La Editorial Alaire, auspiciada por la Academia de Poesía Alaire, pone gratuitamente a disposición de sus foristas registrados, varios foros de poesía, prosa literaria, debates…, para que puedan publicar sus obras e interactuar entre ellos, así como, la tienda de libros donde se muestran las publicaciones, tanto en papel como en formato digital, estos mediante descarga gratuita. La razón de ser de nuestros foros se centra en promocionar la poesía, mediante las obras de los autores que participan en la plataforma de la Academia de Poesía Alaire. La promoción de la poesía, a nivel del mundo de habla hispana, conlleva una enorme responsabilidad, por ello, pedimos la máxima implicación de todos los miembros de Alaire. Vale recordar al gran maestro Dumas: uno para todos y todos para uno. Muchas gracias por todo, queridos compañeros.
Ya no mueren los labios lejanos que tuviste
en el rubor sin rostro de una lágrima amarga
que cae en el espejo de una sonrisa triste,
una fragancia muerta, una esperanza herida,
un árbol arrastrado por las hojas del tiempo.
He perdido tu gracia, el ritmo de tus brazos,
los libros que guardabas en el desván del viento,
tengo sangre en las alas
y el corazón perdido,
una corona triste que insiste en los reflejos
de aquellos versos largos que huyeron de mi alma.
Ya no busco en las sombras el aura de tu rostro,
tus zapatos perdidos en la fiesta del viernes,
tu cintura vagando en un rumor que llora,
la luz de tu recuerdo en las calles vacías,
ya no espero tu nombre en la calle que tiembla,
pero sigo surcando
el mar de tu mirada.
Última edición por F. Enrique el Vie, 10 Jun 2022 10:05, editado 2 veces en total.
su corazón de música y de pena;
así voy yo, borracho melancólico,
guitarrista lunático, poeta,
y pobre hombre en sueños,
siempre buscando a Dios entre la niebla.
(Antonio Machado - Es una tarde cenicienta y mustia)
F. Enrique escribió:Ya no mueren los labios lejanos que tuviste
en el rubor sin rostro de una lágrima amarga
que cae en el espejo de una sonrisa triste,
una fragancia muerta, una esperanza herida,
un árbol arrastrado por las hojas del tiempo.
He perdido tu gracia, el ritmo de tus brazos,
los libros que guardabas en el desván del viento,
tengo sangre en las alas
y el corazón perdido,
una corona triste que insiste en los reflejos
de aquellos versos largos que huyeron de mi alma.
Ya no busco en las sombras el aura de tu rostro,
tu cintura prendida en un deseo que hiere,
la luz de tu recuerdo en las calles vacías,
pero sigo surcando
el mar de tu mirada.
Querido F, Enrique, permíteme felicitarte calurosamente, lo mejor de lo mejor que yo te he leído. Cada verso, cada estrofa es un pétalo sangrante de fragante rosa... sin desperdicio. Gran poema, compañero!
Melancolía, amigo que se arrastra por tus desbanes
Ya no busco en las sombras el aura de tu rostro,
tu cintura prendida en un deseo que hiere,
la luz de tu recuerdo en las calles vacías,
pero sigo surcando
el mar de tu mirada.
F. Enrique escribió:Ya no mueren los labios lejanos que tuviste
en el rubor sin rostro de una lágrima amarga
que cae en el espejo de una sonrisa triste,
una fragancia muerta, una esperanza herida,
un árbol arrastrado por las hojas del tiempo.
He perdido tu gracia, el ritmo de tus brazos,
los libros que guardabas en el desván del viento,
tengo sangre en las alas
y el corazón perdido,
una corona mustia que insiste en los reflejos
de aquellos versos largos que huyeron de mi alma.
Ya no busco en las sombras el aura de tu rostro,
tu cintura prendida en un deseo que hiere,
la luz de tu recuerdo en las calles vacías,
pero sigo surcando
el mar de tu mirada.
Bellísimo. No precisa más palabras. Gracias por compartir.
Un abrazo, Poeta.
