Pre-menstrual (EB)

[Hallie Hernández Alfaro]

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He sido en tu mano desde ayer.
Ahora el espejo se abre como en la historia de Alicia
y habito las fronteras de tu camiseta blanca.
El incontrolable palpitar de mis glándulas
desboca las voluntades de tu nombre;
ya lo amaba, ya silbaba su cadencia en los diluvios de juventud.
Siento que tengo el cielo entre mis dedos
que hasta puedo cargarme los temores de Noé.

En el parque,
la luz obligaba a centrar los minutos en la teoría del condicional:
si las calles estrechas pudieran empujarme a tu vida,
si alguna noche el insomnio alcanzara para deshabitar la tristeza,
si los ojos perdieran su locura por mirarte,
si encontrara un soplo de sentido en tantos carros de fuego.

Conspiran para vivir.
Hadas febriles a cuestas del placer
se relamen la sal de tus besos ahogados,
veneran el azul genotípico del instante y el jamás;
hospedan cláxones mudos, sueñan el verso de Dos.


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[Víctor F. Mallada]

Muy bonito, Hallie.

Entre expectativas y esperanza dejas un reguero de imágenes para enmarcar.

Me llevo el rosco, que aquí no pega.

Un abrazo, poeta.

Víctor

[Antonio Urdiales]

A mi me parece un poema de una belleza sensual sumamente atractiva, con unos flashes de imágenes sensacionales, que son como ventanas abiertas al deleite.

Enhorabuena.

Un abrazo.

[Rafel Calle]

He sido en tu mano desde ayer.
Ahora el espejo se abre como en la historia de Alicia
y habito las fronteras de tu camiseta blanca.
El incontrolable palpitar de mi glándulas
desboca las voluntades de tu nombre;
ya lo amaba, ya silbaba su cadencia en los diluvios de juventud.
Siento que tengo el cielo entre mis dedos
que hasta puedo cargarme los temores de Noé.

En el parque,
la luz obligaba a centrar los minutos en la teoría del condicional:
si las calles estrechas pudieran empujarme a tu vida,
si alguna noche el insomnio alcanzara para deshabitar la tristeza,
si los ojos perdieran su locura por mirarte,
si encontrara un soplo de sentido en tantos carros de fuego.

Conspiran para vivir.
Hadas febriles a cuestas del placer
se relamen la sal de tus besos ahogados,
veneran el azul genotípico del instante y el jamás;
hospedan cláxones mudos, sueñan el verso de Dos.
........................................................................................................
Muy bello poema, amiga Hallie, al amparo de un erotismo en la unidad del espíritu y no tiene por qué ser santo. Consigues momentos muy evocadores, hálitos virtualmente erógenos en la invocación de amarse sobre todas las realidades inhóspitas con el pálpito dual, contumaces.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un fuerte abrazo.

[Ramón Carballal]

Magnífico, Hallie. Tu poesía es única. Abrazos.

[Carlos Justino Caballero]

Hallie Hernández Alfaro, Espléndido poema con ese toque de sobrio erotismo que lo hace brillar. Mi afectuoso saludo, Hallie.

[Roberto López]

[quote="Hallie Hernández Alfaro"].


Cuánta pasión rebosa en estos versos. La vida se desborda y todo lo salpica. Un placer de lectura. Saludos.

[Guillermo Cumar.]

_El verso le da fuerza al deseo y la intención de este
busca abrir las puertas con la llave del amor aunque
el tiempo y el espacio estén en contra.

Disfruté de la imagen y de la ansiedad

un abrazo

[Pilar Morte]

Querida Hallie, tus versos mejoran porque se acercan más al entendimiento del lector. Un poema precioso de un erotismo que atrapa.
Felicidades
Abrazos
Pilar

[Carmen López]

Hallie, es bellísimo. Y el poema va de AMOR, así con mayúsculas de ese Amor que encadena los cuerpos y las almas. El cierre es un lujo, una se dejaría las palmas aplaudiendo y los ojos llorando. Un lujo leerte y un placer. Me ha encantado.

Un abrazo y felicidad.

Carmen

[Hallie Hernández Alfaro]

Muy bonito, Hallie.

Entre expectativas y esperanza dejas un reguero de imágenes para enmarcar.

Me llevo el rosco, que aquí no pega.

Un abrazo, poeta.

Víctor

Víctor te agradezco muchísimo tu huella más que generosa en mis humildes versos.

Un gran abrazo, poeta.

[Hallie Hernández Alfaro]

A mi me parece un poema de una belleza sensual sumamente atractiva, con unos flashes de imágenes sensacionales, que son como ventanas abiertas al deleite.

Enhorabuena.

Un abrazo.

Antonio, me alegra mucho tu impresión generosísima del poemilla. Gracias miles por tu sensibilidad y lectura.

Salud y felicidad.

[Hallie Hernández Alfaro]

He sido en tu mano desde ayer.
Ahora el espejo se abre como en la historia de Alicia
y habito las fronteras de tu camiseta blanca.
El incontrolable palpitar de mi glándulas
desboca las voluntades de tu nombre;
ya lo amaba, ya silbaba su cadencia en los diluvios de juventud.
Siento que tengo el cielo entre mis dedos
que hasta puedo cargarme los temores de Noé.

En el parque,
la luz obligaba a centrar los minutos en la teoría del condicional:
si las calles estrechas pudieran empujarme a tu vida,
si alguna noche el insomnio alcanzara para deshabitar la tristeza,
si los ojos perdieran su locura por mirarte,
si encontrara un soplo de sentido en tantos carros de fuego.

Conspiran para vivir.
Hadas febriles a cuestas del placer
se relamen la sal de tus besos ahogados,
veneran el azul genotípico del instante y el jamás;
hospedan cláxones mudos, sueñan el verso de Dos.
........................................................................................................
Muy bello poema, amiga Hallie, al amparo de un erotismo en la unidad del espíritu y no tiene por qué ser santo. Consigues momentos muy evocadores, hálitos virtualmente erógenos en la invocación de amarse sobre todas las realidades inhóspitas con el pálpito dual, contumaces.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un fuerte abrazo.

Querido amigo, muchas gracias por dejarme tu reflejo positivo y altamente poético.

Abrazos fuertes.

[Hallie Hernández Alfaro]

Magnífico, Hallie. Tu poesía es única. Abrazos.

Mil gracias por la valiosísima compañía, Ramón.

Abrazos.

[Gabriel Vidal]

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He sido en tu mano desde ayer.
Ahora el espejo se abre como en la historia de Alicia
y habito las fronteras de tu camiseta blanca.
El incontrolable palpitar de mi glándulas
desboca las voluntades de tu nombre;
ya lo amaba, ya silbaba su cadencia en los diluvios de juventud.
Siento que tengo el cielo entre mis dedos
que hasta puedo cargarme los temores de Noé.

En el parque,
la luz obligaba a centrar los minutos en la teoría del condicional:
si las calles estrechas pudieran empujarme a tu vida,
si alguna noche el insomnio alcanzara para deshabitar la tristeza,
si los ojos perdieran su locura por mirarte,
si encontrara un soplo de sentido en tantos carros de fuego.

Conspiran para vivir.
Hadas febriles a cuestas del placer
se relamen la sal de tus besos ahogados,
veneran el azul genotípico del instante y el jamás;
hospedan cláxones mudos, sueñan el verso de Dos.

Que hermoso poema Un beso.Gabriel

en completa posesión del ayer
del desandar de los sueños
crea el inaudito semblante
de esta hora injerta, insípida,
sin sueños.