sirven, y me pregunta si ando descalzo por las calles de Londres
y le digo que no, que aquí se vive bien
pero que no hay ciruelos
y mi sombra no sabe dónde clavar sus dientes,
se vuelve un cuento de hongos.

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Como una evocación de sueño roto que asusta -por asombro- los pilares de la propia creatividad rítmico-literaria, este poema sigue los pasos de la última etapa -quizá nombrada por ser la más reciente- de Marius Gabureanu, increíblemente repleta de obras para el recuerdo.

Poesía narrativa, trufada de elementos literarios de alta escuela, que, como en el caso, por ejemplo, de Ramón Carballal, también es de magisterio en el aspecto descriptivo.

Poesía en verso multimétrico puro. La versificación es muy feliz, recuerda mucho a la de, por ejemplo, Rosa Marzal, a base de continuos cambios de ritmo en periodos rítmico-sintácticos de gran altura semántica y, además, vertebrando una cadena de versos que también son poemas en sí mismos.

Es un discurso simbólico, surrealista, realista..., o sea, lo mezcla todo, porque utiliza un lenguaje universal, propiamente de su universo, el universo Marius. En este punto, hablando de los estilos, que si esto, que si lo otro, pues bien, el estilo es el lenguaje que, a su vez, es el vehículo que utilizan los autores para plasmar sus pensamientos, su forma de ver las cosas. Todos tenemos memorizadas una cantidad de palabras, estas palabras, sus combinaciones, son las que utilizamos para componer nuestros poemas. Las palabras pueden ser bastante afines a los autores, pero no tienen nada que ver a la hora de combinarlas. Cada autor las combina de una manera, de lo contrario, si copia la forma de combinarlas, pues, sumará poco en términos de creatividad y vanguardia.

Y, bueno, después de tanto chocolate que no me queda más remedio que regalarte, amigo Marius, esperando que escribas algún churro (poemilla) que otro, para variar -que no parezcas extraterrestre-, te felicito por este poema y porque estás consiguiendo una obra realmente importante en términos de poesía de vanguardia. Una vanguardia que, si cuenta con suficientes mimbres (la calidad y cantidad de autores), precisamente tal y como se está desarrollando en Alaire, tiene muchas posibilidades de convertirse en poesía clásica. Calidad y cantidad tenemos aquí más que suficiente.
Abrazos.

[Pablo Ibáñez]

Marius,

me encanta el poema, amigo. Escribes de una manera abrumadora, increíblemente fresca y pura. ¿Cómo lo haces?
El poema se clave en la memoria al instante: el padre borracho, las víboras arracimadas, las botas, la madre, Londres... La narración va y viene a ritmo de pensamiento humano, se conecta y desconecta de la realidad como por arte de magia, sin que chirríe. El lenguaje parece trasparente, un tubo directo a un cerebro sorprendido por la vida, recordando, pensando, razonando...

A mí me gusta muchísimo.

Abrazos.

[Hallie Hernández Alfaro]

Recuerdo todavía los cuentos que mi padre
se inventaba, al llegar borracho a la casa,
por ejemplo, el de las víboras a punto de procrear,
decía que había visto miles de víboras en en un mismo lugar
y que allí nadie sabía quién dejaba embarazado a quién,
y me gustaba escuchar de su voz cómo gimen las víboras.
Se acostaba sin quitarse las botas
porque le daba pereza envejecer
y el segundo día se encontraba sin botas
y con nacionalidad de vampiro, mi padre
clavaba sus dientes
en la corteza de los ciruelos
y me enseñaba que el alba
es una deforestación del pensamiento.
Yo quiero que haya un paraíso de las víboras,
pero de momento sólo he conseguido que algunas de mis palabras
actúen como alas de veneno.
Se acostaba sin quitarse las botas
y mi madre se las quitaba mientras dormía
y lo queríamos tanto...
Ya no creo que las tumbas sirvan para algo,
mi madre dice que los ciruelos se han llenado de hongos
y que cada viernes
cocina para dos,
que sus botas llenas de lodo
aún sirven, y me pregunta si ando descalzo por las calles de Londres
y le digo que no, que aquí se vive bien
pero que no hay ciruelos
y mi sombra no sabe dónde clavar sus dientes,
se vuelve un cuento de hongos.

Emocionanda aplaudo a morir; abrazo enorme.

[Ana García]

¡Dios, qué ternura hay en tus poemas!

y me enseñaba que el alba
es una deforestación del pensamiento.

Coincido con esta idea. El alba mataba mis noches, era la deforestación total como si un incendio arrasara con mis gatos y todo se volviera plano.
Veo tu amor incondicional y por ello te felicito. Se masca la belleza y sensibillidad de tu alma.
Un abrazo enorme.

