
Alonso Fernández de Avellaneda
Malo es todo aquello que para el fin deseado
vale poco (El Quijote de Avellaneda, cap. XVII)
Si para el fin querido vale poco
todo aquello que es malo, hagamos cuenta
de cuan poco ha valido aquí la afrenta
robándole a Cervantes este loco.
Avellaneda dicen en el zoco
ser el avellanado que dio a imprenta
esta segunda parte donde asienta
su torpeza escribiendo sin sofoco
a Dulcinea desterrada; al triste
hidalgo sin amor; al escudero
simple, ramplón, rufián y avaricioso.
¡Que don Quijote sin amor no existe!
¡Que no hay Sancho más fiel y aventurero!
¡Que no hay sin Dulcinea mundo hermoso!
González Alonso