Retirado para un proyecto personal.

[Gerardo Mont]

Retirado para un proyecto personal.

[Hallie Hernández Alfaro]

Ah, ésto es fabuloso, Gerardo. Como traes los elementos idílicos, imponderables, emotivos, sabios, iniciáticos hasta la sensibilidad del lector perplejo. Y entramos en los muros formativos, en las vitalicias sombras de un ayer muy fornido y majestuoso. Los recuerdos se apoderan del oxígeno de la vieja casa; hacen un mohín de santuario inequívoco e imborrable. Lo más impresionante es esa forma de ponernos en el corazón de la infancia y en las volutas de la primerísima juventud.

He salido conmovida hasta los huesitos, querido hermano. Gracias por ello.

De pie para la gesta de los aplausos; abrazo enorme para todos.

[Carmen López]

Gran poema, Gerardo, temblando hasta los huesos me has dejado, querido amigo, respirando olor de infancia y sintiendo las paredes de la casa como besos. Extraordinaria tu pluma, Gerardo, grande, grande hasta las alturas.
Ahhh, Felicidades Tico...rezando como una posesa estaba en la tanda de penaltis!!!
Un gran abrazo.

Carmen

[J. Paz]

Una maravilla, Gerardo. Tan amable, tan querible. Felicidades. Un abrazo,

Judit

[Guillermo Cumar.]

Con la vida a cuestas tallaste este poema, amigo, y yo me he sentido tan a gusto
visionando reflexiones e imágenes que la polimetría se me iba haciendo ritmo
al describir el domicilio poético de sentires y criterios.

un abrazo

[Gerardo Mont]

No es un buen poema, es un Gran poema, Gerardo, y en él también me vi saltando entre parientes y momentos idos, abrazos, aquí tan cerca que no nos vemos, abrazos

Un gran gusto tu lectura y comentario, vecino. Te agradezco mucho tu apoyo. Qué estés bien junto a los tuyos. Abrazos.

[Pilar Morte]

Un poema que lo tiene todo, calidad en los versos y belleza en la palabra. Me gustó mucho.
Besos
Pilar

[Ventura Morón]

Amigo Gerardo, ¿que decirte?. Quizás te diré que de manera especial he sentido toda la humanidad de estas letras tuyas.

La inocencia pierde su disfraz y el Susto
-asi con mayuscula para ataviarlo en alarido-
se vuelve bondadoso,
pues solo corría por nuestros tobillos para enseñarnos a saltar orillas demasiado profundas,
incluso cuando las piernas crecen y podemos
-como en un sueño imposible-
llevar el pantalón de nuestros abuelos,
que súbitamente parecen haber sido cimbrados por una brisa traviesa
que encorva sus alas... siempre inmensas y siempre abiertas.
La casa sigue respirando,
sus poros atraviesan adolescencias y veranos como si contaran segundos,
y a pesar de su firmeza, se nos acaba entre las manos,
porque incluso ella, que encerraba un cosmos dentro de infinitos universos,
ha empezado a agrietarse de florecer tantas veces,
y se convierte quizas en semilla, siempre viva, siempre latente,
con la manos juntas, un tesoro inmenso visible si haces catalejo abrazando tus nudillos
y formando el círculo que lleva, incesantemente, a su puerta.

Un abrazo amigo Gerardo, me dejé llevar por tu poema, y es que ¡que placer tan grande leerte!

Un fuerte abrazo

[Arturo Rodríguez Milliet]

Amigo mio, tu poema me ha impregnado de una cálida sensación de nostalgia y ternura de la que me cuesta desprenderme. Cada teja, cada brizna de paja adherida a la amalgama de su barro, cada aroma que desprende, cada registro sonoro que almacenaron sus paredes... todo! está allí, en cada palabra y cada verso embriagado de tu sensibilidad y aguda inteligencia.

Un abrazo emocionado.

[Ricardo José Lascano]

Gran trabajo Gerardo, la verdad es que no pude sacar el ojo de estos versos, me atrapó totalmente, narrado desde una distancia leve casi dentro de la obra, de notable entrega y sensibilidad. Para aplaudir. Volveré, sin dudas.

Abrazo de luz


RJL

[Gerardo Mont]

Ah, ésto es fabuloso, Gerardo. Como traes los elementos idílicos, imponderables, emotivos, sabios, iniciáticos hasta la sensibilidad del lector perplejo. Y entramos en los muros formativos, en las vitalicias sombras de un ayer muy fornido y majestuoso. Los recuerdos se apoderan del oxígeno de la vieja casa; hacen un mohín de santuario inequívoco e imborrable. Lo más impresionante es esa forma de ponernos en el corazón de la infancia y en las volutas de la primerísima juventud.

He salido conmovida hasta los huesitos, querido hermano. Gracias por ello.

De pie para la gesta de los aplausos; abrazo enorme para todos.

Un gran gusto encontrar tu amabilísima huella en mis humildes trazos. Sabes que admiro tu arte amiga y que es un honor contar con tu apoyo. Muchas gracias con un abrazo sincero para tí y los tuyos.

[Gerardo Mont]

Gran poema, Gerardo, temblando hasta los huesos me has dejado, querido amigo, respirando olor de infancia y sintiendo las paredes de la casa como besos. Extraordinaria tu pluma, Gerardo, grande, grande hasta las alturas.
Ahhh, Felicidades Tico...rezando como una posesa estaba en la tanda de penaltis!!!
Un gran abrazo.

Carmen

Muchas gracias estimada poeta, por tu lectura y tu amable comentario. Me alegra que te gustaran mis humildes trazos. Un honor contar con tu apoyo.
La suerte ya no nos alcanzó en éstos otros penales con Holanda, pero en fin, logramos mucho más de lo esperado.
Un gran abrazo.

[Rafel Calle]

Otra vuelta de tuerca a tu poesía y quizá el poema más completo que te he leído, amigo Gerardo.
En esta obra, la conceptualidad, el desarrollo, la melodía y el trazo lírico son dignos de un autor con un cuajo importante. Una vez que lo repase a fondo, intentaré entrar de nuevo para comentarte ciertos detalles gramaticales -muy pocos-, un asunto en el también has mejorado mucho; por ejemplo, "como una flor inmarcesible…;" (el punto y coma, los puntos suspensivos).
Felicidades, colega. En fin, me alegro mucho de que hayas conseguido una poética tan cuajada, tan novedosa, tan aprehensible, tan hermosa.
Abrazos.

[Gerardo Mont]

Una maravilla, Gerardo. Tan amable, tan querible. Felicidades. Un abrazo,

Judit

Muchas gracias por tu amable paso, estimada poeta. Un honor contar con tu apoyo a mis humildes letras. Un gran abrazo.