La grieta

[Alejandro Costa]

Una grieta puede ser un paraíso.

Estoy denostado por el desencanto traicionero de la vida,
buscar soluciones ya no está en mi poder,
asignar páginas donde escribir mi desahogo es inútil,
y tratar de sanar las heridas, es algo terrible e ineficaz.

Allá ya no se esconden, ni la piel tersa, ni la mente lúcida,
y es en este momento,
sumido en el atroz desengaño de una existencia errática,
cuando decido, que, sentado en la oscuridad,
un simple rayo de luz delicado y prudente
alimenta este cuerpo destinado a abandonar el alma en breve,
y a esta mente, que perdió la lucidez jugando la última partida.

Puede parecer débil,
carcomida y triste,
pero la grieta de este viejo bastidor de ventana
invita día a día, a un simple rayo de luz.

Es mi paraíso particular.

[Marisa Peral]

Enorme este poema, Alejandro, me llevo el cero con la alegría de ver esa grieta por la que entra la esperanza.

Felicidades y besos.

[Ana Muela Sopeña]

Un poema confesional triste y desolado, Alejandro:

Sin embargo hay un atisbo de esperanza...

Gracias por compartir
Un beso grande
Ana

[Alejandro Costa]

Enorme este poema, Alejandro, me llevo el cero con la alegría de ver esa grieta por la que entra la esperanza.

Felicidades y besos.

Infinitas gracias, Marisa.

Me encanta que te gustase.

Un beso.

[Concha Vidal]

Jandro, fascinante este poema, sin duda, y mira que has publicado, es el mejor de todos. Es que me he visto esperando el amanecer a través de la grieta y he visto toda la vida filtrarse por ella.
Una pasada de poema.
Abrazos enormes de mar compartido.

[Rafael Elias Huerta]

Una grieta puede ser un paraíso.

Estoy denostado por el desencanto traicionero de la vida,
buscar soluciones ya no está en mi poder,
asignar páginas donde escribir mi desahogo es inútil,
y tratar de sanar las heridas, es algo terrible e ineficaz.

Allá ya no se esconden, ni la piel tersa, ni la mente lúcida,
y es en este momento,
sumido en el atroz desengaño de una existencia errática,
cuando decido, que, sentado en la oscuridad,
un simple rayo de luz delicado y prudente
alimenta este cuerpo destinado a abandonar el alma en breve,
y a esta mente, que perdió la lucidez jugando la última partida.

Puede parecer débil,
carcomida y triste,
pero la grieta de este viejo bastidor de ventana
invita día a día, a un simple rayo de luz.

Es mi paraíso particular.

Un poema triste e impotencia en su discurrir, pero en tus letras logras amortiguar la pesadumbre con la lucidez de las mismas.

Excelente poema

Que tengas una feliz tarde
Un abrazo
Siempre, Rafael.

[Alejandro Costa]

Un poema confesional triste y desolado, Alejandro:

Sin embargo hay un atisbo de esperanza...

Gracias por compartir
Un beso grande
Ana

Gracias, querida Ana.

Ojalá todas las tristezas tuvieran un halo de esperanza.

Por desgracia no es así.

Un beso.

[Ramón Carballal]

Tristes versos y sin embargo la esperanza late en ese rayo de luz que se cuela por una grieta. Conmovedor poema que me ha llegado profundo. Felicidades y un fuerte abrazo.

[Alonso Vicent]

Excelente poema que encuentra y comparte esa grieta que es una puerta de entrada y de salida al exterior y al interior de uno mismo.
En ocasiones demasiada luz deslumbra, pero esta grieta poema deja pasar la justa y necesaria para sentirse a gusto. Bello rincón para expresarse.
Un abrazo, Alejandro, y feliz domingo.

[Ara López]

Qué maravilla de poema.

"Y tratar de sanar las heridas, es algo terrible e ineficaz."

"y es en este momento,
sumido en el atroz desengaño de una existencia errática,"

Yo pintada.

Aunque eso versos me encantaron, el poema en su conjunto es genial.

Un abrazo.

[Ignacio Mincholed]

Sin duda, Alejandro, mantener la invitación es relevante. Bien dicho.

Un abrazo.
Ignacio

[Alejandro Costa]

Jandro, fascinante este poema, sin duda, y mira que has publicado, es el mejor de todos. Es que me he visto esperando el amanecer a través de la grieta y he visto toda la vida filtrarse por ella.
Una pasada de poema.
Abrazos enormes de mar compartido.

Ves, Conchita, los años y la madurez te aportan esa paz, ese sosiego, que la vida, con su fuerza, y el cuerpo, con su energía, no te dan.

Ahora soy más pausado, no sé si mejor o peor escritor, pero lo hago con más y más corazón.

Eres un encanto.

Millones de besos.

[Alejandro Costa]

Una grieta puede ser un paraíso.

Estoy denostado por el desencanto traicionero de la vida,
buscar soluciones ya no está en mi poder,
asignar páginas donde escribir mi desahogo es inútil,
y tratar de sanar las heridas, es algo terrible e ineficaz.

Allá ya no se esconden, ni la piel tersa, ni la mente lúcida,
y es en este momento,
sumido en el atroz desengaño de una existencia errática,
cuando decido, que, sentado en la oscuridad,
un simple rayo de luz delicado y prudente
alimenta este cuerpo destinado a abandonar el alma en breve,
y a esta mente, que perdió la lucidez jugando la última partida.

Puede parecer débil,
carcomida y triste,
pero la grieta de este viejo bastidor de ventana
invita día a día, a un simple rayo de luz.

Es mi paraíso particular.

Un poema triste e impotencia en su discurrir, pero en tus letras logras amortiguar la pesadumbre con la lucidez de las mismas.

Excelente poema

Que tengas una feliz tarde
Un abrazo
Siempre, Rafael.

Gracias compañero.

Celebro que te gustara.

Un abrazo.

[J. J. Martínez Ferreiro]

"Puede parecer débil,
carcomida y triste,
pero la grieta de este viejo bastidor de ventana
invita día a día, a un simple rayo de luz"

Un poema rabiosamente honesto y valiente.

Todo un placer de lectura, amigo Alejandro.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

Tristes versos y sin embargo la esperanza late en ese rayo de luz que se cuela por una grieta. Conmovedor poema que me ha llegado profundo. Felicidades y un fuerte abrazo.

Gracias, Ramón.

Siempre es un lujo tenerte en mis letras.

Un abrazo.