Ulises

[Ramón Carballal]

Hijo de la niebla, de la isla sin príncipe,
abecedario de luz y pantomimas.

Yo que en los augurios temí mi muerte.

Yo que tallé la raíz sombría del ardid con yugo y sal.

La guerra-qué guerra si el imperio es mi jardín,
mi niño de alas blancas-exhibe sus trompetas
de llamarada y azul.

Somos el silencio, la furia y el hastío.
Nuestras naves no conocen rumbo
más allá de la náusea.

¿en qué alcoba sus ojos de faro, de pregunta,
de adiós inmortal?

Son oscuras las colinas del invierno (allí en el terror
de las murallas late un oráculo sin ventanas,
un frío de caballos y néctar).

He luchado contra la duda y el perdón,
mis diamantes son hábiles como un panzudo equinoccio.

¿de qué sirve la victoria, adónde la vela que el tímido viento enciende?

El regreso dibuja mil soles en la clepsidra,
un mar con rombos infinitos que giran y se elevan
hacia la barbarie y el horror.

Un viaje con las fronteras rotas, un barco rojo
como un espolón de tinieblas.

¿Sabes, amor, cuántas son las islas del olvido,
a qué dioses el beso o la penumbra?

Duermen las abejas en la simetría de la flor,
nos empuja la audacia de la muerte, es ronca la voz del ojo prohibido,
los rumores de la carne, la cicatriz en el óbito, los cantos,
la ceniza del río en la sal, la ola o su espejismo.

Tiendo las manos y tú me eliges,
sólo ansío un murmullo de paz en el vientre de la araña,
en el saludo imberbe del espejo.

Abrazar las horas como si la luz fuera el eclipse de un sueño,
su sed o su mito.

[Pilar Morte]

Vuelves como Ulises y a mí me sobrecogen algunos versos. Un placer haberme deslizado por el poema
Abrazos
Pilar

[Lila Manrique]

Se desgajan mis manos en hilos de añoranzas...
Y la espera se hace eterna.
Preciosos tus versos Ramón, me encanta el tema.

[Ramón Carballal]

Vuelves como Ulises y a mí me sobrecogen algunos versos. Un placer haberme deslizado por el poema
Abrazos
Pilar

Gracias, Pilar, por leer mi poema y dejarme este amable comentario. Un abrazo.

[Ana Villalobos Carballo]

Me ha gustado muchísimo, Ramón. Por lo que dice Pilar ya has escrito algo más sobre Ulises pero me lo he perdido. Es un poema con versos muy hermosos y como siempre con imágenes muy conseguidas pero lo siento con un estilo diferente a lo que estoy acostumbrada a leerte. Un poema para disfrutarlo.

Un beso que te llegue al corazón

Ana

[Ramón Ataz]

Ramón, qué buen poema. Para mí Ulises es un mito muy especial, y tú lo has clavado con tus versos. Qué nivelazo, en serio. Pero dejo el comentario porque quiero volver a leerlo...


Un abrazo.

[Josefa A. Sánchez]

Un viaje en el que el regreso se hace cada vez mas largo y mas duro. Un placer estos versos que regalas.
Un abrazo.
Pepa

[Ramón Carballal]

Se desgajan mis manos en hilos de añoranzas...
Y la espera se hace eterna.
Preciosos tus versos Ramón, me encanta el tema.

Gracias, Lila, por acercarte a mi ventana y comentar el poema. Un beso.

[Ramón Carballal]

Me ha gustado muchísimo, Ramón. Por lo que dice Pilar ya has escrito algo más sobre Ulises pero me lo he perdido. Es un poema con versos muy hermosos y como siempre con imágenes muy conseguidas pero lo siento con un estilo diferente a lo que estoy acostumbrada a leerte. Un poema para disfrutarlo.

Un beso que te llegue al corazón

Ana

Me gustan los personajes mitológicos y, efectivamente,he escrito algún poema más sobre ese tema. Te agradezco, Ana, el bonito comentario que me dejas. Un beso.

[Nésthor Olalla]

Espléndido, compañero. Veo que sigues en forma.


Un gusto siempre

[Julio Gonzalez Alonso]

Majestuosos versos para reinterpretar el mito de Ulises en clave intimista. Aplausos.
Salud.

[Liz Barrio]

Cantar así, con sonoridad y fina entonación en la poesía, se llama: ARTE.
Te aplaudo señorón poeta.
Besos y mi total admiración,

[J. J. Martínez Ferreiro]

El mito de Ulises es inspiración, manantial de oro, para una muy importante parte de la Literatura Universal, nos inquieta y perturba, la figura de este mito, que tras sufrir todas la experiencias por la que puede pasar una vida, regresa al hogar. Tú aprovechando lo fabuloso de tu imaginería, y como afirma nuestro querido amigo Julio, lo interpretas en clave intimista, en forma de ese viaje a lo más desconocido, pero hacia nosotros mismos, que continuamente reiniciamos en lo más profundo de nuestra experiencia vital.

Unha aperta, querido amigo.

[Antonio Justel]

Hijo de la niebla, de la isla sin príncipe,
abecedario de luz y pantomimas.

Yo que en los augurios temí mi muerte.

Yo que tallé la raíz sombría del ardid con yugo y sal.

La guerra-qué guerra si el imperio es mi jardín,
mi niño de alas blancas-exhibe sus trompetas
de llamarada y azul.

Somos el silencio, la furia y el hastío.
Nuestras naves no conocen rumbo
más allá de la náusea.

¿en qué alcoba sus ojos de faro, de pregunta,
de adiós inmortal?

Son oscuras las colinas del invierno (allí en el terror
de las murallas late un oráculo sin ventanas,
un frío de caballos y néctar).

He luchado contra la duda y el perdón,
mis diamantes son hábiles como un panzudo equinoccio.

¿de qué sirve la victoria, adónde la vela que el tímido viento enciende?

El regreso dibuja mil soles en la clepsidra,
un mar con rombos infinitos que giran y se elevan
hacia la barbarie y el horror.

Un viaje con las fronteras rotas, un barco rojo
como un espolón de tinieblas.

¿Sabes, amor, cuántas son las islas del olvido,
a qué dioses el beso o la penumbra?

Duermen las abejas en la simetría de la flor,
nos empuja la audacia de la muerte, es ronca la voz del ojo prohibido,
los rumores de la carne, la cicatriz en el óbito, los cantos,
la ceniza del río en la sal, la ola o su espejismo.

Tiendo las manos y tú me eliges,
sólo ansío un murmullo de paz en el vientre de la araña,
en el saludo imberbe del espejo.

Abrazar las horas como si la luz fuera el eclipse de un sueño,
su sed o su mito.

... Ulises sienta cátedra: algo tengo por ahí sobre él, algo; tu poema lo extiende y pormenoriza a través de tu estilo personal al uso, extrayendo admirables aspectos nuevos; yo tengo en algún punto de la memoria para Ulises la palabra "astucia"; por tanto seguiremos dándole vueltas a ese regreso a casa; tu aportación es útil y novedosa; saludos, Ramón; Orión

[Ramón Carballal]

Ramón, qué buen poema. Para mí Ulises es un mito muy especial, y tú lo has clavado con tus versos. Qué nivelazo, en serio. Pero dejo el comentario porque quiero volver a leerlo...


Un abrazo.

Gracias, Juan, me alegra que te guste este visión tan personal del mito de Ulises. Un fuerte abrazo.