Viajando por los túneles de la historia

[Raul Muñoz]

I

REHENES DE MEMORIAS

Viajan en los vagones tal zombis sin espacio.
Escapan del presente, perdidos en pantallas,
con los emoticonos que anestesian el alma
y fabrican personas, haciendo los apaños.

Rehenes de memorias. En el metro, “marcianos”
que oyen con atención los audios de whatsApp
y no se reconocen; cargan de soledad
el teléfono móvil y la SIM de prepago.

Polimorfos actores, esclavos de costumbres,
que están para servir. Por ser tan ambiciosos,
se les fue de las manos la propia ciencia técnica.

Creyéndose los dueños del tiempo, en una Nube,
de la red solo obtienen el pudin irrisorio;
deshechos del pasado que aprisionan conciencias.


II

APAGO EL MÓVIL

Yo quisiera esta tarde regalarte un poema,
pero mi voz, quebrada, no sabe regresar
por la dorada espuma de tiernas emociones.
Apago el móvil, pienso - ¿qué hago aquí tan solo? -

Decido abrir el libro del entrañable autor:
Martí i Pol, obrero, cantor de los humildes
en sus letras sencillas. El punto de lectura
sigue aquí, es la rosa que contigo comparto.

Contigo me descubro viajero por el metro.
Y amo un silencio antiguo, levemente sonoro,
por el aire romántico de eterna juventud.

En la próxima bajo - ¡qué fugaces los túneles! -
Te dejo mi amistad, y la voz melancólica
que refiere a lecturas necesarias hoy día.

[Alejandro Costa]

Veo como un choque entre la realidad más pura y la actual, tan electrónica y adictiva.

Pero es lo que hay, querido compañero, no hay más.

Pero seguiremos con lo clásico y seguiremos creando sueños y leyendo sueños.

Buenos alejandrinos.

Lo mando a volar.

Un abrazo.

[Alberto León]

I

REHENES DE MEMORIAS

Viajan en los vagones tal zombis sin espacio.
Escapan del presente, perdidos en pantallas,
con los emoticonos que anestesian el alma
y fabrican personas, haciendo los apaños.

Rehenes de memorias. En el metro, “marcianos”
que oyen con atención los audios de whatsApp
y no se reconocen; cargan de soledad
el teléfono móvil y la SIM de prepago.

Polimorfos actores, esclavos de costumbres,
que están para servir. Por ser tan ambiciosos,
se les fue de las manos la propia ciencia técnica.

Creyéndose los dueños del tiempo, en una Nube,
de la red solo obtienen el pudin irrisorio;
deshechos del pasado que aprisionan conciencias.


II

APAGO EL MÓVIL

Yo quisiera esta tarde regalarte un poema,
pero mi voz, quebrada, no sabe regresar
por la dorada espuma de tiernas emociones.
Apago el móvil, pienso - ¿qué hago aquí tan solo? -

Decido abrir el libro del entrañable autor:
Martí i Pol, obrero, cantor de los humildes
en sus letras sencillas. El punto de lectura
sigue aquí, es la rosa que contigo comparto.

Contigo me descubro viajero por el metro.
Y amo un silencio antiguo, levemente sonoro,
por el aire romántico de eterna juventud.

En la próxima bajo - ¡qué fugaces los túneles! -
Te dejo mi amistad, y la voz melancólica
que refiere a lecturas necesarias hoy día.

Poeta, Raul:

Estoy verdaderamente encantado con tus sonetos. En ellos abordas la misma temática en la que he estado trabajando en estos últimos meses. Es una de esas felices coincidencias que no se dan a menudo.

Veo con agrado como a través de la poesía otros poetas también reflexionan sobre el impacto de la tecnología en nuestra vida.

Considero que es un gran acierto usar una forma clásica de la poesía para tratar un asunto tan contemporáneo. De esa forma se establece un contraste entre lo tradicional y lo moderno, lo sólido y lo líquido, lo permanente y lo fugaz.

Ojalá sigas trabajando en esta misma línea y podamos compartir perspectivas.

¡Un fuerte abrazo!

[Ulises C.J.]

Preciosos sonetos Raúl.
Al final hay un reflejo en la pantalla de un mundo real que tenemos detrás y que nos hace sentir, que este mundo tan virtual que hemos creado, es solo soledad-.
Abrazos.

[Pilar Morte]

Me gustaron tus sonetos , el mensaje que transmiten. Un placer leerte.
Abrazos y salud

[Ana Muela Sopeña]

Fabulosos sonetos, Raul:

Has hecho un contraste perfecto entre los viajes en metro de ahora y los viajes en metro o en tren de cercanías de hace 30, 40, 50 años.

Aplausos
Un beso
Ana

[Marisa Peral]

Qué buen poema, Raúl, qué diferentes son los trayectos en transporte público de antes a los de ahora.
Nos hemos hecho adictos y dependientes de la tecnología y es un drama que no haya wifi o que se agote la batería. Es el precio de la modernidad.
Lo has contado con mucho arte y te felicito.

Un abrazo.