Desierto

[Alejandro Costa]

Es infinito el lagar del desierto.

Las dunas se rizan con elegancia
al paso de los vientos reanimadores,
de los espejismos atesorados
por un sol relajado en el horizonte,
distinguidamente tirano y demoledor.

Las rocas se funden en ofrenda salvaje
bajo la mirada profunda de un suricata perdido,
un oasis en tétrica descomposición
y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino.

Al caer la noche,
todo se multiplica en antítesis al día,
el viento chilla, la temperatura desnuda su poder,
todo ahora parece nada,
y en la nada se esconde el todo más cruel.

Un diminuto grano de arena
ostenta el poder que le otorga la inmensidad,
lo mínimo se convierte en gigantesco,
lo gigantesco es descomunal,
más lo descomunal es demasiado pequeño
cuando se encuentra solo.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

[Armilo Brotón]

Es infinito el lagar del desierto.

Me encanta esta metáfora de inicio, muy sugerente y rica en matices, fermenta nuestro espíritu a través de la soledad y el silencio.

Mi querido Jandro, acabo de disfrutar de los versos de un poema simbólico de Ramón Carballal sobre el impacto de elementos y espacios naturales en la sensibilidad del poeta, sirviéndole ello de excusa para la reflexión a través de bellas imágenes y metáforas, que llevan a la palabra un poco más allá del aparente y cabal significado.
Encuentro esta hermosa algoría y no gana uno para emociones hoy.

Vuelvo a entrar en una introspección, travesía siempre incierta, por lo personal, del símbolo. El poema "Desierto" explora las paradojas inherentes a su entorno como una metáfora para reflexionar sobre la soledad, el poder supremo y la insignificancia.
¡Guau, qué gran acierto literario para darme a conocer un poco más de tu yo poético! Porque no has dejado de ser mi querido poeta en ningún momento; con ese tono melancólico, "perdido", "tétrico", "nada", "solitario" y "lejano"; resignado, "Nada" y "Todo ahora parece nada","Lo descomunal es demasiado pequeño cuando se encuentra solo","La lucha en solitario"; trágico a veces con el campo semántico "Tiránico" ,"Demoledor","Tétrico", "Descomposición","Lúgubre","Aires de asesino". Expresiones que pintan nuestra vida como un lugar oscuro y amenazante, cargado con una atmósfera de peligro y fatalidad. Todo ello es parte de tu firma poética.

Estimado amigo, logras capturar la complejidad y la belleza del entorno desértico para aplicarlo al pensamiento. El ritmo es pausado y reflexivo, lo que permite que cada imagen, cada metáfora, ocupe su silla pertinente en este banquete, en esta fiesta que me has regalado.

Feliz día y mucha salud

[Pascual Pérez]

Es infinito el lagar del desierto.

Las dunas se rizan con elegancia
al paso de los vientos reanimadores,
de los espejismos atesorados
por un sol relajado en el horizonte,
distinguidamente tirano y demoledor.

Las rocas se funden en ofrenda salvaje
bajo la mirada profunda de un suricata perdido,
un oasis en tétrica descomposición
y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino.

Al caer la noche,
todo se multiplica en antítesis al día,
el viento chilla, la temperatura desnuda su poder,
todo ahora parece nada,
y en la nada se esconde el todo más cruel.

Un diminuto grano de arena
ostenta el poder que le otorga la inmensidad,
lo mínimo se convierte en gigantesco,
lo gigantesco es descomunal,
más lo descomunal es demasiado pequeño
cuando se encuentra solo.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

Toda la vida transcurre en un desierto, con algunos espejismos verdes que nos engañan y obnubilan. Enhorabuena por este bello y clarividente poema, amigo Alejandro.

[xaime oroza carballo]

Es infinito el lagar del desierto.

Las dunas se rizan con elegancia
al paso de los vientos reanimadores,
de los espejismos atesorados
por un sol relajado en el horizonte,
distinguidamente tirano y demoledor.

