Quizás en otra vida

[jose manuel saiz]

Por mí
que se derrumbe si quiere
Si la mitad de lo que amaba ya no está conmigo…
YO NO TENGO CASA. Carlos Ernesto García.


QUIZÁS EN OTRA VIDA

Quizás en otra vida,
cuando por fin se olvide el tiempo
de todos los que somos,
y en un entorno
distinto al de este mundo,
vivamos un futuro
ajeno a nuestro ahora.

Es muy posible,
que en esa nueva vida
disfrute yo una infancia
feliz y generosa,
donde mi casa en ella tenga
más lumbre en el invierno,
más caprichos; con unos padres
que aún no me imagino
y con amigos
que no serán los mismos.

Si esa vida fuera así, entonces,
no la quiero.

Acaso en ese espacio
virtual e imaginario, los que hoy
en este nos queremos
no hallemos un indicio
siquiera de nosotros;
y en una escena que repite
un bucle eternamente
aparezcas tú de pronto,
pero un segundo siempre
después de que me olvidas.

Si nuestro encuentro implica
perderte en mi memoria,
entonces, esa historia
no la quiero.

Puede que en ese nuevo enclave
no haya flores, océanos ni ríos
ni brillen como en este
el sol y los luceros.
Y es fácil que hasta fuera
un mundo muy feliz y más perfecto,
pero tan raro y tan ingrato
que ignore lo que fuimos, es decir,
lo que ahora somos.

Si ese mundo,
además de insólito, fuera así,
entonces, no lo acepto.
De todos modos,
ya puestos a dejar algún poema
colgado en el futuro,
que al menos hable de una vida
inercia de esta vida,
donde mamá y papá me esperen
viviendo en una casa
pequeña como aquella,
sin lumbre, sin caprichos
(excepto aquella luz
azul de primavera).
Tal vez
en esa nueva tierra
existan, como en esta,
océanos, relámpagos y ríos
y brillen por la noche y por el día
el sol y los luceros...
y que aparezcas tú de pronto
real ante mis ojos, y un segundo siempre
después de que me quieras.

Si esto fuera así, entonces…
no hay problema. Esa vida
sí la quiero.

Puede que este poema sea el eco
de otro aún más remoto
que habita en lo olvidado,
donde escribí los mismos versos
que en este ahora escribo.
Poema que describe
lo hermoso de otro espacio
allá por lo recóndito,
donde están los que ahora somos
y un día nos quisimos,
como si hubiera un Dios,
muy tierno y muy sensible,
que simplemente quiere
que estemos todos juntos
y siempre tú conmigo.


--oOo—

[Rafel Calle]

Hermoso e interesante trabajo de José Manuel.

[Guillermo Cumar.]

Otra vida es lo que tan bien describes. Quien sabrá de su compuesta y acertada disquisición, que tras la transmigración se llegue a
a reverberar el ansia de verlo todo y sentirlo desde el punto de vista del presente, repleto de pasado, ausente hacia el futuro.

Ya dijo Platón que la siguiente vida será como merezca la anterior.

un abrazo

[Pilar Morte]

Ay, José Manuel, el eterno interrogante que nos hacemos y que solo la fe le da respuesta. Sabia reflexión en versos hermosos. Un placer
Abrazos
Pilar

[Víctor F. Mallada]

Quizás en otra vida seamos siempre amigos
y podamos reírnos de lo mucho que cuesta llegar a la excelencia
en unos versos urdidos poco a poco,
pero con mucho pensamiento y más cariño.

Un abrazo, J. Manuel. Preciosas reflexiones las que aquí dejas junto con un buen oficio.
Me gusta como escribes. A esa humanidad de siempre le añades técnica depurada para contar lo que quieres contar y con buen ritmo.


Víctor

[Arturo Rodríguez Milliet]

Tal vez este poema sea el eco de otro
que habita en lo olvidado y donde escribí lo mismo
que en este ahora escribo...

