La palabra recobrada
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
- Horacio O'Clock
- Mensajes: 63
- Registrado: Sab, 06 Dic 2025 14:00
La palabra recobrada
del obstinado silencio, recobraba su halo
se descubría todo un universo de imágenes,
luces y constelaciones y, aunque también
podía desatarse la oscuridad del nido de serpientes,
del dolor y del abismo, yo me cobijaba alucinado
en la urdimbre que dibujaban los pliegues de su revelación.
Todo era posible, entonces: fascinación, magia apasionada, rito.
Brillaba la esperanza abierta como una flor recién nacida,
como un mes de abril colmado de primavera.
Desterradas la furia, las lágrimas y la muerte a los espinosos
jardines del tártaro, briznas verdes como hebras se anudaban
al mundo, transformándolo en un lugar transparente.
Se bebía el vino de la dicha y se alzaban las copas
para brindar por la estrella de la mañana, el resplandor de la luna
y los colores tornasolados del amanecer y del crepúsculo,
también por todos los nombres, por todos, para que volvieran a estar,
para recobrarlos del vacío desierto de un retrato.
Como un río caudaloso nacía el verso con ropaje de inocencia
sin emboscadas ni ausencias, libre de las maquinaciones del azar
y de los relieves afilados de alimañas, inmune a los terrores
del yermo ultrajante e insidiosamente blanco
y a las amenazas de la desintegración y del olvido eterno.
Y por el paisaje musical de las estrofas, como un tropel festivo
de pájaros, volaban la belleza inalcanzable y el fulgor dorado
de la lírica, la fugacidad de Jorge y la armonía de Garcilaso,
el éxtasis de Santa Teresa y la vitalidad de Lope, el ingenio
de Quevedo y el artificio de Góngora, el intimismo de Bécquer
y la saudade de Rosalía, el compromiso de Miguel y el duende
de Federico, la nostalgia de Machado y el exilio de Cernuda,
la metáfora impactante de Pablo y la desnudez de Juan Ramón,
la visualidad y el mar de Rafael y la pasión y el ardor de León Felipe,
la solemnidad onírica de Olga y el surrealismo de Aleixandre,
el profundo pesimismo de Idea y el silencio y la noche de Alejandra,
la cercanía y sensibilidad de Mario y el simbolismo y la memoria
de Gamoneda, la palabra descarnada y precisa de Valente
y la ironía y el desencanto de Jaime, la antipoesía de Nicanor
y la cotidianeidad de Ángel y el arma cargada de futuro de Gabriel.
- Carmela Viñas
- Mensajes: 1679
- Registrado: Vie, 10 Feb 2023 12:20
Re: La palabra recobrada
Metapoesía de altura y buen hacer, Horacio.
Bellísimo poema que muestra la viva llama de la memoria literaria,del legado indiscutible de quienes nos forman y acompañan. Ellos, los pioneros de saber poético, buscando la belleza. Tú también la iluminas.
Enhorabuena por tu obra. Un placer enorme leerte.
Abrazos y Feliz 2026.
Recinto de las divinidades
en el vestir de la metáfora.
Encaje de su magnificencia.
https://filan2.blogspot.com/?m=1
-
Pilar Morte
- Mensajes: 30867
- Registrado: Mié, 09 Abr 2008 10:21
Re: La palabra recobrada
que recibe el lector en plenitud poética.
Un disfrute leerte. Felicidades.
Un abrazo grande y Feliz Año Nuevo
- Concha Vidal
- Mensajes: 6067
- Registrado: Vie, 30 Nov 2007 14:34
Re: La palabra recobrada
-----------------------------------Horacio O'Clock escribió: ↑Sab, 27 Dic 2025 11:53 Cuando la palabra, abandonando los dominios
del obstinado silencio, recobraba su halo
se descubría todo un universo de imágenes,
luces y constelaciones y, aunque también
podía desatarse la oscuridad del nido de serpientes,
del dolor y del abismo, yo me cobijaba alucinado
en la urdimbre que dibujaban los pliegues de su revelación.
Todo era posible, entonces: fascinación, magia apasionada, rito.
Brillaba la esperanza abierta como una flor recién nacida,
como un mes de abril colmado de primavera.
Desterradas la furia, las lágrimas y la muerte a los espinosos
jardines del tártaro, briznas verdes como hebras se anudaban
al mundo, transformándolo en un lugar transparente.
Se bebía el vino de la dicha y se alzaban las copas
para brindar por la estrella de la mañana, el resplandor de la luna
y los colores tornasolados del amanecer y del crepúsculo,
también por todos los nombres, por todos, para que volvieran a estar,
para recobrarlos del vacío desierto de un retrato.
Como un río caudaloso nacía el verso con ropaje de inocencia
sin emboscadas ni ausencias, libre de las maquinaciones del azar
y de los relieves afilados de alimañas, inmune a los terrores
del yermo ultrajante e insidiosamente blanco
y a las amenazas de la desintegración y del olvido eterno.
Y por el paisaje musical de las estrofas, como un tropel festivo
de pájaros, volaban la belleza inalcanzable y el fulgor dorado
de la lírica, la fugacidad de Jorge y la armonía de Garcilaso,
el éxtasis de Santa Teresa y la vitalidad de Lope, el ingenio
de Quevedo y el artificio de Góngora, el intimismo de Bécquer
y la saudade de Rosalía, el compromiso de Miguel y el duende
de Federico, la nostalgia de Machado y el exilio de Cernuda,
la metáfora impactante de Pablo y la desnudez de Juan Ramón,
la visualidad y el mar de Rafael y la pasión y el ardor de León Felipe,
la solemnidad onírica de Olga y el surrealismo de Aleixandre,
el profundo pesimismo de Idea y el silencio y la noche de Alejandra,
la cercanía y sensibilidad de Mario y el simbolismo y la memoria
de Gamoneda, la palabra descarnada y precisa de Valente
y la ironía y el desencanto de Jaime, la antipoesía de Nicanor
y la cotidianeidad de Ángel y el arma cargada de futuro de Gabriel.
Qué maravilla de "recobramiento" de la palabra, del intelecto, de la ternura, de la inocencia, del poema y el antipoema, las metáforas, las preciosas y precisas imágenes que plasmas me hacen infiltrarme en ellas, vivir en Cernuda, en Otero, y aunque4 no la nombres porque sería imposible nombrar a todos, a mi adorada Gloria Fuertes.
Un fuerte abrazo mediterráneo y gracias por compartir.