Las rocas se funden en ofrenda salvaje
bajo la mirada profunda de un suricata perdido,
un oasis en tétrica descomposición
y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino.

Al caer la noche,
todo se multiplica en antítesis al día,
el viento chilla, la temperatura desnuda su poder,
todo ahora parece nada,
y en la nada se esconde el todo más cruel.

Un diminuto grano de arena
ostenta el poder que le otorga la inmensidad,
lo mínimo se convierte en gigantesco,
lo gigantesco es descomunal,
más lo descomunal es demasiado pequeño
cuando se encuentra solo.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

"... y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino." "La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano."
Me he permitido destacar los versos anteriores que para mi suponen la brega por el infinito de más allá del mar. Como afán de esperanza para nuestro susurro de viento.
Gracias por el canto, compañero.

Saúde e unha fonda aperta, irmao.

[Marisa Peral]

Es infinito el lagar del desierto.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

Alejandro en estado de gracia.
Inmenso todo ante un Desierto interminable.

Dejo tu primer verso y un final que describe Todo.

Felicidades y besos, querido amigo.

[Ramón Carballal]

Qué bien describes la sensación de soledad y desolación que transmite la imagen de un desierto. Me parece un excelente poema que va más allá de la descripción física de un desierto, hay algo en él que describe también la desolación interior del alma. Eso es lo que a mí al menos me ha transmitido. Enhorabuena una vez más por tu obra y un fuerte abrazo.

[Julio Gonzalez Alonso]

Nos has puesto a caminar por el desnudo desierto de la existencia y creo que ha servido para reconocernos, al menos en gran parte de las propuestas de este recorrido. Abrazo y salud, Alejandro.

[Alejandro Costa]

Es infinito el lagar del desierto.

Me encanta esta metáfora de inicio, muy sugerente y rica en matices, fermenta nuestro espíritu a través de la soledad y el silencio.

Mi querido Jandro, acabo de disfrutar de los versos de un poema simbólico de Ramón Carballal sobre el impacto de elementos y espacios naturales en la sensibilidad del poeta, sirviéndole ello de excusa para la reflexión a través de bellas imágenes y metáforas, que llevan a la palabra un poco más allá del aparente y cabal significado.
Encuentro esta hermosa algoría y no gana uno para emociones hoy.

Vuelvo a entrar en una introspección, travesía siempre incierta, por lo personal, del símbolo. El poema "Desierto" explora las paradojas inherentes a su entorno como una metáfora para reflexionar sobre la soledad, el poder supremo y la insignificancia.
¡Guau, qué gran acierto literario para darme a conocer un poco más de tu yo poético! Porque no has dejado de ser mi querido poeta en ningún momento; con ese tono melancólico, "perdido", "tétrico", "nada", "solitario" y "lejano"; resignado, "Nada" y "Todo ahora parece nada","Lo descomunal es demasiado pequeño cuando se encuentra solo","La lucha en solitario"; trágico a veces con el campo semántico "Tiránico" ,"Demoledor","Tétrico", "Descomposición","Lúgubre","Aires de asesino". Expresiones que pintan nuestra vida como un lugar oscuro y amenazante, cargado con una atmósfera de peligro y fatalidad. Todo ello es parte de tu firma poética.

Estimado amigo, logras capturar la complejidad y la belleza del entorno desértico para aplicarlo al pensamiento. El ritmo es pausado y reflexivo, lo que permite que cada imagen, cada metáfora, ocupe su silla pertinente en este banquete, en esta fiesta que me has regalado.

Feliz día y mucha salud

Pues, vaya, me das una gran alegría con este comentario haciendo referencia al gran Ramón.

Algo exagerado, por no decir demasiado.

Pero, mi gratitud es inmensa.

Un abrazo, amigo.

[Alejandro Costa]

Es infinito el lagar del desierto.

Las dunas se rizan con elegancia
al paso de los vientos reanimadores,
de los espejismos atesorados
por un sol relajado en el horizonte,
distinguidamente tirano y demoledor.

