Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
MarRevuelta escribió:Treinta y Una -mujer- que succiona el esqueleto de la primavera.
Qué imágenes nos dejas en este día de otoño. Me siento terriblemente analfabeta ante tus letras. Un placer que deseo seguir disfrutando. Besos, muchos.
Treinta y una nada más? Ya verás como se queda el esqueleto de la primavera cuando sean cincuenta.Treinta y Una -mujer- que succiona el esqueleto de la primavera.
Fermín Lasarte escribió:Hermoso Hallie. Un dominio magistral del lenguaje, te floreas aquí. Es un poema cerrado, dificil para la interpretación pero un muy original en cuanto a imágenes, ha despertado bellísimas sensaciones dentro de mí.
Este verso es el que más me gusto: ¨Ha sobrevivido una centuria de sangre ajena...¨
Bueno Hallie ha sido un placer, te mando un abrazo grande.
Hallie Hernández Alfaro escribió:Treinta golpes de cereza; y otra más, crucificada en el tálamo de Loyola.
Premonitoria se esconde en los brazos del agosto negro, incauta poluciones líricas, mastica demonios, homologa la savia angélica y el nudillo sepia de los peones vencidos (que no matan al rey de la prudencia, al estertor sinódico de las aguas mansas)
Ha sobrevivido una centuria de sangre ajena, la última danza del escorpión secreto, las palmas cerradas que maceran la faz despótica de los arrullos.
Treinta y Una -mujer- que succiona el esqueleto de la primavera.
Hallie
Muchas gracias, Juan!!! Tus comentarios siempre son fuentes de ánimo y comprensión.juan delgado escribió:Hallie, hace algún tiempo que por culpa del tiempo escaso no visitaba el foro. A mi vuelta, ¡Que alegría! encuentro tu mundo esplendoroso, épico e intimista de siempre. Un abrazo.
Juan Delgado
Aubriel Camila de la Prad escribió:Hallie Hernández Alfaro escribió:Treinta golpes de cereza; y otra más, crucificada en el tálamo de Loyola.
Premonitoria se esconde en los brazos del agosto negro, incauta poluciones líricas, mastica demonios, homologa la savia angélica y el nudillo sepia de los peones vencidos (que no matan al rey de la prudencia, al estertor sinódico de las aguas mansas)
Ha sobrevivido una centuria de sangre ajena, la última danza del escorpión secreto, las palmas cerradas que maceran la faz despótica de los arrullos.
Treinta y Una -mujer- que succiona el esqueleto de la primavera.
Hallie
"Ha sobrevivido una centuria de sangre ajena, la última danza del escorpión secreto, las palmas cerradas que maceran la faz despótica de los arrullos. "
Treinta golpes de cereza y una prosa poética que tiene un vuelo descomunal.
Una belleza, Hallie querida.
Besos y APLAUSOS.
Rafel Calle escribió:Hermoso trabajo, querida amiga Hallie, que encuentro sugerente y con la fuerza habitual que imprimes a tus poemas.
La cereza es mi fruta preferida, textura carnosa, color insaciable, en la virtud sápida que hacer estallar en la boca el gratísimo influjo del que proviene: la primavera.
Ha sido un placer leerte. Felicidades, compañera.
Un fuerte abrazo.
Ernesto Ravelo escribió:Hallie, bello tus versos, y tu estilo
Saludos cordiales
Alonso de Molina escribió:como Rafa, encuentro muy sugerente el texto, te transporta a otra dimensión del cosmos, y tambien las cerezas son mis preferidas, además de parecerme la fruta más erótica.
un fuerte abrazo querida amiga
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Ana Clavero escribió:Treinta y Una -mujer- que succiona el esqueleto de la primavera.
Treinta y una nada más? Ya verás como se queda el esqueleto de la primavera cuando sean cincuenta.
Es un gustazo reencontrarme con tus letras, niña.
Un besazo
