Cuentos de hadas

[Marisa Peral]

Bello y mágico, revela tu espíritu diáfano... Refrescante leerte.

Un abrazo,

Gracias por tus palabras, Prisca, un placer tu visita.
Abrazos

[Marisa Peral]

Marisa, el poema es bellísimo, ha sido un acierto, un placer, un mágico encuentro con tu poesía.

Un abrazo grande.

Carmen

Los cuentos de hadas siempre nos atraen, muchas gracias Carmen.
Otro abrazo para tí.

[Marisa Peral]

Todos los comentarios llevan la palabra mágico, y es que lo es. Un placer seguir tus letras
Besos
Pilar

Es que en los cuentos de hadas la magia es imprescindible, eso no quiere decir que este poema lo sea
Gracias siempre por tu fidelidad, Pilar.
Un beso.

[Marisa Peral]

Todo un bosque mágico...
Felicidades Marisa.

Un abrazo.
Ignacio

Después de 10 años rebusco y encuentro tu comentario sin enviar mi agradecimiento.
Mil gracias hoy por tu presencia, Ignacio.
Un abrazo.

[Marisa Peral]

Los caprichos de las hadas te i spiraron y sin rendirte a ellas
vinieron a señalar los caminos cerrados de los sueños.

Un placer leerte y enviarte un abrazo

Yo te envío otro abrazo enorme, Guillermo, tan tarde que no sé ni dónde estás.
Muchas gracias y un beso.

[Marisa Peral]

Rescatando antigüedades.

Cuentos de hadas

I

Mágicos vértices extraen sonidos
de violines sin cuerdas.
Que la noche te acune, dragón fiero,
que la alquimia de miles de astros
cubra a los príncipes amantes
y que el sueño o quimera sea desliz,
las hadas se encargarán de mecer su cuna.

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II

Sobre tu espalda
reposan las hadas
mientras escuchan cuentos
de ángeles.
¡Qué será de tu vida sin poesía!
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III

Me besarán sus dedos
sin mirar anatomías,
atlas de manos lisas
-irreversibles-
……………………………………………………………….

IV

Siglos de ojos norte
me conducen a tu rostro
lejos de mi alcance.
Una vez más
hallaré el camino a casa
en la sombra de una estrella.

¡No sueñes!

¡Hoy no ha salido el sol!
………………………………………………………..

V

Entre mis alas
se descubren los crímenes
-perfectos-
que esconden las hadas.
Hay que abrasar el hielo
para surcar el camino
o encontrar mi cuerpo.

………………………………………………………….

VI

Ni varios siglos
ni millones de años luz
congelarán
mi nombre
en la distancia.

Pero el sol
congela sueños
y se apaga.
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©MAR - 2006

[F. Enrique]

Gracias por rescatar esta magia del baúl de los recuerdos.
Se nota que es de otra etapa, pero también que hay aquí una voz muy reconocible: tuya. Una voz que mezcla ternura, escisión, mito y herida. Y que usa las imágenes como si trazara constelaciones con los dedos, es como un pequeño libro de miniaturas líricas, donde cada fragmento respira su propio aire, pero todos comparten un mismo clima: la poesía como refugio, pero también como amenaza.

Un abrazo