.-

[Maximiliano Rodriguez]

**

[Ricardo Serna G]

Maximiliano Rodriguez,

me encantó tu estilo


Arriba con la poesía


Un abrazo fuerte, amigo

[Luna de Nos]

**

Dadme dos nombres, cualesquiera sean,
y os hablaré de la traición.
Os diré del equívoco valor del beso,
y de las habilidades de los troyanos
que, escondidos dentro de sus caballos sigilosos
hechos con la madera sutil de la confianza y el aprecio,
penetran en nuestra más íntima y desguarecida ciudadela,
y allí os señalaré el cénit del dolor.

Mostradme un hombre,
una mujer,
y os descubriré el estigma rosa del engaño.
El veteado amargo de la falsedad
en la mirada esquiva, el quebranto del aire compartido,
el pecado original.

Presentadme
el guión flamante de la inocencia,
la bandera de la amistad más firme
y escribiré en el negro papel del acierto
la fecha, el sabor y la geografía de la derrota.



2009

Es cierto, como tambièn lo es, que hay su opuesto, aunque parezca no haber equilibrio entre ambos.
A veces un nombre, cambia la historia, como un poema, hace volver a pensar en ciertas cosas. Un gusto Maximiliano, saludos, Luna de Nos.-

[Hallie Hernández Alfaro]

Uf qué poemazo!! Es tan cierto lo que expresas de manera irreparablemente hermosa, que sólo queda guardar silencio, deleitarse profundamente y aplaudir con devoción.

Felicitaciones, Max!

Un beso grande también.

Hallie

[Pilar Morte]

Un poema tan hermoso como pesimista, donde un aire de irreparable fracaso asolan los versos.Me gustó leerte
Un abrazo
Pilar

[Javier Cañas Belmar]

**

Dadme dos nombres, cualesquiera sean,
y os hablaré de la traición.
Os diré del equívoco valor del beso,
y de las habilidades de los troyanos
que, escondidos dentro de sus caballos sigilosos
hechos con la madera sutil de la confianza y el aprecio,
penetran en nuestra más íntima y desguarecida ciudadela,
y allí os señalaré el cénit del dolor.

Mostradme un hombre,
una mujer,
y os descubriré el estigma rosa del engaño.
El veteado amargo de la falsedad
en la mirada esquiva, el quebranto del aire compartido,
el pecado original.

Presentadme
el guión flamante de la inocencia,
la bandera de la amistad más firme
y escribiré en el negro papel del acierto
la fecha, el sabor y la geografía de la derrota.



2009

Amor y odio, dos caras de la misma moneda...grato asomarme a tus letras, aun dolorosas, no exentas de una sutil belleza y cierto el transfondo, donde el amor con etiqueta, con precio, deja de ser amor verdadero ¡qué difícil es dar sin esperar nada a cambio!. Saludos y un afectuoso abrazo.

javi

[Maximiliano Rodriguez]

Muchas gracias, estimado Ricardo.


la poesía arriba.

un saludo, Max

[Maximiliano Rodriguez]

Gracias, Luna, por pasar y dejar cobstancia.

Un beso, max

[Aigua Maria]

He querido visitar tus versos y noto la fuerza que transmiten, en realidad, es una de mis atracciones, por eso me decido a felicitarte. Saludos.

[Maximiliano Rodriguez]

Siempre tan amable en tu respuesta, querida Hallie.

Gracias, una vez más, por pasar por mis versos,

Un beso, Max

[José Manuel Sáiz]

Tiene tu poema ese sello de grandeza de los poemas clásicos. Parecen los versos de un guerrero de la pluma que pide el enfrentamiento.
Tu poema transmite fuerza y seguridad y me resulta particularmente atractivo.
Un abrazo.
J. Manuel

[Joan Port]

Grandes versos sin duda, destilan fuerza y verdad, un gusto.

[Maximiliano Rodriguez]

Muy agradecido por tu comentario.

Gracias, Pilar.

Un saludo, Max.

[Marcos de la Mancebía]

Dadme dos nombres, cualesquiera sean,
y os hablaré de la traición.
Os diré del equívoco valor del beso...
y de las habilidades de los troyanos...
...Mostradme un hombre,
una mujer,
y os descubriré el estigma rosa del engaño.
El veteado amargo de la falsedad...

¿Dos nombres?

Judith y Holofernes.

Él perdió la cabeza por ella.

Un abrazo.

Marcos

[MarRevuelta]

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Dadme dos nombres, cualesquiera sean,
y os hablaré de la traición.
Os diré del equívoco valor del beso,
y de las habilidades de los troyanos
que, escondidos dentro de sus caballos sigilosos
hechos con la madera sutil de la confianza y el aprecio,
penetran en nuestra más íntima y desguarecida ciudadela,
y allí os señalaré el cénit del dolor.

Mostradme un hombre,
una mujer,
y os descubriré el estigma rosa del engaño.
El veteado amargo de la falsedad
en la mirada esquiva, el quebranto del aire compartido,
el pecado original.

Presentadme
el guión flamante de la inocencia,
la bandera de la amistad más firme
y escribiré en el negro papel del acierto
la fecha, el sabor y la geografía de la derrota.



2009

Maximiliano, el desengaño se deja ver en tus letras pero es hermoso como lo dices. Me ha encantado leerte esta mañana. Abrazos