☼
Por filosofía llego a tu centro. Por poesía, soy tu centro.
La poesía es la madre del poema.
Antes del ser humano, la poesía ya era.
Poesía es el conjunto de leyes que eran, son y serán antes del ser humano.
La poesía flota en el éter. Son Leyes creadoras de la existencia del todo.
Protesto por el nacimiento de un poema, del nacimiento de la poesía me enorgullezco.
Al poeta lo asesinaron por el poema, no por la poesía. Aunque no concluyo.
Amanezco con poesía en mi cabeza, muero con poesía en mi cabeza.
La hija y madre de todas las filosofías es la poesía.
El ser humano es poesía, los poetas son unos pocos.
El ser humano es poesía por ser, el poeta lo es por escribir.
El pensamiento poético mora en la médula del instante y se transpone como un carrusel en tarde infantil.
El poeta y su poema descansa en paz, la poesía y sus leyes universales , descansa en perfección.
La poesía se transforma en Literatura hasta que consigue plasmarse. Mientras tanto, la Poesía es ley absoluta, inequívoca, excelsa. Se transporta por el éter por medio de silencios, de sonidos, de murmullos, de gemidos, de chillidos, de quebrantos de la piel y de acordes de las cuerdas vocales. Señal recibida por el pensamiento innovador.
La poesía es la madre del silencio, del sonido, y de la amplia cadena de aminoácidos.
La poesía es el chispazo de lo que debiera ser, no de lo que es. El poeta sabe eso.
El poeta piensa poesía y escribe poemas. El poeta sabe eso.
Nuestra madre no se llamaba así, se llamaba poesía.
La poesía es mensaje, ley absoluta y relativa, información, ondas, mimesis, genética. A veces plasmada en un poema. Ensayo y error; intento y descarte. El presuntuoso futuro de la humanidad. Pero no solo eso… también es lo restante.
Un eterno saludo a Sócrates, Jesús, Moisés, Usted y muchos otros, que nunca escribieron, que nunca plasmaron letras, y que siempre manifestaron ser Poesía.
a. Camine sintiéndose libre por los senderos que usted elija: y haga poesía mientras tanto.
b. Deténgase frente al aparador de un almacén, véase y haga poesía mientras tanto.
c. Busque el rio de su agrado, véase en el reflejo de sus aguas y haga poesía mientras tanto.
d. Por la mañana que se disponga ante el espejo del baño, véase y haga poesía mientras tanto.
e. Alce la mirada hacia el cielo y véase desde allí. ¿Qué hace mientras se mira desde arriba? ¿Camina? ¿Se ve sentado en la cuneta de la calle?
¿se mira que juega con un perro de la calle? ¿Se mira mientras procura unas monedas a un mendigo? Cuente que mira estando usted escondido detrás de las nubes y haga poesía.
f. Ahora que ya tiene elementos filosóficos para entrañar su esencia, para erradicar la ignorancia y cuestionar la existencia humana, siéntese frente a un papel en blanco y escriba un poema. Eso sí, no se lo muestre a nadie. Dese cuenta quién es usted en verdad, algo que no le interesa a nadie.
g. Después de cumplido el propósito, descanse y entonces descubrirá que usted será poesía eterna. Eso sí, no tema abrir los ojos del pensamiento honrado y valiente para afrontar los misterios que le irán siendo revelados.
Edgardo Benitez
Santa Ana, El Salvador