CÓMPLICE DE VIENTRE (A mi ombligo)

[Abel Sal]

CÓMPLICE DE VIENTRE (A mi ombligo)


Cuéntame como fue.
Porque eres signo,
que permaneces en mi cuerpo,
tantos años después.
Tanto tiempo digno.

Dime, tú que sigues en mí.
Marca eterna.
Eternamente tierna.
Por concebir,
eres huella de hembra.
Signo de parir.

Como fue que comencé.
Cómo, entre aguas cálidas
de vientre, fue tu aparecer.
Como fue que lograste,
que hoy, sea ser.

Cuéntame como fui.
Si movía mis brazos,
cuando mi madre cantaba.
O si agitaba mis piernas,
cuando sollozaba.

O cuando mi padre,
con palma de mano derecha,
acariciaba el pequeño espacio
de cuerpo, que mi madre
nos prestaba.

Que pasaba por tu ancho.
Que cosas enviaba ella,
a través de tus interiores grasos.
Mientras tanto, yo flotaba
con mi propia sangre,
libre de espanto,
en el pequeño y calido espacio.

Seguirá siendo mía,
tu marca de simiente.
Porque es huella,
de hembra que ha parido,
tenerte.

Porque eres signo,
del pasado y presente.
Y mientras tenga vida,
no cuentes nada,
cómplice de vientre.

[Pilar Morte]

Me gusta tu conversación con el pasado. Un placer seguir estos versos
Abrazos
Pilar

[Abel Sal]

Me gusta tu conversación con el pasado. Un placer seguir estos versos
Abrazos
Pilar

Gracias, estimada Pilar.
Recibí muchos comentarios sobre este pretendido escrito, pero niguno de ellos lo describe como una conversación con el pasado. Creo que tu apreciación es realmente cierta!
Te dejo mi abrazo.
Abel.