BEGOÑA.
F. Enrique escribió:Ya no mueren los labios lejanos que tuviste
en el rubor sin rostro de una lágrima amarga
que cae en el espejo de una sonrisa triste,
una fragancia muerta, una esperanza herida,
un árbol arrastrado por las hojas del tiempo.
He perdido tu gracia, el ritmo de tus brazos,
los libros que guardabas en el desván del viento,
tengo sangre en las alas
y el corazón perdido,
una corona mustia que insiste en los reflejos
de aquellos versos largos que huyeron de mi alma.
Ya no busco en las sombras el aura de tu rostro,
tu cintura prendida en un deseo que hiere,
la luz de tu recuerdo en las calles vacías,
pero sigo surcando
el mar de tu mirada.
He sentido la nostalgia en tu letra, pero eso es lo que me gusta
de leer poemas, que me dejen un sentir, como el que ahora me has dejado.
Saludos.
No te rindas, aun estas a tiempo
de alcanzar y comenzar de nuevo...
MARIO BENEDETTI
Muy bello poema, amigo Enrique, que delata el oficio del escribidor.
Consigues versos altamente evocadores a lo largo de tus alejandrinos, todos ellos técnicamente felices y con un ritmo de lo más apropiado.
Por cierto, he notado que eres demasido taxativo con los poemas no rimados. Quizá sería más efectivo, desde el punto de vista musical, dejar alguna que otra rima, despreocupadamente. Quiero decir que, desde el punto de vista de la libertad creativa, en los poemas, tan costoso es rimar a drede, como no rimar a conciencia. O eso creo.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un cordial abrazo.
La segunda estrofa de este poema, me parece digna de destacar. Es un acierto de equilibrio mágico que deleita la lectura y acerca a la buena poesía. Mi felicitación.
Es la segunda vez que rompo el protocolo de una forma consciente, Rafel, espero que los compañeros sepan perdonarme. Pero creo que lo que me has dicho es sumamente interesante, que conecta directamente con la línea divulgativa y formativa que preconizas y a la que tanto tiempo dedicas.
Has estado acertado a la hora de afirmar que huyo de la rima cuando escribo en verso libre, no te habrá pasado inadvertido el uso del hipérbaton, no siempre afortunado, cuando se trataba de evitarlas. No siempre ha sido así, tengo poemas en este mismo Foro que lo atestiguan. El origen de esta fijación está en un comentario que me hizo mi amigo Alberto en el poema "I want you" en el que me hizo la observación de la rima de "francés" con "Musset", tengo que admitir que su valoración del poema fue muy positiva y que, además, me puso en la senda de Tomás Segovia, en fin, el joven enseñando al veterano, pienso que su exigencia no me ha venido mal y he obtenido buenos resultados cuando buscaba soluciones a los problemas que yo mismo había creado.
No descarto, Rafel, volver a utilizar rimas esporádicas, sobre todo cuando se trate de cerrar un poema, es lo que solía hacer hace muchos años, sigo abierto al aprendizaje, ha sido aquí donde he leído algunos de los mejores poemas en mucho tiempo, se puede aprender mucho de ellos.
Un abrazo.
su corazón de música y de pena;
así voy yo, borracho melancólico,
guitarrista lunático, poeta,
y pobre hombre en sueños,
siempre buscando a Dios entre la niebla.
(Antonio Machado - Es una tarde cenicienta y mustia)
Estoy encantado con lo que me dices, Allen, creo que la prueba de fuego de un poema es cuando resiste al ser recitado.
Un abrazo.
su corazón de música y de pena;
así voy yo, borracho melancólico,
guitarrista lunático, poeta,
y pobre hombre en sueños,
siempre buscando a Dios entre la niebla.
(Antonio Machado - Es una tarde cenicienta y mustia)
siempre me sorprende ese tono super lírico y nostálgico que despliegas en tus composiciones.
El recuerdo, la imagen amada, lo perdido... Y el mediterráneo siempre presente, de una forma u otra, para envolverlo todo.