re: Cuando te digo que soy yo
Publicado: Dom, 10 May 2015 9:51
Enhorabuena, Ricardo, por el reconocimiento a tu poema; realmente es magnífico.
Besos
Pilar
Besos
Pilar
Foro poético-literario, revista y tienda de libros de la Editorial Alaire. Poemas de todo tipo, relatos cortos, ensayos. Debates, discusiones y todo tipo de estudios sobre temas relacionados con el ámbito literario. Convocatorias de concursos de poesía.
https://foro.editorialalaire.es/
Administración Alaire escribió:Enhorabuena, amigo Ricardo, por el reconocimiento como Poema de la Semana a tu obra "Cuando te digo que soy yo".
Un cordial abrazo.
José Manuel F. Febles escribió:No solo debo felicitarte por el gran aporte poético al foro, que ha reconocido con todos los honores el galardón de la semana al mejor poema, sino por el inmenso trabajo que destila la categoría de su autor.
Mis felicitaciones, querido amigo y maestro.
Un cordial abrazo desde mi isla.
José Manuel F. Febles
Mariano García escribió:Ricardo, enhorabuena por el reconocimiento a tu estupendo poema.
Un abrazo.
Ricardo José Lascano escribió:Impecable entrega, como debe decirlo un gran poeta.
Gracias por el arte infinito. Celebro el reconocimiento, estimado Ricardo.
Abrazo sureño
RJL
Luis M. Mariño escribió:Brillante y precioso poema, Ricardo. Merecidísimo reconocimiento.
Mi sincera enhorabuena, amigo. Un abrazo.
Óscar Bartolomé Poy escribió:"Aunque esté lejos, mi soledad no sólo es mía, es nuestra"
Excelente decir el de este verso. También me ha gustado ese "he sido" tan enfático del comienzo, como una reafirmación de la propia existencia. Tan sólo me queda felicitarte por el reconocimiento.
Un abrazo, Ricardo.
Ricardo Serna G escribió:Cuando te digo que soy yo
Soy tu nada, hasta luego,
la culpa, la máscara y el poco tiempo.
Nunca me salvaré; soy niño que duerme,
joven que quiere, viejo sin esperanza.
Pero he sido.
He sido.
Al llegar la luz, llegaron los hilos rotos;
derroche que despierta con nombres de sombras
y una nada que me llama: nunca.
Ay, joven, casi ciego y sordo, vencido
por los torrentes de los dolores, que duerme y despierta
presintiendo el llamado que no llega.
Setenta y tantos años de miradas,
novias que no recibieron las rosas rojas
y hacen padecer su aliento en la puerta entreabierta.
Oh, otra vez, diciembre que se consume.
Hasta luego en la mano debajo de la almohada
respirando sin saber con quién estaba soñando:
en breves amores, besos en el aire, los ojos de nostalgia,
la desolación del silencio,
el brillo de la tristeza y la melancolía revolcada
en novelas de cero audiencia.
Pero lo he pagado, lo he pagado con creces.
No sé de quién es la culpa, sólo el recuerdo,
sin quererlo, de los hombros cargando los nombres
que caían al soltarse con sal, a oscuras,
en la herida que saluda.
Se abrasa el hombre cobarde
sufriendo con la boca llena de tiempo.
Cuando te digo que soy yo, es verdad que te lo digo,
porque la rabia y voz y sufrimiento se viste
con máscara de sangre viva.
Aunque esté lejos, mi soledad no sólo es mía, es nuestra,
con momentos que se apagan suavemente.
Han quedado muchas cosas en el olvido,
y más, quedarán perdidas en el tiempo
que aún no han despertado.
Vivo grito desahuciado , fantasma
injerto de mi cólera, años que amo, a pesar de todo,
y testigo del canto que anudará
el principio del vuelo implacable
que cerrará los ojos de mis palabras.
Pilar Morte escribió:Enhorabuena, Ricardo, por el reconocimiento a tu poema; realmente es magnífico.
Besos
Pilar
Ventura Ramos López escribió:Estimado Ricardo, vuelvo a pasar, para decirte que es una alegría ver tu poema reconocido, mi más profunda enhorabuena, y un fuerte abrazo
E. R. Aristy escribió:Ricardo Serna G escribió:Cuando te digo que soy yo
Soy tu nada, hasta luego,
la culpa, la máscara y el poco tiempo.
Nunca me salvaré; soy niño que duerme,
joven que quiere, viejo sin esperanza.
Pero he sido.
He sido.
Al llegar la luz, llegaron los hilos rotos;
derroche que despierta con nombres de sombras
y una nada que me llama: nunca.
Ay, joven, casi ciego y sordo, vencido
por los torrentes de los dolores, que duerme y despierta
presintiendo el llamado que no llega.
Setenta y tantos años de miradas,
novias que no recibieron las rosas rojas
y hacen padecer su aliento en la puerta entreabierta.
Oh, otra vez, diciembre que se consume.
Hasta luego en la mano debajo de la almohada
respirando sin saber con quién estaba soñando:
en breves amores, besos en el aire, los ojos de nostalgia,
la desolación del silencio,
el brillo de la tristeza y la melancolía revolcada
en novelas de cero audiencia.
Pero lo he pagado, lo he pagado con creces.
No sé de quién es la culpa, sólo el recuerdo,
sin quererlo, de los hombros cargando los nombres
que caían al soltarse con sal, a oscuras,
en la herida que saluda.
Se abrasa el hombre cobarde
sufriendo con la boca llena de tiempo.
Cuando te digo que soy yo, es verdad que te lo digo,
porque la rabia y voz y sufrimiento se viste
con máscara de sangre viva.
Aunque esté lejos, mi soledad no sólo es mía, es nuestra,
con momentos que se apagan suavemente.
Han quedado muchas cosas en el olvido,
y más, quedarán perdidas en el tiempo
que aún no han despertado.
Vivo grito desahuciado , fantasma
injerto de mi cólera, años que amo, a pesar de todo,
y testigo del canto que anudará
el principio del vuelo implacable
que cerrará los ojos de mis palabras.
Maravilloso poema Ricardo, te felicito! E. R. A.
curra anguiano escribió:Enhorabuena amigo, como me alegro de verte en el trono !!!
Mil besos
Curra