Que curioso, si así fuera, para entonces...
habrías estado recordando el futuro.
Siempre grato reencontrarme con tu poesía amiga.
Un fuerte abrazo.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Una preciosidad, Con los hilos del pasado, presente y futuro, engarzas un tapiz de existencia sabia, humilde y evocadora.

Lo colocaría entre los mejores poemas tuyos... que ya es decir.

Un abrazo.

[jose manuel saiz]

Otra vida es lo que tan bien describes. Quien sabrá de su compuesta y acertada disquisición, que tras la transmigración se llegue a
a reverberar el ansia de verlo todo y sentirlo desde el punto de vista del presente, repleto de pasado, ausente hacia el futuro.

Ya dijo Platón que la siguiente vida será como merezca la anterior.

un abrazo

Muchas gracias Pilar por el comentario.
Un fuerte abrazo.
J. Manuel

[jose manuel saiz]

Víctor, amigo, muchas gracias por tu precioso comentario.
Un abrazo.
J. Manuel

[E. R. Aristy]

Por mí
que se derrumbe si quiere
Si la mitad de lo que amaba ya no está conmigo…
YO NO TENGO CASA. Carlos Ernesto García.


QUIZÁS EN OTRA VIDA


Quizás en otra vida, cuando por fin se olvide el tiempo
de todos los que somos y transitando en un entorno
distinto al de este mundo, vivamos un futuro
ajeno a nuestro ahora (un ahora que es herencia
también de otro pasado).

Puestos a elucubrar, es muy posible
que en esa nueva vida disfrute de una infancia
feliz y generosa, donde mi casa en ella tenga
más lumbre en el invierno, más caprichos y menos luz
azul, en primavera y donde me abracen unos padres
que aún no me imagino y conviva con amigos
extraños a los míos. Si esa vida fuera así, entonces,
no la quiero.

Acaso, en ese espacio imaginario, próximo a un universo
afín y paralelo, los que hoy
en este nos queremos, no hallemos un indicio
siquiera de nosotros y, en una escena que repite
un bucle eternamente, aparezcas tú de pronto, vida mía,
pero un segundo siempre
después de que me olvidas.
Si ello implica perderte a ti de nuevo,
entonces, esa historia,
no la quiero.

Puede, que en ese entorno que doy como probable,
no haya flores, océanos ni ríos, ni brillen como ahora
el sol y los luceros (y es fácil que hasta fuera
un mundo más perfecto, pero tan raro y tan ingrato
que ignore lo que fuimos, es decir, lo que ahora somos).
Si ese mundo, además de insólito, fuera así,
entonces no lo acepto.

De todos modos, ya puestos a dejar algún poema
colgado en el futuro que al menos hable de una vida
inercia de esta vida, donde mamá y papá me esperen
viviendo en una casa, pequeña como aquella,
sin lumbre, sin caprichos (excepto aquella luz
azul, de primavera).
Quizás, en esa tierra que espero semejante a la que piso,
existan como en esta árboles, océanos y ríos
y brillen como ahora el sol y los luceros (y tú
sientas que un día estuve cerca y siempre,
siempre, siempre, me encuentres un segundo
después de que me quieras). Si esto fuera así, entonces…
no hay problema.

Tal vez, este poema sea el eco de otro
que habita en lo olvidado, donde escribí la misma historia
que en este ahora escribo. Poema que describe eternamente
lo hermoso de otro espacio en lo recóndito
donde están los que ahora somos
y un día nos quisimos, como si hubiera un Dios
muy tierno y muy sensible, que simplemente quiere
que siempre estemos juntos.


--oOo—

Me ha parecido un poema provocador, en parte. Ese cambio radical supone ser otro yo completamente. Es un poema hermoso y bien construido, que me conmueve y traspasa la medula....ninguna fantasia puede suplantar los lazos afectivos y genéticos de nuestro árbol familiar, no importa cuanto nos duelan, cuan imperfectos sean esos hijos, esa madre, ese padre....cuan imperfecta sea yo misma, si dada una oportunidad de cambiarme y de cambiarlos, me quedo con mi corazón roto. Un fuerte abrazo, ERA