Insustanciales cosas de mi mar I

[Sampedro Lobo]

IYo —tengo estos males del yoísmo—sobrevivo al borde de un océanocapaz de devorarme cada célulasi acaso me adentro en sus entrañas,se piensa profanado y no obstantese infecta de colores en el estíoy vive con dulzuras la invasiónde cuerpos extranjeros, pero yo—ya ven que es cierto mi yoísmo— lo asediocada día y le rompo la paz de su epidermisy el undívago latir de sus pulmonesy a veces, en un signo de locuraacudo a su vera por las nochesy le altero la mudez de su gargantacon mi pulso y le rasgo la humedad de sus orillasy le hablo y lo miro y me asombrodel sosiego o de la ira de un diostan hermoso, tan terrible, tan omnímodo.


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[Ramón Carballal]

Interesante poema. Me gusta como planteas esa dualidad yo-océano. Ha sido un placer la lectura. Un saludo.

[Sampedro Lobo]

Buenas tardes, Ramón, mi mar y yo, ya en el Otoño casi absolutamente el uno para el otro.

Gracias por sus amables palabras, compañero.

Un saludo.

[Pilar Morte]

Me encantó ver la atracción tan hermosa que ejerce el mar en tu piel. Ha sido un placer
Abrazos
Pilar

[Sampedro Lobo]

Hola, Pilar, el mar respira unos centenares de metros más allá de mi bosque.

Gracias por sus amables palabras, señora.

Mi afecto.

[Armilo Brotón]

Sampedro,
maravilla de composición.

me gustó mucho la sal, yodismo, que impregnó mi adn ahora sí, más mío.

san armilo b.