
Solemos hacer un resumen
en el que nuestros errores
-n
-o
-c
-u
-e
-n
-t
-a
-n
0
y señalamos
-arbitrariamente- los ajenos
como si fuèsemos dioses.
Cambiamos
segùn puntuales conveniencias
y conseguimos
el beneplàcito
de nuestras vìctimas.
Maquinamos
còmo sugerir aquello que deseamos
pareciendo lo contrario.
Somos
predadores
natos
con disfraz de corderos.