Estás…
Siempre vuelvo, tú me esperas y alientas.
Y cada vuelta a ti es como otro inicio…
Del mismo mundo.
Qué broma tan mezquina de alejar mis fantasmas
evitar los espejos,
la bisectriz de las esquinas,
qué inhóspito resulta el decorado.
Contigo, estar contigo,
nunca es estar contigo.
Es una condición
del alma.
Despiertas, yo te sigo,
enredado en tus sábanas,
pero solo despierto,
y todo lo demás lo hace el amor:
“Saber que el sentimiento tiene nombre,
incluso no saberlo,
hace crecer la magia.”
Una página sola escrita en tu diario
es una vida entera de silencios,
de latidos.
De palabras que sobran o han sobrado
has creado una piel para los dos.
Abrazo, incluso loco, más incluso, perdido,
tu cuerpo.
Incluso cuando nunca busque nada,
ni un recuerdo,
ni algo a lo que aferrarme,
sabré por todo esto que te digo
que sueño entre tus brazos,
bajo tu boca,
con tu sueño,
con todo callado,
con todos los misterios,
con lo imposible que resulta la luz,
yo le abriré mi ser a tu mirada.
Con distancia en el alma,
con susurros de aire,
con tu sombra,
con el resabio de tu aliento,
con tu beso a escondidas…
Me enamoro.
Siempre vuelvo, tú me esperas y alientas.
Y cada vuelta a ti es como otro inicio…
Del mismo mundo.
Qué broma tan mezquina de alejar mis fantasmas
evitar los espejos,
la bisectriz de las esquinas,
qué inhóspito resulta el decorado.
Contigo, estar contigo,
nunca es estar contigo.
Es una condición
del alma.
Despiertas, yo te sigo,
enredado en tus sábanas,
pero solo despierto,
y todo lo demás lo hace el amor:
“Saber que el sentimiento tiene nombre,
incluso no saberlo,
hace crecer la magia.”
Una página sola escrita en tu diario
es una vida entera de silencios,
de latidos.
De palabras que sobran o han sobrado
has creado una piel para los dos.
Abrazo, incluso loco, más incluso, perdido,
tu cuerpo.
Incluso cuando nunca busque nada,
ni un recuerdo,
ni algo a lo que aferrarme,
sabré por todo esto que te digo
que sueño entre tus brazos,
bajo tu boca,
con tu sueño,
con todo callado,
con todos los misterios,
con lo imposible que resulta la luz,
yo le abriré mi ser a tu mirada.
Con distancia en el alma,
con susurros de aire,
con tu sombra,
con el resabio de tu aliento,
con tu beso a escondidas…
Me enamoro.