Las rocas se funden en ofrenda salvaje
bajo la mirada profunda de un suricata perdido,
un oasis en tétrica descomposición
y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino.

Al caer la noche,
todo se multiplica en antítesis al día,
el viento chilla, la temperatura desnuda su poder,
todo ahora parece nada,
y en la nada se esconde el todo más cruel.

Un diminuto grano de arena
ostenta el poder que le otorga la inmensidad,
lo mínimo se convierte en gigantesco,
lo gigantesco es descomunal,
más lo descomunal es demasiado pequeño
cuando se encuentra solo.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

Toda la vida transcurre en un desierto, con algunos espejismos verdes que nos engañan y obnubilan. Enhorabuena por este bello y clarividente poema, amigo Alejandro.

Tienes toda la razón.

Gracias, compañero.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

Es infinito el lagar del desierto.

Las dunas se rizan con elegancia
al paso de los vientos reanimadores,
de los espejismos atesorados
por un sol relajado en el horizonte,
distinguidamente tirano y demoledor.

Las rocas se funden en ofrenda salvaje
bajo la mirada profunda de un suricata perdido,
un oasis en tétrica descomposición
y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino.

Al caer la noche,
todo se multiplica en antítesis al día,
el viento chilla, la temperatura desnuda su poder,
todo ahora parece nada,
y en la nada se esconde el todo más cruel.

Un diminuto grano de arena
ostenta el poder que le otorga la inmensidad,
lo mínimo se convierte en gigantesco,
lo gigantesco es descomunal,
más lo descomunal es demasiado pequeño
cuando se encuentra solo.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

"... y un horizonte infinito, lúgubre, con aires de asesino." "La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano."
Me he permitido destacar los versos anteriores que para mi suponen la brega por el infinito de más allá del mar. Como afán de esperanza para nuestro susurro de viento.
Gracias por el canto, compañero.

Saúde e unha fonda aperta, irmao.

Gracias a tí por tu visita y tu agradable comentario.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

Es infinito el lagar del desierto.

La lucha en solitario
es un horizonte infinito y demasiado lejano.

Más que un infinito desierto.

Alejandro en estado de gracia.
Inmenso todo ante un Desierto interminable.

Dejo tu primer verso y un final que describe Todo.

Felicidades y besos, querido amigo.

Gracias, Marisa.

Buen comentario me has obsequiado.

Un beso enorme.

[Alejandro Costa]

Qué bien describes la sensación de soledad y desolación que transmite la imagen de un desierto. Me parece un excelente poema que va más allá de la descripción física de un desierto, hay algo en él que describe también la desolación interior del alma. Eso es lo que a mí al menos me ha transmitido. Enhorabuena una vez más por tu obra y un fuerte abrazo.

Me has leído la mente, Ramón.

El título y su desarrollo no es más que una metáfora, como bien describes.

Gracias.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

Nos has puesto a caminar por el desnudo desierto de la existencia y creo que ha servido para reconocernos, al menos en gran parte de las propuestas de este recorrido. Abrazo y salud, Alejandro.

Como siempre me dejas un comentario de donde aprender.

Siempre es un obsequio tu presencia.

Gracias, Julio.

Un abrazo.

[J. J. Martínez Ferreiro]

Hace un par de años estuve en las dunas del desierto de Merzouga en el sureste de Marruecos. Tuvimos de todo lluvia, viento y tarde doradas imposibles de describir, y sentí una parecida simbología a la que tú utilizas en este hermoso y evocador poema.

Todo un place de lectura, amigo Alejandro.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

Hace un par de años estuve en las dunas del desierto de Merzouga en el sureste de Marruecos. Tuvimos de todo lluvia, viento y tarde doradas imposibles de describir, y sentí una parecida simbología a la que tú utilizas en este hermoso y evocador poema.

Todo un place de lectura, amigo Alejandro.

Un abrazo.

Eres muy amable, amigo.

Me alegra saber que te ha gustado.

Un abrazo.