Panal #3

[Àlex Gállego]

3

Le traje manzanas a mi lobezna
y nos dimos cuenta de la luz
que caía sobre nuestra cabeza como lluvia;
era viernes por la tarde
cuando nos olía el suelo a cuero; la piel a mar
y las alas de ángel a quemado.

Entonces recorrimos nuestro conocido camino,
de la mano y de las bocas,
y salí de mis adentros acuoso,
salí adelante meloso y a pisotadas.
Me encontré con el sabor a sueño en las encías,
con su lengua en mi cuello
y unas ganas de follarle irresistibles.

[Javier Dicenzo]

Le traje manzanas a mi lobezna
y nos dimos cuenta de la luz
que caía sobre nuestra cabeza como lluvia;
era viernes por la tarde
cuando nos olía el suelo a cuero; la piel a mar
y las alas de ángel a quemado.

me llevo el cero y me gustó la manera de decir, un placer.

[Ramón Carballal]

Todo un cúmulo de sensaciones tu poema. Grata lectura. Un abrazo, Álex.

[Ramón Castro Méndez]

Me ha gustado este Panal 3. Me gusta tu forma de abordar los poemas, yo diría, si me lo permites, a quemarropa.

Mi aplauso.

Un fuerte abrazo.

[Pilar Morte]

Me gustó este panal que lleva miel y amor. Un placer leerte.
Abrazos

[Alejandro Costa]

Potente y sensual poema.

Me ha gustado.

Un abrazo.

[Ana Muela Sopeña]

Hola, Álex:

Me ha encantado tu poema lleno de sensualidad y sin eufemismos.

Felicidades
Un abrazo
Ana

[J. J. Martínez Ferreiro]

"era viernes por la tarde
cuando nos olía el suelo a cuero; la piel a mar
y las alas de ángel a quemado"

Magnífico, Alex!! con un lenguaje poético muy original e imaginativo.

Todo un placer de lectura.

Abrazos y salud.

[Àlex Gállego]

Gracias a todxs por vuestros comentarios y por dedicar vuestro tiempo a la lectura

[Àlex Gállego]

Le traje manzanas a mi lobezna
y nos dimos cuenta de la luz
que caía sobre nuestra cabeza como lluvia;
era viernes por la tarde
cuando nos olía el suelo a cuero; la piel a mar
y las alas de ángel a quemado.

me llevo el cero y me gustó la manera de decir, un placer.

Me alegra que disfrutaras la lectura Javier.

un abrazo

[E. R. Aristy]

3

Le traje manzanas a mi lobezna
y nos dimos cuenta de la luz
que caía sobre nuestra cabeza como lluvia;
era viernes por la tarde
cuando nos olía el suelo a cuero; la piel a mar
y las alas de ángel a quemado.

Entonces recorrimos nuestro conocido camino,
de la mano y de las bocas,
y salí de mis adentros acuoso,
salí adelante meloso y a pisotadas.
Me encontré con el sabor a sueño en las encías,
con su lengua en mi cuello
y unas ganas de follarle irresistibles.

La sexualidad es lo mas sorprendente. u poema celebra todas las tensiones y todos los alivios con gran arte y salero, Alex. Abrazos.

[Ana García]

Todo en tu poema aporta sensualidad: la luz en el pelaje o en el cuero con sus diferentes aromas. Las manzanas y esa forma de saborear la fruta. Todo, todo lleva al último verso, arrojadizo como un dardo y bestial como los humanos lobunos.
Me ha gustado.
Un saludo.

[Hallie Hernández Alfaro]

3

Le traje manzanas a mi lobezna
y nos dimos cuenta de la luz
que caía sobre nuestra cabeza como lluvia;
era viernes por la tarde
cuando nos olía el suelo a cuero; la piel a mar
y las alas de ángel a quemado.

Entonces recorrimos nuestro conocido camino,
de la mano y de las bocas,
y salí de mis adentros acuoso,
salí adelante meloso y a pisotadas.
Me encontré con el sabor a sueño en las encías,
con su lengua en mi cuello
y unas ganas de follarle irresistibles.

Magnífico trabajo, Àlex.
Fiebre, lucidez, ingenio.
Placer de lectura; gracias por estar.

Un abrazo.