Sergio Gómez escribió:carmen iglesia escribió:Al norte de mi sur la vida tiembla
con el párpado abierto por el hambre.
Hay tanto para ver,
tanto horizonte viejo en tus esquinas.
Es el mundo un espejo de esta ruta, el resumen de un mapa que se cierra
delante de una puerta aún quebrada.
Aquí las manos pintan el mar en las paredes
no hay ciudad más azul,
ni avenidas más quietas.
Aquí la edad renuncia a su sonido
para que los relojes se confundan
y vuelva a ser la vida un lugar sin cerrojos,
un surco detenido en la mirada.
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Entran ganas de salir pitando a viajar y encontrarse con ese lugar donde los relojes se confunden y encontrarse con la tranquilidad y la autenticidad. No conozco el sitio pero me lo apunto. Muy bueno todo el poema y, para mí, supremos los versos que subrayo. En ellos está la esencia.
Un abrazo y felicidades por el poema, por encontrar esos lugares y, sobre todo, por saber mirar.
Y que lo digas, Sergio... Yo vine hace unas semanas y ya estoy planeando otra escapada... jajaja... Y bueno, la mirada ya sabes, es tan personal, que no tiene por qué coincidir y hasta es hermoso que no lo haga...
Muchas gracias por venir. Un abrazo,
Carmen