Esencia

[Ventura Morón]

...
¿Cuál sería el aliento envasado de venus
que, invisible, trazaría un halo flamante
sobre la crisálida que recubría su vaporosa esperanza?
A soplos deambulaba, en sinfonía de pasillos,
rastreando alucinaciones acuosas, hipnosis de cristal fragante,
que encauzaran en frenesí la piel oculta del alma
hacia una colisión en su pecho,
y, tan sólo de aire,
explotara.
Vaciaba insistente sobre el porte de sus deseos
un universo híbrido de matices almizclados,
una partitura de brisas que entonaban promesas etéreas
en sus latentes miradas a un vacío rebosante.
Con la sombra enfundada en impalpables llamaradas
del teórico interior salió hacia el roce de las calles
al hálito de arterias, que espeso fue filtrándose
a su circulación, acelerada, fundiéndose con la ingrávida noche.
Vio llegar los ojos, al fondo de la ciudad humeante,
como un sorbo de futuro destilando flotantes pasiones,
y olvidando sus propósitos, corrió delirante a la playa,
y esperó bajo las olas, sin intercalados filtros, a que el amor
suspirando, en su desnudez,
la aspirara.
.
.
.

[Marius Gabureanu]

Un poema muy hermoso y complejo, al que tengo que volver, con más tiempo, e intentar definir la huella que me han dejado sus metáforas logradas. Recibe mis abrazos, querido Ventura.

[Carmen Pla]

Un despliegue de preciosas imágenes, tienen el encanto de tu buen hacer poético.
Me ha gustado mucho, Ventura
Abrazo

[Pablo Ibáñez]

Ventura,

me ha gustado el poema, amigo. Me gusta el concentrado lirismo que has aplicado al conjunto. Se nota muy trabajado, muy decidido, aplicando siempre la palabra bella y precisa.

Un abrazo.

[Ramón Castro Méndez]

...
¿Cuál sería el aliento envasado de venus
que, invisible, trazaría un halo flamante
sobre la crisálida que recubría su vaporosa esperanza?
A soplos deambulaba, en sinfonía de pasillos,
rastreando alucinaciones acuosas, hipnosis de cristal fragante,
que encauzaran en frenesí la piel oculta del alma
hacia una colisión en su pecho,
y, tan sólo de aire,
explotara.
Vaciaba insistente sobre el porte de sus deseos
un universo híbrido de matices almizclados,
una partitura de brisas que entonaban promesas etéreas
en sus latentes miradas a un vacío rebosante.
Con la sombra enfundada en impalpables llamaradas
del teórico interior salió hacia el roce de las calles
al hálito de arterias, que espeso fue filtrándose
a su circulación acelerada, fundidiéndose con la ingrávida noche.
Vió llegar los ojos, al fondo de la ciudad humeante,
como un sorbo de futuro destilando flotantes pasiones,
y olvidando sus propósitos, corrió delirante a la playa,
y esperó bajo las olas, sin intercalados filtros, a que al amor
suspirando, en su desnudez,
la aspirara.
.
.
.

Unos versos rebosantes de belleza y lirismo. Un placer de lectura.
Un abrazo.

[Rafel Calle]

Hermoso trabajo de Ventura.

[Marisa Peral]

...
¿Cuál sería el aliento envasado de venus
que, invisible, trazaría un halo flamante
sobre la crisálida que recubría su vaporosa esperanza?
A soplos deambulaba, en sinfonía de pasillos,
rastreando alucinaciones acuosas, [b]hipnosis de cristal fragante,
que encauzaran en frenesí la piel oculta del alma
hacia una colisión en su pecho, [/b]
y, tan sólo de aire,
explotara.
Vaciaba insistente sobre el porte de sus deseos
un universo híbrido de matices almizclados,
una partitura de brisas que entonaban promesas etéreas
en sus latentes miradas a un vacío rebosante.
Con la sombra enfundada en impalpables llamaradas
del teórico interior salió hacia el roce de las calles
al hálito de arterias, que espeso fue filtrándose
a su circulación acelerada, fundidiéndose con la ingrávida noche.
Vió llegar los ojos, al fondo de la ciudad humeante,
como un sorbo de futuro destilando flotantes pasiones,
y olvidando sus propósitos, corrió delirante a la playa,
y esperó bajo las olas, sin intercalados filtros, a que al amor
suspirando, en su desnudez,
la aspirara.
.
.
.

Precioso, hubiera resaltado todo el poema pero he dejado los que más me han llegado en una primera lectura.
Engancha tu poesía, querido Ventura, por ese despliegue genial de recursos tan bien manejados.
Un placer siempre, siempre, leerte y saber que estás aquí.
Un beso.

[Guillermo Cumar.]

Muy grata y descubridora de secuencias se dispone la voz de tu poema a reemplazar las enojosas
presencias delas superficiales displicencias que esperan ir al fondo de lo complejo y serio que se
convierte en la esencia de ayer y de mañana.

un abrazo