Un hombre solo

[Ana Muela Sopeña]

Un hombre solo
atraviesa las calles del temor,
para consagrarse al horizonte.

Consigue ser de fuego
e incendiar
la nostalgia con sus ojos
que respiran la luz en las pupilas.

Se duerme con el agua
en la melancolía de las horas.

Abraza pensamientos de lujuria
para no estar sin tierra.
Necesita enraízar su propio cuerpo
en el cuerpo de Gaia
a través de mujeres,
en la anomia perfecta, arcaica y lúdica.

Un hombre solo
se conecta al radar de la lascivia
para que las matrices de lo fértil
lo lleven por la senda creadora,
más allá de la herida.

Un hombre solo
transmuta los instintos en pasión,
se sumerge en cavernas
de creación continua.

Se transforma en artista,
más allá de lo ínfimo
que quiere reclutarlo como una subespecie,
y desliza su centro de energía
al corazón del mundo
que es su propio corazón.


Ana Muela Sopeña

[Pilar Morte]

Un hombre solo busca dejar su soledad, de ahí nacen estos hermosos versos. Al menos así lo veo
Abrazos
Pilar

[Antonietta Valentina]

Un poema magnífico Ana, un hombre solo en manos de tu pluma, lo tiene todo para definirse y concretarse. Me encantó tu poema.Un abrazo.

[Rafael Valdemar]

Ana creoq ue un hombre solo no es nada; bueno sí, él y sus circunstancias. buen poema con profundo mensaje que disfruté leyendo

saludos

rafael

[Concha Vidal]

Y tú, mujer entera, consigues sacar del hombre sólo un poema con la fuerza de éste.

Un enorme abrazo para tí, Ana.

[Ramón Ataz]

Tienes mano maestra para indagar en los atavismos del ser humano, en la comunión del hombre y la mujer con la tierra, y este poema es muy, muy sugerente. Además con ese dominio del ritmo y de la métrica que te caracteriza...

Una sinfonía en forma de poema.


Abrazos.

[Josefa A. Sánchez]

Un placer seguir el viaje de este hombre solo en su búsqueda. Un poema verdaderamente sugerente.
Un abrazo.
Pepa

[lazaro Habana]

Un hombre solo
atraviesa las calles del temor,
para consagrarse al horizonte.

Consigue ser de fuego
e incendiar
la nostalgia con sus ojos
que respiran la luz en las pupilas.

Se duerme con el agua
en la melancolía de las horas.

Abraza pensamientos de lujuria
para no estar sin tierra.
Necesita enraízar su propio cuerpo
en el cuerpo de Gaia
a través de mujeres,
en la anomia perfecta, arcaica y lúdica.

Un hombre solo
se conecta al radar de la lascivia
para que las matrices de lo fértil
lo lleven por la senda creadora,
más allá de la herida.

Un hombre solo
transmuta los instintos en pasión,
se sumerge en cavernas
de creación continua.

Se transforma en artista,
más allá de lo ínfimo
que quiere reclutarlo como una subespecie,
y desliza su centro de energía
al corazón del mundo
que es su propio corazón.


Ana Muela Sopeña

El grado de soledad es lo que existe,
es mucha verdad. Pasamos todo el tiempo buscando
semejanzas que arrastran dolor.
Sentido poema Ana


abrazos.

lázaro

[Marisa Peral]

[quote="Ana Muela Sopeña"]

Un hombre solo
atraviesa las calles del temor,
para consagrarse al horizonte.


Me ha gustado, Ana, rítmico y envolvente, preciso. Un gusto leerte.
Abrazos.

[Gabriel Socías]

Me gustó este poema de soledades masculinas, es bello. Te felicito, Ana.

[E. R. Aristy]

Hay muchos mitos en la solteria. Muchos mitos de lo que busca el hombre y lo que busca la mujer...me parece muy interesante lo que dices de la creatividad y la necesidad de preservacion, dos cosas que parecen a simple vista ser antonimos...si el hombre vuelca en su sexualidad el dese de preservarse y multiplicandose, o si el hombre va hacia su soledad para integrarse cre, Ana que estas son algunas de las sugerencias que suscita tu bello poema.

Abrazos,

ERA

[Nésthor Olalla]

Ana...

Buena indagación en las pulsiones existenciales que conforman y capacitan al ser.

Un gusto leerte, compañera.

[Juan Arrollo]

Me ha gustado mucho tu poema, se disfruta hasta el final. Enhorabuena.

[Abel Sal]

Un hombre solo
atraviesa las calles del temor,
para consagrarse al horizonte.

Consigue ser de fuego
e incendiar
la nostalgia con sus ojos
que respiran la luz en las pupilas.

Se duerme con el agua
en la melancolía de las horas.

Abraza pensamientos de lujuria
para no estar sin tierra.
Necesita enraízar su propio cuerpo
en el cuerpo de Gaia
a través de mujeres,
en la anomia perfecta, arcaica y lúdica.

Un hombre solo
se conecta al radar de la lascivia
para que las matrices de lo fértil
lo lleven por la senda creadora,
más allá de la herida.

Un hombre solo
transmuta los instintos en pasión,
se sumerge en cavernas
de creación continua.

Se transforma en artista,
más allá de lo ínfimo
que quiere reclutarlo como una subespecie,
y desliza su centro de energía
al corazón del mundo
que es su propio corazón.


Ana Muela Sopeña

Un poema naturalmente bello e inevitable. Tal vez, a modo de resumen, estos versos parecen contarlo todo:

"...Un hombre solo
transmuta los instintos en pasión,
se sumerge en cavernas
de creación continua.

Se transforma en artista,
más allá de lo ínfimo
que quiere reclutarlo como una subespecie,
y desliza su centro de energía
al corazón del mundo
que es su propio corazón..."

Un abrazo.
Abel.

[jose junco]

Buena reflexión poética, Ana. Lo leo como el proceso de transmutación al estado creativo. Ese privilegio de la especie.Un beso.Pepe Junco