Oyendo un nocturno de Chopin

[Óscar Distéfano]

Oyendo un nocturno de Chopín

Hoy es aún mi tiempo, tal vez una de las últimas noches
donde pueda oír un nocturno de Chopin.

Soy un hombre mecánico, con ritmo temporal
en mi estructura osteológica y en la función de mis arterias,
y tan sólo me resta ennoblecer los sucesos errantes de mi psiquis
por las venas con tufo a sangre accidentada,
a sueños carcomidos por la abulia,
a eternidad sin gloria,
como tristes historias de amor de drogadictos.

Crear palabras cordiales para los solitarios,
y como ellos ser también un hombre nocturno
acostumbrado al coro impertinente de los grillos.
No desangrarme más
rastreando las notas de algún violín muerto de amor.

Estoy junto a la vida, amo lo vivido,
cerca de los recuerdos —grandes blanqueadores de mi alma.
Pero pasaron muchos años,
y a montones recojo escombros de mi empeño,
y se vuelven los árboles más débiles, como mi madre,
aunque la noche sigue tranquila hacia su lecho helado.

Voy cayendo a la tierra como una semilla con alas,
en búsqueda poética de hundirme en surco fértil,
y un temblor de retoño se extiende por mis ramas,
y cada día saco fuerzas de mis hojas muertas,
del crepúsculo —cofre de todos mis secretos.

Y en una de estas noches de brillantes estrellas
descargará el destino su furia sobre mí.

[Carmen López]

Muy sugerentes reflexiones ante la música de Chopin, lo mejor sus nocturnos, sin dudas, a mí me suscita muchos recuerdos. El poema me ha parecido maravilloso, todo un recorrido nostálgico que se lee de corrido. Me ha gustado mucho, Oscar.

Un abrazo.

Carmen

[Pablo Ibáñez]

Óscar,

me ha gustado mucho el poema, amigo. La descripción en primera persona de la vejez, de la debilidad, logra una identificación instantánea con el personaje. Nos metemos dentro de su ajada piel y entendemos su resignación y su humildad. El último nocturno de Chopin, la música en la noche, se convierte en la última gloria disponible para este hombre mísero, una imagen de gran patetismo y belleza.

Un abrazo.

[Pilar Morte]

Te vuelvo a decir que me encantan tus poemas, los disfruto, me llegan porque me dicen. Estas reflexiones sobre el fondo de Chopin son excelentes.
Besos
Pilar

[José Manuel Sáiz]

Nos dices mucho sobre tí en el poema. Desnudas una parte de tu psique y la compartes en unos versos profundos, elegante e intimistas. La excusa del nocturno de Chopin contribuye a crear esa peculiar atmósfera. Excelente.
Un abrazo
J. Manuel

[Víctor F. Mallada]

Oscar,

Estoy leyendo tu nocturno y escuchando a Chopin (Nocturno Op. 9, nª 2). Todo un placer para los sentidos. Sentirse transportado por tu letras y las notas de un piano a un plano de hermosura con sus fortes, pizzicatos, altos, bajos, vida en pleno desarrollo.

A pesar del ambiente de tristeza (también expresado por la música) uno no puede menos de sentirse afortunado por poderse deleitar en expresiones tan rítmicas y tan bien construidas en este poema.

¿El destino? Cada uno se ha labrado el suyo a golpe de bailar con lo que suena.

Un abrazo, amigo.

Víctor

[Guillermo Cumar.]

Una vivífica confesión existencial bajo la música grata de un nocturno de Chopin
aunque internamente fluye alguna carencia muy bien plasmada por la expresión
poética de tu magnífico poema.

un abrazo

[Carlos Justino Caballero]

Óscar Distéfano, Destilando lirismo y talento tu poema atrapa! Lleno de imágenes sugerentes y también explícitas me lleva al aplauso, poeta!

[E. R. Aristy]

El poema en la superficie habla del envejecimiento, de la debilidad, del cordon umbilical que nos ata a una matriz en la cual ya no puede vivir el hombre hecho...por otro lado, Chopin, el nocturno artistico, el crepusculo que no solo guarda los secretos de la identidad inmadura, pero el secreto del hombre-artista, del hombre atemporal, el secreto de fuerzas nascientes en el poniente de arboles circulares, y son todas estas cosas inefables, transcendentes que nos llevan a amar las hojas otonales, muertas y aun asi, continuando ser poderosos simbolos de vida. Me ha maravillado tu poema, Oscar. Abrazos, ERA

[Antonio Urdiales]

Un poema intimista y vital "Estoy junto a la vida, amo lo vivido, ...", pero donde el almacén de lo vivido se va quedando poco a poco sin espacio, lo que hace que el poeta desnude sin pudor su debilidad pero sin entregar su sable y su bandera "...y cada día saco fuerzas de mis hojas muertas, ...", y todo ello con el nocturno de Chopin de fondo.

Poesía de altura, como era de esperar al abrir tu ventana, Óscar.

Un abrazo.

[Quinteño de Greda]

Amigo Óscar, a medida que iba leyendo, más me gustaba su contenido, tanto que señalo donde alcanzas la explosión ( al menos para mí)

Estoy junto a la vida, amo lo vivido,
cerca de los recuerdos -grandes blanqueadores de mi alma-.
Pero pasaron muchos años,
y a montones recojo escombros de mi empeño,
y se vuelven los árboles más débiles, como mi madre,
aunque la noche sigue tranquila hacia su lecho helado.

Voy cayendo a la tierra como una semilla con alas,
en búsqueda poética de hundirme en surco fértil,
y un temblor de retoño se extiende por mis ramas,
y cada día saco fuerzas de mis hojas muertas,
del crepúsculo -cofre de todos mis secretos-.

Y en una de estas noches de brillantes estrellas
descargará el destino su furia sobre mí.

Un gran abrazo, POETA.

[Óscar Distéfano]

Muy sugerentes reflexiones ante la música de Chopin, lo mejor sus nocturnos, sin dudas, a mí me suscita muchos recuerdos. El poema me ha parecido maravilloso, todo un recorrido nostálgico que se lee de corrido. Me ha gustado mucho, Oscar.

Un abrazo.

Carmen

Es cierto, amiga, la música y las circunstancias hacen que podamos vislumbrar realidades que duelen. Te agradezco tu amable comentario.

Un abrazo grande.
Óscar

[Nésthor Olalla]

La extrema pobreza de ser y saberse apenas una mueca sosteinida a duras penas
en una nota de tiempo que se hace del todo noche, rasa, veraz, carcomiente.


Espléndida extracción a cuerpo abierto.

Seguimos.

[Ana Muela Sopeña]

Reflexiones de altura en tu poema, Óscar.

Mediante este momento íntimo que nos compartes, con la música de Chopin de fondo, nos hablas de muchas cosas. La necesidad de trascendencia, de ser poeta más allá de lo personal y devenir universal.

Me ha gustado mucho la profundidad de tu poema.

Enhorabuena
Abrazos, amigo poeta
Ana

[Hallie Hernández Alfaro]

Un enorme trabajo, Óscar. Tu poesía brilla muy alto; en esos versos la vida se refleja y se intimida desde todas sus refracciones. Celebro tu inspiración y dejo todos los aplausos, si señor.

Abrazos con afecto, amigo.