[Luis M]

Muy hermoso poema, Marius, coincido con Ana sobre lo buenos que son estos versos:

"y me enseñaba que el alba
es una deforestación del pensamiento. "

...y también me gustó mucho:

" y me pregunta si ando descalzo por las calles de Londres"

(este tipo de giros tan sorprendentes, bellos y llenos de significado habituales en tu poesía me encantan)

Felicidades, querido amigo. Un fuerte abrazo.

[Marius Gabureanu]

Querida Antonia, muchas gracias por tan extenso y generoso comentario. Hay muchas setas en los bosques de Rumania, pero también mucha gente pobre que vive del negocio de las setas yconoce los lugares donde crecen, y recogen más setas de lo que necesita, las arrancan de raíz, no muy sabio.... Feliz con tu huella, te mando muchos abrazos y gimo como una víbora que se entera de que es domingo.

[Rosa Marzal]

Otro magnífico poema, en el que destaco la enorme fuerza de los elementos simbólicos: las inquietantes víboras, los ciruelos, que parecen acoger las sombras de la memoria, los hongos...

Mis aplausos una vez más, querido amigo.

Un fuerte abrazo y feliz domingo.

[Marius Gabureanu]

Rafel, muchas gracias por regalarme un extenso y generoso comentario, me alegro que se ha dado la posibilidad de hablar sobre Alaire en este poema y sobre los autores que publican sus poemas en el foro. Ciertamente, Rosa Marzal y Ramón Carballal son de los poetas que más aprecio, por la densidad de su poética, realmente dicen algo, y arriesgan en casi todas sus propuestas, para que la poesía pueda avanzar. Y generalmente, a casi todos los autores que aquí publican, les encuentro esta característica. Cada lector tiene sus gustos. Recuerdo un comentario a uno de mis poemas , donde, entre cosas buenas, se me reprochaba que doy vueltas sobre la misma rueda. No respondí, pero estaba pensando, lejos de enfadarme, que en el foro hay variedad de estilos y autores, que si tu alma te pide un soneto o un poema histórico, un romance, ?por qué vas a leer un poema melancólico en verso libre?. Los lectores tienen que buscar, entre los poemas que aquí se ofrecen, la satisfacción para un momento dado, y no culpar a los que escribimos por no coincidir con su estado de animo. Eso es lo que yo hago. Leo de todo, y me interesa la poesía en todas sus formas. La originalidad creo que tiene que ver con una manera de ser subjetivo, y las palabras que empleamos seguirán siendo las mismas, o cada uno va empleando las palabras que son significativas a su vida, ( por ejemplo, la palabra eutanasia no está muy empleada, todavía) pero hay un escenario que nace del modo de pensar y/o recordar, que no es lo mismo, al recordar el pensamiento gana en oscuridad y recurre a las imágenes. Sobre versificar no sé muchas cosas, más descubro que cada poema concibe su música, y a veces no es la adecuada, otras veces el abismo silba al final de cada estrofa, en definitiva he renunciado a ponerme obstáculos a la hora de escribir, y dejo que lo evocado sea lo que decide si es un poema de versos cortos, etc. Muchas gracias, Rafel, coincido también que en Alaire hay calidad y cantidad de autores que lo definen como uno de los mejores foros de poesía, ciertamente el mejor para mí, es aquí donde encuentro mi felicidad como lector, y no necesito más, es aquí donde, por un comentario como el tuyo, dejo que mi alma brinde tres sonrisas, Mis abrazos, querido amigo.

[Marius Gabureanu]

Pablo, me alegro mucho que este poema lo interpretes así, porque es uno de esos, como bien dices, conectado al cerebro por un tubo directo, no hay nuevos vuelos de mariposa que describir, no necesita inventar otra historia que la que sus versos evoca. Agradecido con tu huella, estimado amigo, que valoro mucho. Muchos abrazos.

[Marius Gabureanu]

Hallie, querida amiga, me alegra tanto tu huella en este poema. Tú, que sabes tanto de mi vida sin habernos conocido en persona ( hubo unas pocas y mágicas conversaciones por el móvil), que me has ayudado a comprender mis abismos, y con tu luz has hecho que me sienta privilegiado... Agradezco de corazón tu huella, querida amiga. Muchos abrazos.

[Marius Gabureanu]

Ana, me alegro que has percibido la ternura en mis poemas. Esa deforestación del pensamiento sigue y nos estamos acostumbrando a ella. no sé si para bien o para mal. Valoro mucho tu presencia. Un abrazo sincero, como me devolviste solo uno, no quedan más. Pero es en mayusculas, ojalá le toque a Armilo un tanto por ciento, porque también es para él.