Mi niña ríe, mi niña llora,
y se pregunta si así ha de ser.
Observa cómo hora tras hora
todo tu mundo se te decora
con risa y llanto, tú ¿no lo ves?
Siente al corazón que late
él te enseñará la magia
que la razón no debate
si es el mundo un disparate
de alegría y de nostalgia.
Todo comienza y todo muere,
o tal vez sientas que es al revés,
cosas que alegran, otras te hieren,
y mientras tanto sin que lo esperes
la vida ocurre, tú ¿no lo ves?
Las alegrías hay que beberlas
que son un vino embriagador,
y son al alma como las perlas
que si son puras sientes al verlas
del blanco nácar el resplandor.
Otros momentos son amarguras
si cada plano tiene el envés,
y todo es parte de esta locura
pues con la luz siempre hay oscura
penumbra y sombra, tú ¿no lo ves?
Porque anochece y porque amanece
vemos la luna y vemos el sol,
y este camino nunca adolece
de ascua y llama y pertenece
a los que quieren sentir su rol.
Vive este mundo, no te arrepientas,
con su albedrío y con su ley,
nunca te escondas, nunca te mientas,
que es necesario que pronto aprendas
que nada es vano, tú ¿no lo ves?