Guillermo Cuesta escribió:Desde el Corumelo, con edulcurante inspiración el soneto se hace tuyo y un poco mío,
pues también rezumo del placer de releerlo.
çun abrazo
En verdad, don Guillermo, que el Corumelo suena dulce como aquellas mañanas de primavera en la Toscana, cuando las mozas de Florencia recorren las viñas -vino noble de Montepulciano, mar de Ligura que alienta en sus pechos la bravura de sus olas- quitando las flores impares de los racimos recitando los versos de la poetisa Compiuta Donzella:
Alla stagion che il mondo foglia e fiora,
accresce gioia a tutti I fini amanti:
vanno insïeme alli giardini allora
che gli augelletti fanno nuovi canti:
la franca gente tutta s’innamora,
ed in servir ciascun traggesi avanti,
ed ogni damigella in gioi’dimora,"
Traduzco:
"La pasión en la hoja del mundo florece,
añade alegría a toda manifestación del amante,
jardines que venus une a continuación
que los pequeños pájaros renuevan en canciones:
la gente libre de todo se enamora
y sirve una copa de chianti en los labios
que cada damisela sueña sin demora,"
Estos enigmáticos versos del siglo XIII dicen que fueron regalados por la maga Morgana para hacer más receptivo el útero de las toscanas a la fecundación. De esto no estoy completamente seguro pero sí de las caricias de aquellas mujeres y el olor a pan de sus tahonas.
Un cordial saludo y gracias por tu comentario.