En el Colmado de oriente

[Armilo Brotón]

Para ti, Frodimir, hermano

En el Colmado de Oriente
hay una maleta, sin verso
para nosotros,
para contarnos historias sin palabras.
Un lunes regurgita otros días
y no sé cuántos más que piden silencio.
Entre las piernas de la noche,

          hay ojos,
          labios desesperados,
          ritos
          que añoran un beso.

Me sorprende
que se pida algo de amor en el colmado de Oriente,
donde hay sedas
que ni Sherezade pudo entretener con sus cuentos 
para morir vacía.	

Dicho lo indecible.

Gente como eres tú, como yo soy, 
sangre para los malditos,

un licor fuerte
que nos embriaga hasta tu sin-nombre
reclamando al sol
unas horas más, para no dormir mañana
ni morir temprano.

Rosas que sin prisa
rumian sus manos al caliente,
a tres rupias por destino.

Porque en el colmado de oriente
no hay rostro que se oponga
                ni a ti ni a mí .

Luego va el silencio 
 en      las      palabras
para saber si Dios está
                 entre alguna costilla, 
olvidado o durmiendo el sueño eterno,
en la desesperación de ser nosotros    	
 sus cojones.

Armilo Brotón

[Julio Gonzalez Alonso]

Me sorprende
que se pida algo de amor en el colmado de Oriente,
donde hay sedas
que ni Sherezade pudo entretener con sus cuentos 
para morir vacía.	

Este paseo por el mercado de Oriente me ha transportado, una vez más, a la experiencia de Estambul y la magia colorista de sus aromas, aunque lejos de los palacios persas. El último verso, grueso y áspero, nos vuelve del sueño. Un abrazo, Armilo. Salud.

[F. Enrique]

Hermano, eres el Bukowski más inspirado de todos los los callejones, el Henri Miller de nuestro triste país donde la izquierda no existe...

Un abrazo

[Ramón Castro Méndez]

Carape, cáspita... ¡qué barbaridad, bro! Te ha quedado relindo. El hermano Frodimir, no se siente merecedor de tan excelsas letras. No soy digno ya no de que entres en mi casa, sino de que pongas los pies en mi portal. Es ponerte la chilaba, sin nada más debajo, como los escoceses con las faldas, y se te sale la poesía a borbotones, como a Nilo. Enhorabuena, hermano, sin duda tienes mojo poético. Dixit.


Un abrazote, mi pana.

[Ricardo López Castro]

Para ti, Frodimir, hermano

En el Colmado de Oriente
hay una maleta, sin verso
para nosotros,
para contarnos historias sin palabras.
Un lunes regurgita otros días
y no sé cuántos más que piden silencio.
Entre las piernas de la noche,

          hay ojos,
          labios desesperados,
          ritos
          que añoran un beso.

Me sorprende
que se pida algo de amor en el colmado de Oriente,
donde hay sedas
que ni Sherezade pudo entretener con sus cuentos 
para morir vacía.	

Dicho lo indecible.

Gente como eres tú, como yo soy, 
sangre para los malditos,

un licor fuerte
que nos embriaga hasta tu sin-nombre
reclamando al sol
unas horas más, para no dormir mañana
ni morir temprano.

Rosas que sin prisa
rumian sus manos al caliente,
a tres rupias por destino.

Porque en el colmado de oriente
no hay rostro que se oponga
                ni a ti ni a mí .

Luego va el silencio 
 en      las      palabras
para saber si Dios está
                 entre alguna costilla, 
olvidado o durmiendo el sueño eterno,
en la desesperación de ser nosotros    	
 sus cojones.

Armilo Brotón

Espléndido.
Un estilo aguzado y afilado.
Un discurso severamente profundo y "jodido".
Generoso al compartir este gran trabajo poético en el foro.
Te apreciaba y lo sigo haciendo.
Abrazos y felicidad.

[Pascual Pérez]

Un poema sorprendente de fuerte personalidad y originalidad, como su autor, Armilo. Un fuerte abrazo!!

