Separamos un sueño

[J. J. Martínez Ferreiro]

Separamos el sueño
donde el mar amplifica su vasto anonimato.
Fue un acontecimiento que apuró
una avidez melancólica.

Separamos un sueño delicioso
que era el fundamento del juego,
el del color de las bombillas nocturnas
requebrando las sombras
en la playa plata de luna.

Separamos un sueño conmovedor
que era la trama del cántico,
el de la ambición de los grillos
por colmar los campos eternos,
el del lamento de las fuentes
por el agua extraviada,
el de las calles espesando el eco
de los pasos ya idos.

Separamos la fragancia del sueño,
el de los establos abiertos
al cielo azul.
Sentíamos la lejanía del pensamiento,
su circunstancia inútil por el callado amor.
En cada ojo revelábamos
el charco limpio
de los recuerdos desbordados.

[Antonio Justel]

Separamos un sueño abrumador
en las más insondables corrientes marinas,
donde el mar amplifica su vasto anonimato.
Fue un acontecimiento que apuró
el afán animal;
una marea imaginaria ascendiendo
toda la espuma de la infancia.

Separamos un sueño delicioso
que era el fundamento del juego,
el del color de la bombillas nocturnas
danzando sus doradas sombras en la arena
plata de luna,
el del placer
de los amantes en la playa en llamas.

Separamos un sueño conmovedor
que era el fundamento del juego,
el de la intención de los grillos por abarcar los campos
eternos,
el del lamento de las fuentes por el agua perdida,
el de las calles espesando el eco
de los pasos ya idos.

En cada ojo revelábamos
el charco limpio
de los recuerdos desbordados.
Los establos se abrían a la calma del cielo azul
con sus bueyes evaporándose.
Sentíamos la lejanía del pensamiento,
su circunstancia inútil por el callado amor.
El agua transpiraba la expectación del bosque
celando en la madera
un corazón de tiempo.

... gran capacidad para mezclar y traernos en poética tantos y tantos sueños desde aquella infancia luminosa a esta verdad que el poeta detenta y canta, mirándola, observándola evaporarse como por ensueño, pero que ha dejado previamente un poso de buena, buena poesía; salud, amigo José Juan; Orión

[Bruno Laja]

Das el cuerpo de la llave y luego los dientes. Das la superficie y luego la materia. El recuerdo más lejano es el que más cerca está de uno. Quizá por eso, en mi opinión, en lo que yo veo y quiero ver, los animales uncidos, como olas, no se separan, se evaporan a la vez, hacen tangible su columna de fuego frío, la que refresca la nuca y la fontana mientras se habla, mientras uno se deja ser hablado. Gran poema, J.J. Ferreiro. Recibe un fuerte abrazo.

[Julio Gonzalez Alonso]

Mareas, sueños, espumas, mares de fondo en versos trepando por el poema. Un abrazo, Ferreiro.
Salud.

[Manuel Alonso]

Hola amigo, otro gran poema tuyo, que denota madurez y artesanía en la palabra, belleza en los versos, gracias, un abrazo.

[E. R. Aristy]

Separamos un sueño abrumador
en las más insondables corrientes marinas,
donde el mar amplifica su vasto anonimato.
Fue un acontecimiento que apuró
el afán animal;
una marea imaginaria ascendiendo
toda la espuma de la infancia.

Separamos un sueño delicioso
que era el fundamento del juego,
el del placer
de los amantes en la playa en llamas,
el del color de las bombillas nocturnas
danzando sus doradas sombras en la arena
plata de luna.

Separamos un sueño conmovedor
que era el fundamento del juego,
el de la intención de los grillos por abarcar los campos
eternos,
el del lamento de las fuentes por el agua perdida,
el de las calles espesando el eco
de los pasos ya idos.

Los establos se abrían a la calma del cielo azul
con sus bueyes evaporándose.
Sentíamos la lejanía del pensamiento,
su circunstancia inútil por el callado amor.
El agua transpiraba la expectación del bosque
celando en la madera
un corazón de tiempo.
En cada ojo revelábamos
el charco limpio
de los recuerdos desbordados.

Es un poema emocionante. Un poema de fuerza animal y de fuerza espiritual. Me ha erizado su passion. Admiracion y respetos, gran poeta. ERA

[xaime oroza carballo]

Separamos un sueño abrumador
en las más insondables corrientes marinas,
donde el mar amplifica su vasto anonimato.
Fue un acontecimiento que apuró
el afán animal;
una marea imaginaria ascendiendo
toda la espuma de la infancia.

