Tenderos de hombres

[Antonio Justel]

… orgullosos y soberbios, tenderos de hombres van y vienen con sus dioses raídos;
los llevan atados a las ruedas de sus coches, a su dinero y poder, a sus sexos y fama, a sus gritos,
y los toman, los tiran y barren, incluso los asesinan y venden muertos como obras de misericordia,
y se narra en los periódicos, en internet, en las televisiones; y a veces, en las casas, mientras lo vemos,
saltan las sangres manchando alfombras y paredes, alterando y destruyendo sutilmente nuestro ambiente;
y algunas otras, muy pocas, lograremos contener un terrible sonido en la boca,
el mismo con el que nos proponíamos transgredir estas normas brutales y execrables del mundo;
pero, tal vez, a lo más, habremos ido al baño, habremos vomitado las bilis del desastre
y vuelto luego al mar y a su vorágine, a su furia y egoísmo,
a su sequedad tosca y dura;
… cuando veo pasar una gaviota alta, y como despreocupada, la miro bajo el cielo y me digo:
¡ adónde irá !
… entonces, en ese instante, sé que es la hora del grito reparador, por lo que rápidamente me encierro
en el baño-alma y allí me quedo un rato gimiendo, llorando y mintiéndome como un estúpido,
como un ciego cobarde y ruin, como un hombre-tipo tan justamente adecuado
a un plan servil, tan propicio a un son, tan leal y exacto a nuestro tiempo.







http://www.oriondepanthoseas.com

[Rafel Calle]

''llorando y mintiéndome como un estúpido,
como un ciego cobarde y ruin, como un hombre-tipo tan justamente adecuado
a un plan servil, tan propicio a un son, tan leal y exacto''

Todo eso que dices, querido amigo Eledendo, me resulta muy familiar.
Con tu proverbial estilo repasas las miserias del aliento poderoso y, en mi opinión, lo haces con acierto.
Ha sido un placer.
Te mando un fuerte abrazo.

[Antonio Justel]

''llorando y mintiéndome como un estúpido,
como un ciego cobarde y ruin, como un hombre-tipo tan justamente adecuado
a un plan servil, tan propicio a un son, tan leal y exacto''

Todo eso que dices, querido amigo Eledendo, me resulta muy familiar.
Con tu proverbial estilo repasas las miserias del aliento poderoso y, en mi opinión, lo haces con acierto.
Ha sido un placer.
Te mando un fuerte abrazo.

... Rafel, los materiales con que construimos normalmente los tenemos delante de nosotros, solo tenmos que reparar en ellos y escribir, deahí tu enorme acierto al decir que te "resulta familiar", yo diría que "nos resulta en general muy familiar"; en fin, amigo, gracias por asomarte a este agujerito del poema; Un abrazo; Orión

[Hallie Hernández Alfaro]

A primera plana con la excelencia.

[Pilar Morte]

Me alegra el rescate del poema porque está de plena actualidad. Precioso y justo de principio a fin. Así somos y así nos hacen. Menos mal que hay conatos de rebeldía contra la injusticia.
Besos
Pilar

[Josefa A. Sánchez]

Me gusta mucho el discurso que se aproxima tanto, a través de un lenguaje bello y acertado, a la transparencia más clara de lo que somos o nos dejan ser. Un placer leerte.
Un abrazo.
Pepa

[Rafel Calle]

Bellísimo poema de Orión.

[Macedonio Tracel]

un enorme gusto leer este poema.

[Óscar Distéfano]

En este poema tuyo, amigo Antonio, veo grito, rebeldía y denuncia. Con tu estilo de gran explorador de la metáfora, nos regalas este valioso trabajo que desnuda nuestras miserias humanas. Es siempre un gran placer acercarme a tus letras.

Un fuerte apretón de manos.
Óscar

[J. J. Martínez Ferreiro]

Amigo Antonio, has dejado impresionada las paredes de este foro con un fresco impresionante sobre la realidad social que nos asola, aquí se muestra todo la mentira, la injusticia, la vergüenza de "las matronas" de esos raídos dioses antiguos, que por locura y poder destrozan nuestras vidas, pero tambien está nuestra vergüenza y cobardia, la falta de respuesta ante tamaña agresión a los principios básicos que auparon, en época ya pasadas, a la tan denostada civilización occidental.

Un poema muy necesario, que habría que clavar en los corchos de todas las aulas del mundo.

Un fuerte abrazo, viejo amigo.

[Carlos Justino Caballero]

Antonio Justel, Excelente proclama denunciando esta triste actualidad que vivimos. Un gran aplauso a tu prosa, amigo!