Las palabras...

[Raul Muñoz]

Ellas viajan en el tiempo, desfigurando mi rostro,
tratando de hallar la razón por la cual estoy vivo.


Su última voluntad dicta una sentencia,
que poco o nada tiene que ver con mi vida.


Sus excusas anidan en mis pulmones,
respirando contra mi propia voluntad.


Su última voluntad
es mi propia voluntad.


Estoy condenado a hablar.

[Miguel Ángel Martínez Góm]

Profundos y reflexivos versos, amigo Raul.
Un placer leerte.
Fuerte abrazo.

[Manuel Alonso]

Estás condenado a hablar amigo Raúl, a través de tus versos hermosos, un placer leerte y un abrazo.

[Rafel Calle]

Hermoso e interesante poema de Raùl.

[F. Enrique]

Hablar a través de lo que se dice o de lo que se escribe puede ser percibido como una condena, hubo un gran poeta que nos habló de los sonidos del silencio, tú nos hablas de tu corazón inquieto, de ese imperativo que nos acorrala y nos lleva a la calle para expresar lo que sentimos aunque no podamos encontrar las corrientes que muevan nuestras palabras. Me ha parecido muy interesante tu poema, Raúl.

Un abrazo.

[Mitsy Grey]

Y es cierto! Así está condenado quién entiende de 'cadenas' o sea, de palabras.

Bravo, poeta. Mi Enhorabuena...sigue hablando... ¡Por favor!

Mi abrazo. Mitsy

[Pilar Morte]

Me ha gustado la lucidez y belleza de tus versos. Un placer
Abrazos
Pilar

[Armilo Brotón]

Cierto Raúl. La capacidad de comunicación intensa, profunda, distingue a este animal que es el hombre. La palabra es una de las herramientas y por eso nos encontramos aquí.
Es una breve y hermosa reflexión metapoética.

Recibe un cordial saludo.

La Corpo

[Mirta Elena Tessio]

Raul Muñoz, Poeta, si, doblemente si, estás condenado con el don de la palabra, aquella que te dibuja y desdibuja, aquella llega a las honduras del alma
que espera, esa palabra de poeta. Grita si puedes porque para mi es energía
divina, para no claudicar la historia de las historias vividas.
No calles poeta, comparte tu decir, yo aprenderé de ti.
Felicidades desde mi Argentina.

[Hallie Hernández Alfaro]

Sube para deleite de todos.

[Raul Muñoz]

Profundos y reflexivos versos, amigo Raul.
Un placer leerte.
Fuerte abrazo.

Gracias, Miguel Ángel, me alegro que te haya gustado.

Un fuerte abrazo.

[Raul Muñoz]

Estás condenado a hablar amigo Raúl, a través de tus versos hermosos, un placer leerte y un abrazo.

Gracias, Manuel amigo, me alegro que así lo veas.

Un abrazo.

[Raul Muñoz]

Hermoso e interesante poema de Raùl.

Gracias Rafael, amigo, siempre es un placer contar con tu compañía.

Un abrazo.

[Óscar Bartolomé Poy]

Y es que las palabras lo mismo nos condenan que nos liberan. Como tantas cosas en la vida, son un arma de doble filo, una de las muchas dicotomías: vida/muerte, luz/oscuridad, etc. Para el poeta, por ejemplo, los silencios suelen ser muy poéticos, pero ¿qué sería de la poesía sin la palabra, por mucho que amordace nuestra voluntad?

Un placer discurrir al socaire de tus versos. Un abrazo, Raúl.

[Raul Muñoz]

Hablar a través de lo que se dice o de lo que se escribe puede ser percibido como una condena, hubo un gran poeta que nos habló de los sonidos del silencio, tú nos hablas de tu corazón inquieto, de ese imperativo que nos acorrala y nos lleva a la calle para expresar lo que sentimos aunque no podamos encontrar las corrientes que muevan nuestras palabras. Me ha parecido muy interesante tu poema, Raúl.

Un abrazo.

Muy interesante lo que comentas, Enrique, porque a veces así me siento; me cuesta encontrarle significado a los poemas, como si hubiera una cadena de significantes que los impulsan.

Un placer siempre contar con tus apreciaciones.

Un abrazo, amigo.