La sincera gratitud

[Ramón Carballal]

Hasta dónde tendré que regresar para encontrar
un corazón dormido. Gracias a ti que cuidaste
mi jardín cuando era erial, gracias al horizonte
que me dejó ver la luz de tantos cometas, de
microscópicos ejércitos que pugnaban con el miedo.
Hay gratitud en las caricias no anunciadas,
en la risa y en la costumbre de ser algarabía
en la media tarde, también en los ojos blancos del mar
cuando la mirada vigila el romper de las náyades
sobre crestas de espuma inmaculada. Es un ramo
de flor la vida, con sus hojas al viento y su color
imperecedero. Si en la sombra tu cuerpo ha buscado
el sabor de las esquinas y el orgulloso gesto de la
hembra se ha posado en el asombro, recuerda que
un don es el arbitrio de la noche, que las guirnaldas
y los espejos buscan los azules del sueño para darte
una verdad entre las saetas de un reloj fósil. Gracias
por tu piel que nunca fue ambigua, gracias por lo que
en su mudez calló el árbol de la genealogía imperfecta,
gracias por los caminos que recorrí a solas bajo la lluvia,
sintiendo la unicidad de mi yo. Y gracias por los errores
que enseñorearon el crepúsculo cuando la avanzada edad
trató de escribir un testamento en la niebla-como si unas
huellas pudieran ser dibujadas tras el álgido devenir de la vida -.

[Pilar Morte]

Estaba pensando en la infancia hasta que he llegado a mitad del poema y me he trasladado a la compañera. No sé. Sea como sea es un poema muy hermoso , lo he disfrutado porque me ha encantado. Tu poesía está muy alta, y es placentero verla llegar allí.
Felicidades
Besos
Pilar

[Ramón Castro Méndez]

Magnífico poema, Ramón. Otra muestra más de tu maestría. Enhorabuena y ovación, con coda si hace falta.

Un abrazo.

[Ramón Carballal]

Estaba pensando en la infancia hasta que he llegado a mitad del poema y me he trasladado a la compañera. No sé. Sea como sea es un poema muy hermoso , lo he disfrutado porque me ha encantado. Tu poesía está muy alta, y es placentero verla llegar allí.
Felicidades
Besos
Pilar

Mi gratitud también para ti, Pilar, no solo por este comentario sino por el detalle de los muchos anteriores. Un fuerte abrazo.

[E. R. Aristy]

Hasta dónde tendré que regresar para encontrar
un corazón dormido. Gracias a ti que cuidaste
mi jardín cuando era erial, gracias al horizonte
que me dejó ver la luz de tantos cometas, de
microscópicos ejércitos que pugnaban con el miedo.
Hay gratitud en las caricias no anunciadas,
en la risa y en la costumbre de ser algarabía
en la media tarde, también en los ojos blancos del mar
cuando la mirada vigila el romper de las náyades
sobre crestas de espuma inmaculada. Es un ramo
de flor la vida, con sus hojas al viento y su color
imperecedero. Si en la sombra tu cuerpo ha buscado
el sabor de las esquinas y el orgulloso gesto de la
hembra se ha posado en el asombro, recuerda que
un don es el arbitrio de la noche, que las guirnaldas
y los espejos buscan los azules del sueño para darte
una verdad entre las saetas de un reloj fósil. Gracias
por tu piel que nunca fue ambigua, gracias por lo que
en su mudez calló el árbol de la genealogía imperfecta,
gracias por los caminos que recorrí a solas bajo la lluvia,
sintiendo la unicidad de mi yo. Y gracias por los errores
que enseñorearon el crepúsculo cuando la avanzada edad
trató de escribir un testamento en la niebla-como si unas
huellas pudieran ser dibujadas tras el álgido devenir de la vida -.

Un gracias a la vida como a una amante fiel. Es un poema que fluye desde lo sublime. Un abrazo, Ramon. ERA

[Lunamar Solano]

Hermoso, profundo y conmovedor querido amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

[Ana Muela Sopeña]

Pero qué bien escribes, Ramón:

Un placer recorrer tus versos.

Felicitaciones
Un beso grande
Ana

[Ramón Carballal]

Magnífico poema, Ramón. Otra muestra más de tu maestría. Enhorabuena y ovación, con coda si hace falta.

Un abrazo.

Gracias, Ramón, por tu generosidad que no es solo conmigo. Un abrazo.

[Ramón Carballal]

Hasta dónde tendré que regresar para encontrar
un corazón dormido. Gracias a ti que cuidaste
mi jardín cuando era erial, gracias al horizonte
que me dejó ver la luz de tantos cometas, de
microscópicos ejércitos que pugnaban con el miedo.
Hay gratitud en las caricias no anunciadas,
en la risa y en la costumbre de ser algarabía
en la media tarde, también en los ojos blancos del mar
cuando la mirada vigila el romper de las náyades
sobre crestas de espuma inmaculada. Es un ramo
de flor la vida, con sus hojas al viento y su color
imperecedero. Si en la sombra tu cuerpo ha buscado
el sabor de las esquinas y el orgulloso gesto de la
hembra se ha posado en el asombro, recuerda que
un don es el arbitrio de la noche, que las guirnaldas
y los espejos buscan los azules del sueño para darte
una verdad entre las saetas de un reloj fósil. Gracias
por tu piel que nunca fue ambigua, gracias por lo que
en su mudez calló el árbol de la genealogía imperfecta,
gracias por los caminos que recorrí a solas bajo la lluvia,
sintiendo la unicidad de mi yo. Y gracias por los errores
que enseñorearon el crepúsculo cuando la avanzada edad
trató de escribir un testamento en la niebla-como si unas
huellas pudieran ser dibujadas tras el álgido devenir de la vida -.

Un gracias a la vida como a una amante fiel. Es un poema que fluye desde lo sublime. Un abrazo, Ramon. ERA

Muchas gracias, ERA. Un abrazo.

[Carmen Pla]

Me parece un precioso canto a la vida, a la gratitud de sentir, de amar y de soñar.
Precioso!!!
Un abrazo, Ramón

[Ramón Carballal]

Hermoso, profundo y conmovedor querido amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Gracias, amiga, por tu amable comentario. Un beso.

[Ramón Carballal]

Pero qué bien escribes, Ramón:

Un placer recorrer tus versos.

Felicitaciones
Un beso grande
Ana

Gracias, Ana, eres muy amable. Un beso.

[Ramón Carballal]

Me parece un precioso canto a la vida, a la gratitud de sentir, de amar y de soñar.
Precioso!!!
Un abrazo, Ramón

Gracias, Carmen. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo.

[Rafel Calle]

Ramón Carballal en plenitud.

[José Manuel F. Febles]

La letras, no las de cambio, son el alma de cada poema. Este de hoy, al menos el que acabo de leer, es una muestra más del dominio de tu quehacer poético. Un extenso, pero gran poema que lleva la firma inequívoca de su autor. Mis felicitaciones, amigo.

José Manuel F. Febles