Juanmi Jerónimo escribió:Después de leer tus poemas y algunos comentarios, sobre todo los de Emilio y Ramón, me uno a ellos, pero además digo que una de las cosas que mejor has hecho, aparte de evolucionar tu voz sin perderla, o sea, hacerla más madura, es adaptar cosas (por ejemplo el ritmo) sin que ello perjudique a tu voz. Normalmente, cuando se quiere aplicar el ritmo por obligación , se pierde en muchas cosas. A ti no sólo no te ha pasado ello, sino que has crecido, y de manera bestial. Así, sin paliativos.
No obstante, me sigue faltanto algo después de los relojes miden. ¿Qué miden? Ya sabes que lo cortés no quita lo valiente, y aparece un hueco ahí que, según mi criterio, habría que rellenar.
Un beso grande.
Bueno, tú sabes cómo escribía cuando empecé y cómo el ritmo fue durante mucho tiempo mi asignatura pendiente y en muchos aspectos lo sigue siendo aunque he de reconocer que tenías razón y una vez que se te mete dentro lo difícil es librarte de él. Respecto a mi voz espero no perderla, para bien o para mal, sé al menos cómo no quiero escribir. Sigo pensando, como he pensado siempre, que muchas veces son los propios poetas los culpables de que la poesía sea minoritaria y, a veces, por qué no, también aburrida.
Perdón por tardar tanto en contestarte.
Y feliz año.
Carmen
P.D: es obvio lo que miden los relojes, no? pero, bueno, lo pensaré. Todos los poemas del mundo están inacabados, je.