DEDICATORIA PRIMERA
Con avidez de bosque
en ti madrugan días
ceñidos a una urgencia que crece hacia la tierra.
Detrás de todas las verdades, siempre tú.
A Pilar, que me soporta más que nadie.
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DEDICATORIA -2-
No es ausente tu nombre a la mañana
El universo está en los latidos
donde crecen tus cantos y el futuro.
Persiste con empeño en la naturaleza de tus días,
deja fluir la lluvia que inunda tu razón.
A mi hija Ana Devaki que me escucha con paciencia
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DEDICATORIA -3-
Tu casa es esa luz que en tus ojos orienta el objetivo
de una llama que espera su momento.
No esperes a mañana para ser feliz,
permanece a la espera sin quemar tus azules discutiéndole al viento.
No decrezca en tus días la verde flor de la esperanza
porque te besará la vida inflamada de luces.
Me crecen los tambores al escribir tu nombre:
Risi, mi hija mayor
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