[Alejandro Costa]

Otra de tus locuras con ese mercado de Oriente como escenario.

Me sorprende
que se pida algo de amor en el colmado de Oriente,
donde hay sedas
que ni Sherezade pudo entretener con sus cuentos
para morir vacía.

Estos versos me han gustado mucho.

El final lo veo un tanto basto para un escrito. Por otro lado, está la libertad del poeta y la frescura que inyecta a sus versos.

No es una crítica, ya sabes que soy demasiado clásico al escribir.

Con todo, tiene ese don que encierran tus letras y me ha gustado.

Abrazos.

Salud, paz y felicidad.

[Alonso Vicent]

Cojones, que buen poema para esta gran superficie hija de los colmados.
Oriente o occidente en el lupanar de lo terrenal. No me sorprendió el poema, me gustó.
Abrazote Armilio, desde el bar de las esperas.

[Pilar Morte]

Es grato acercarse a la original forma de ver las cosas y la vida. No lo he visitado pero siento, con tus versos, el aroma y colores del colmado. Me ha gustado mucho leerte.
Un abrazo grande y salud

[Julio Bonal]

Poema de mucha fluidez (se detecta oficio y talento) que nos lleva sensiblemente a este final de altura, de mucha altura, que es la estrofa final. Muy bueno. Mas en los tiempos que corren.

Una abraçada.

[Ana Muela Sopeña]

Bellísimo este sorprendente lirismo con incursiones de realismo urbano

Me ha encantado tu colmado y todos los placeres que anuncia e insinúa...

Felicitaciones, Armilo
Un beso enorme
Ana

[Marisa Peral]

He disfrutado de tu recorrido por este Colmado de Oriente, por el que nos llevas con tu maestría lítica y embaucadora.
De principio a fin me ha gustado.

Y me has hecho viajar hasta Oriente, digamos por ejemplo el mercado flotante Khlong Lat Mayom - en Bangkok, Tailandia
En 1.979 fue una aventura y una experiencia única. Te doy las gracias por hacerme rememorar.

Felicidades a ti y a tu hermano Frodimir, destinatario de tu dedicatoria.

Un beso.

[Jorge Salvador]

Me gustó de principio a fin, es un gran poema que destila arte y saber hacer por todos sus poros. Por poner alguna objeción, coincido con Alejandro en que ese final bien hubiera merecido menos cojones, aunque ese es tu sello y tu estilo inconfundible que, por otro lado, a todos nos gusta.
Mis aplausos por esta extraordinaria entrega, querido amigo

[Armilo Brotón]

Este paseo por el mercado de Oriente me ha transportado, una vez más, a la experiencia de Estambul y la magia colorista de sus aromas, aunque lejos de los palacios persas. El último verso, grueso y áspero, nos vuelve del sueño. Un abrazo, Armilo. Salud.

Estimado Julio, gracias. El Colmado de oriente es una tetería de Granada, pipa de agua incluida, de ahí el nombre en mayúscula, no es capricho, perdida en la maraña de calles y sueños que nos legó Washington Irving. Cuando voy me teletransporta a Estambul, concretamente a los lugares análogos dentro de los cementerios; también a Marruecos, Túnez, Palestina y otros países hermanos.
Sobre el último verso, todos tenéis razón: es grosero. No supe encontrar la palabra para escribir la idea hombre en su carácter genésico, de Génesis primer libro. Le daremos vueltas, gracias por la sinceridad.

Un gran abrazo amigo

[Armilo Brotón]

Hermano, eres el Bukowski más inspirado de todos los los callejones, el Henri Miller de nuestro triste país donde la izquierda no existe...
Un abrazo

¡Ay hermano! ¡Cuán largo me lo fiais siendo tan breve el cobrarse! Puedo ser tan borracho como ellos pero el genio no se improvisa. Yo solo soy un cuentista Lèon. Cuando la resaca me lo permite escribo algunos recuerdos de lo vivdo, no tengo creatividad ninguna.
Un abrazo grande y gracias por ser tan amable conmigo