Editorial Alaire

Concha Verónica Vidal escribió:Todo sabía a su nombre, el guiño de la esquina,
el fuelle de las asmas rumiando en arameo al yunque y sus quejidos
el puente sin tablones
- ¡ el último es un tonto ! -
y todos, todos tontos
cayendo en cuentagotas al mar de girasoles.

De río la merienda y juncos los vestidos,
mazorcas por bigotes, mazorcas en axilas
– que somos ya mayores –
y el vello se despunta como tirabuzones ,
mazorcas sin melena
mazorcas a escondidas, asadas... hierbabuena...

Porque todo su nombre era infancia
sombra y cuentos,
balsas a la deriva..

Por ti, mi dulce cerezo ,
que de madurez me alcanzas
y pones tu maquillaje en los surcos de mi cara...
... que aún se sabe tu nombre.





5-2-8


(Afortunadamente, no se borra de mi mente la maravillosa infancia que he tenido, los siete locos hermanos colgando mazorcas de las axilas para ser mayores, subidos a párvulos cerezos, escalando pinos inmensos en ese maravilloso pueblo que nos hizo descubrir otra vida tan distinta a la de niños "bien" de capital ,,, y que tantas multas le costó a mi padre, burros, patos, heno, cementerios abiertos, montañas, ciempeses, caracoles y mil cosas más, a las que agradezco su ayuda para dar un subidón a mi fantasía)

Nésthor Olalla escribió:CONCHA...

Evocando "días azules".


Excelente. Un gusto asomarme a tus letras.


Un abrazo, compañera.

Ramón Carballal escribió:Excelente poema de nostalgia y recuerdos. Una mirada atrás, un recorrido por esos momentos de amor y felicidad que se guardan como tesoros en la memoria. Un abrazo.

Marisa Peral escribió:

Concha Verónica Vidal escribió:
Todo sabía a su nombre,

Porque todo su nombre era infancia sombra y cuentos, balsas a la deriva..

Precioso poema y estos versos, fantásticos.
Un abrazo.

Concha Vidal escribió:Todo sabía a su nombre, el guiño de la esquina,
el fuelle de las asmas rumiando en arameo al yunque y sus quejidos
el puente sin tablones
- ¡ el último es un tonto ! -
y todos, todos tontos
cayendo en cuentagotas al mar de girasoles.

De río la merienda y juncos los vestidos,
mazorcas por bigotes, mazorcas en axilas
– que somos ya mayores –
y el vello se despunta como tirabuzones ,
mazorcas sin melena
mazorcas a escondidas, asadas... hierbabuena...

Porque todo su nombre era infancia
sombra y cuentos,
balsas a la deriva..

Por tí, mi dulce cerezo ,
que de madurez me alcanzas
y pones tu maquillaje en los surcos de mi cara...
... que aún se sabe tu nombre.





5-2-8


(Afortunadamente, no se borra de mi mente la maravillosa infancia que he tenido, los siete locos hermanos colgando mazorcas de las axilas para ser mayores, subidos a párvulos cerezos, escalando pinos inmensos en ese maravilloso pueblo que nos hizo descubrir otra vida tan distinta a la de niños "bien" de capital ,("pijos" nos llamaban.),, y que tantas multas le costó a mi padre, burros, patos, heno, cementerios abiertos, montañas, ciempeses, caracoles y mil cosas más, a las que agradezco su ayuda para dar un subidón a mi fantasía)

Concha Vidal escribió:Todo sabía a su nombre, el guiño de la esquina,
el fuelle de las asmas rumiando en arameo al yunque y sus quejidos
el puente sin tablones
- ¡ el último es un tonto ! -
y todos, todos tontos
cayendo en cuentagotas al mar de girasoles.

De río la merienda y juncos los vestidos,
mazorcas por bigotes, mazorcas en axilas
– que somos ya mayores –
y el vello se despunta como tirabuzones ,
mazorcas sin melena
mazorcas a escondidas, asadas... hierbabuena...

Porque todo su nombre era infancia
sombra y cuentos,
balsas a la deriva..

Por tí, mi dulce cerezo ,
que de madurez me alcanzas
y pones tu maquillaje en los surcos de mi cara...
... que aún se sabe tu nombre.





5-2-8


(Afortunadamente, no se borra de mi mente la maravillosa infancia que he tenido, los siete locos hermanos colgando mazorcas de las axilas para ser mayores, subidos a párvulos cerezos, escalando pinos inmensos en ese maravilloso pueblo que nos hizo descubrir otra vida tan distinta a la de niños "bien" de capital ,("pijos" nos llamaban.),, y que tantas multas le costó a mi padre, burros, patos, heno, cementerios abiertos, montañas, ciempeses, caracoles y mil cosas más, a las que agradezco su ayuda para dar un subidón a mi fantasía)

Josefa A. Sánchez escribió:Siempre que entro en tus letras salgo con alguna zarza enganchada en el alma y chispas de sol en los ojos. Gracias por ser poeta y por escribir aquí.
Un abrazo.
Pepa

Isabel Moncayo escribió:Ay Concha, yo que me crié y sigo siendo de pueblo, me llega y llenan esas mazorcas, "panoyas" decimos aquí, y los guindales, y la yerbabuena, todo eso sigue estando tan cerca y tan en mí que he disfrutado enormemente de tu poema.

Un fuerte abrazo