Separamos un sueño delicioso
que era el fundamento del juego,
el del placer
de los amantes en la playa en llamas,
el del color de las bombillas nocturnas
danzando sus doradas sombras en la arena
plata de luna.

Separamos un sueño conmovedor
que era el fundamento del juego,
el de la intención de los grillos por abarcar los campos
eternos,
el del lamento de las fuentes por el agua perdida,
el de las calles espesando el eco
de los pasos ya idos.

Los establos se abrían a la calma del cielo azul
con sus bueyes evaporándose.
Sentíamos la lejanía del pensamiento,
su circunstancia inútil por el callado amor.
El agua transpiraba la expectación del bosque
celando en la madera
un corazón de tiempo.
En cada ojo revelábamos
el charco limpio
de los recuerdos desbordados.

Ardora buscando na beiramar o latexar dun poema a noite. Imos lernos e ecribir mais, meu, estnmme dandoseis meses. De stand by. Unha fonda aperta, meu

[J. J. Martínez Ferreiro]

... gran capacidad para mezclar y traernos en poética tantos y tantos sueños desde aquella infancia luminosa a esta verdad que el poeta detenta y canta, mirándola, observándola evaporarse como por ensueño, pero que ha dejado previamente un poso de buena, buena poesía; salud, amigo José Juan; Orión

Es un gran honor, Justel, que seas precisamente tú quien abra este tema. Gracias, celebro que lo hayas disfrutado.

Un fuerte abrazo, viejo amigo.

[Óscar Distéfano]

Un regreso con todo al simbolismo más íntimo made in Ferreiro. Un poema que apela a la intuición del lector, a su capacidad de dejarse llevar por las señales casi imperceptibles de la evocación, de la reflexión existencial, de su fe en la poesía arropada con los tules de la imaginación, como esas enigmáticas mujeres que cubren significativamente sus bellos rostros con velos. Un enorme despliegue de metáforas originales, de imágenes que sorprenden por el contraste de sus paradojas. En cuanto al ritmo, es lo que más aplaudo del poema. Ha sido un placer.

Un abrazo, apreciado gran poeta.
Óscar

[Pilar Morte]

Eres dueño de la metáfora hermosa que aflora incansable en tus versos.
Siempre es un placer pasar por tus poemas, disfrutarlos y aprender de ellos.
Abrazos
Pilar

[Ramón Carballal]

Una buena aportación al libro de Alaire. Siempre se disfruta con la lectura de tu poesía. Un abrazo.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Das el cuerpo de la llave y luego los dientes. Das la superficie y luego la materia. El recuerdo más lejano es el que más cerca está de uno. Quizá por eso, en mi opinión, en lo que yo veo y quiero ver, los animales uncidos, como olas, no se separan, se evaporan a la vez, hacen tangible su columna de fuego frío, la que refresca la nuca y la fontana mientras se habla, mientras uno se deja ser hablado. Gran poema, J.J. Ferreiro. Recibe un fuerte abrazo.

Gracias, Bruno, por tan hermoso comentario. Es todo un honor. Celebro que lo hayas disfrutado.

Un abrazo.

[Guillermo Cumar.]

Los sueños y el amor se agarran de la mano y templan el ambiente
de juego, de placer, de divertimento con la sofisticación imaginaria
en la que descansan los recuerdos

Un placer de lectura, amigo.

un abrazo

[J. J. Martínez Ferreiro]

Mareas, sueños, espumas, mares de fondo en versos trepando por el poema. Un abrazo, Ferreiro.
Salud.

Percebes, mejillones, godellos que sueñan en el mar. Todas son drogas necesarias para una buena comprensión entre todos los seres humanos

Salud y sana ironía, amigo Odiseo

[Pablo Ibáñez]

Ferreiro,

me encanta, amigo, me gusta muchísimo. Me parece un hallazgo muy bello la idea de "separar un sueño", en el sentido doble de recrearlo y de distinguirlo. Me encanta la manera como vas incidiendo sobre el tema a lo largo de todo el poema, aliterando el título al inicio de cada estrofa para darle distintos matices: abrumador, delicioso, conmovedor... Destacaría también la gran calidad de los encabalgamientos, como manda uno de los canones de Alaire: aportando estilismo y calidad:

danzando sus doradas sombras en la arena
plata de luna.

el de la intención de los grillos por abarcar los campos
eternos,

Me gusta también el estilo del final. No busca la contundencia al uso de un final estruendoso, sino que más bien sigue el tono de todo el poema sin distinguirse en exceso, como dando a la estructura un aire circular no-lineal, que sugiere continuidad, naturalidad.

Me ha encantado, maestro.