Gracias a ti, Raul, me alegra tu nota.Raul Muñoz escribió: ↑Sab, 23 Mar 2024 19:27 Muy bueno, Ignacio. Destila mucha sabiduría. Gracias por compartir.
Un abrazo.
Un abrazo.
Ignacio
Moderadores: J. J. Martínez Ferreiro, Rafel Calle
Gracias a ti, Raul, me alegra tu nota.Raul Muñoz escribió: ↑Sab, 23 Mar 2024 19:27 Muy bueno, Ignacio. Destila mucha sabiduría. Gracias por compartir.
Un abrazo.
Ignacio Mincholed escribió: ↑Lun, 24 Jun 2024 10:06Los epigramas de Albano son famosos por su lucidez, Antonia.Antonia Mauro escribió: ↑Mar, 19 Mar 2024 22:42Pero qué bien habla usted, señor.Ignacio Mincholed escribió: ↑Mar, 19 Mar 2024 19:30
Quiero creer que, en realidad, no hay tantos, o al menos eso espero, Alejandro; pero en su fullería cunden mucho. Siempre de la mano de alguien, siempre utilizando, siempre al arrime, o en su precaria autoridad de una soledad manifiesta solo construyen hacia abajo. Seducen con su abulencia, más allá de la falsedad, para encontrar inexplicablemente, lo que ellos creen acólitos con los que ir a pisar margaritas para sus propias loas, hasta que enfadan a algún rinoceronte y se apocan; pero vuelven, es una característica de la estupidez.
Gracias por la nota, me alegra.
Un abrazo.
Ignacio
Como diría Albano: los tontos no se acaban.
Felicità.
Un abrazo.
Un abrazo.
Ignacio
Entro a tus letras para felicitarte, tanto por el poema, como por la distinción y el contenido de este. Un abrazo.Ignacio Mincholed escribió: ↑Jue, 14 Mar 2024 16:10 ...
No es el tiempo la cosa que nos lleva o nos saca entre los corazones de los otros.
Fíjate en el vuelo indolente de las briznas de paja en primavera.
Necesarias para el grano, se acomodan a la luz, no pretenden ser otra cosa.
No abuses de la buena voluntad de quien te reciba, ni de aquellos a quienes pidas una cerilla y la enciendan por ti.
Respeta y admite. No uses a mujeres y hombres como peldaños, como piedras para asomarte al otro lado de la tapia; si te encuentras escaso de estatura ten en cuenta que las escaleras también se bajan.
Convencer no es seducir, la seducción es de mimbre aguado. Convence por ti, sin auparte a hombros de incautos como pretexto para cubrir los flojos argumentos con sonrisa de noche; igualmente, cuídate de emplear subterfugios con los templados, tienen alma de acero, flexible pero no permanentemente elástica.
Forja la tuya con la temperatura adecuada, báñala en aceite y comprueba su rectitud. Si te equivocas, no te excuses, no culpes, y vuelve a la forja con humildad. Si no, continuará tan débil como peltre.
Tampoco busques cómplices entre los templados, no los encontrarás dispuestos a la connivencia para el auxilio egocéntrico;
te advertirán, tenlo presente, considéralo, si acaso te servirán de oriente.
No ofendas al que ignora, enseña sin la soberbia del necio. No ofendas a quien te tienda la mano, agradece sin la mezquindad del vanidoso. Si ignoras, acéptalo e instrúyete sin trampantojos. Si tiendes la mano, hazlo con nobleza. De otro modo no crecerás, te agostarás endurecido pero frágil, dependiente perpetuo del agua de los otros, de la que solo te llegarán gotas por el engaño momentáneo en el comercio de la amistad voceada; siempre fruto de no beber el vino por deleite.
Aférrate al viento de la honestidad, al que inflama de azul las llamas del pensamiento.
Evita contribuir al vendaval seductor de los ruines, solo reduce las brasas.
Afírmate con tus actos, y no con las palabras.
Aléjate de la jactancia, el petulante se desdibuja a trasluz al proclamarse césar y bufón de amores y saberes.
Mide antes de cortar. Yerras si subestimas.
Tal vez te quedará más claro si resumo:
No pises las margaritas, no enfades a los rinocerontes.
(Sin fecha)...
Gracias, Hallie, por tu atención lectora y tu generosidad.Hallie Hernández Alfaro escribió: ↑Lun, 25 Mar 2024 8:58 .
La he leído y he llenado las pupilas de su genialidad. No exagero, para nada. Es una de esas pocas obras que ya (sin pretenderlo, lo sé) tienen su lugar en la memoria poética. Advertencia del buen sentido común hecha pieza de arte. Es poética Mincholed, se extiende para penetrar consciencias y sanar humanas lesiones.
Ovación sostenida, ya sabes hasta que duelen las palmas.
Un abrazo.
Gracias, Rafel, aprecio tus palabras y considero lo que dices.Rafel Calle escribió: ↑Mié, 10 Abr 2024 13:30 De lo mejor que te he leído en los muchos años que llevas publicando en Alaire, amigo Ignacio. Es uno de esos trabajos que pautan la obra de un autor.
Vaya mi enhorabuena junto a un cordial abrazo.
Ara, gracias por tu nota y el comentario.
Te agradezco la consideración, Rafel.Rafel Calle escribió: ↑Sab, 08 Jun 2024 10:34 Arriba con este entrega tan hermosa como interesante de Ignacio.
Qué razón tienes, J.J., deberíamos practicar más la indulgencia, relajar un poco los cumplimientos propios y ajenos sin dejar por ello de apuntar en altura.J. J. Martínez Ferreiro escribió: ↑Sab, 08 Jun 2024 18:12 Muy gustó mucho, amigo Ignacio, esta instrucciones del viaje por la vida, con la intención de hacer más honorable la obra que vamos creando y también la relación con los compañeros de a bordo. Después de leer el texto me vino a la cabeza el Juan de Mairena, ese profesor apócrifo de Antonio Machado.
Creo que después de mucho tiempo de mirarse al espejo, uno sabe realmente quién es. En esa soledad del enfrentamiento con uno mismo, al final la mentira y la falsedad no tienen cabida. Mejor es irse preparado y enfrentarse más o menos “guapo” al inapelable encuentro, si uno logra gustarse un poco, sé es más feliz e indulgente con las miserias propias y ajenas.
Todo un placer de lectura.
Un fuerte abrazo.
Eres muy generosa, Marisa; gracias por la nota.Marisa Peral escribió: ↑Sab, 08 Jun 2024 19:05 Sincero y necesario cuaderno de bitácora, Ignacio.
Como dice Carmela, este podría ser un poema del año, o mejor, un tratado de vida.
Felicidades.
Un abrazo.
Gracias, Alejandro; me alegra tu confirmación sincera.Alejandro Costa escribió: ↑Dom, 23 Jun 2024 12:02 Esto no hace más que darme la razón al comentario que en su día te hice.
El poema es magnífico, un poemazo, y era de esperar que llegara algún galardón.
Mi más sincera enhorabuena. Muy merecido.
Un abrazo.
Salud, paz y felicidad.